El Gobierno de Colombia acepta que la Iglesia medie con la guerrilla
El presidente Uribe avala el 'predi¨¢logo'
?Qu¨¦ es un predi¨¢logo? Es la pregunta que todos se hacen hoy en Colombia, desde que el presidente ?lvaro Uribe acept¨® el lunes esta f¨®rmula propuesta por la Iglesia para negociar el fin del conflicto con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional (ELN).
La idea la formul¨® el presidente de la Conferencia Episcopal, Monse?or Luis Augusto Castro, este fin de semana: "Uribe puede dar un viraje en su pol¨ªtica de paz hacia la soluci¨®n negociada del conflicto y buscar el cese del fuego por otra alternativa que no sea la imposici¨®n, sino un predi¨¢logo". Para el obispo, es hora de cambiar la "respuesta de guerra" que se ha dado durante los tres a?os de este Gobierno.
Lo dijo el mismo d¨ªa en que acept¨® el perd¨®n del ELN por haber disparado y asesinado, el 15 de agosto, -"por equivocaci¨®n" seg¨²n admitieron los autores-, a dos sacerdotes que viajaban por una carretera del noreste del pa¨ªs. La idea del alto jerarca -uno de los que m¨¢s ha intercedido por la paz- es que miembros de los grupos guerrilleros se re¨²nan, fuera del pa¨ªs, con delegados del Gobierno y sin condiciones. Para Monse?or Castro la exigencia de un cese unilateral del fuego, impuesta por el Ejecutivo para cualquier acercamiento, se ha convertido en una barrera insuperable.
El aval del presidente despert¨® moderadas esperanzas y muchos interrogantes. Se sabe que las FARC han rechazado sistem¨¢ticamente la idea de una reuni¨®n en el extranjero. Aseguran que cuando lo han hecho han tenido problemas de seguridad. El ELN, por su parte, recibi¨® en junio pasado una propuesta similar por parte del Gobierno: iniciar di¨¢logos fuera del pa¨ªs, sin cese de hostilidades.
Para el analista Vicente Torrijos, predi¨¢logo es lo que la Iglesia ha hecho en todo momento, intentando aproximar a las partes. La diferencia es que ahora se har¨¢ con el aval expl¨ªcito del Ejecutivo y los contenidos ser¨¢n distintos. "El Gobierno descubri¨® que la diplomacia del micr¨®fono tiene un l¨ªmite -las partes se han comunicado a trav¨¦s de Internet y de los medios de comunicaci¨®n- y que se requiere presencia f¨ªsica". Con las FARC la prioridad es definir temas puntuales sobre el intercambio humanitario -para lograr la libertad de los secuestrados-, y con el ELN se prev¨¦ iniciar un di¨¢logo sobre los secuestros y la financiaci¨®n de sus tropas.
Torrijos asegura, adem¨¢s, que la "elasticidad controlada" que ha manejado el Presidente en los dos ¨²ltimos meses en materia de paz tiene que ver con su posible reelecci¨®n. La Corte Constitucional debe decidir pr¨®ximamente si avala o no la candidatura de Uribe a las elecciones de mayo.
El analista piensa que este tema tambi¨¦n estimula a la guerrilla, "ansiosa de lograr objetivos similares". Es posible que inicien el di¨¢logo, para luego levantarse de la mesa y echarle la culpa al presidente y posible candidato Uribe. "La reelecci¨®n", concluye Torrijos, "est¨¢ estimulando a las dos partes a que fructifique un di¨¢logo aunque ¨¦ste fracase; es un manejo oportunista".
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