Mandelson teme desabastecimiento por la crisis del textil con China

El comisario europeo de Comercio, Peter Mandelson, elev¨® ayer a los Gobiernos de la UE su propuesta para resolver el problema de los cargamentos de textil procedente de China retenido en las fronteras comunitarias, tras advertir en sede parlamentaria de que el rechazo de su plan supondr¨ªa desabastecimiento en los comercios, graves da?os para las peque?as compa?¨ªas y ropa m¨¢s cara para los consumidores. El comisario hab¨ªa ironizado el d¨ªa anterior sobre los que hablaban de desabastecimiento.

La crisis del textil chino avanza a trancas y barrancas hacia una soluci¨®n en medio de una cacofon¨ªa de declaraciones y contradeclaraciones de las partes interesadas, a las que se ha sumado el propio comisario, llamado a arbitrar entre unos y otros. Mientras, millones de prendas procedentes de China siguen retenidas en las fronteras, dado que han superado ya el cupo de importaciones pactado entre Bruselas y Pek¨ªn el 10 de junio pasado. Los ¨¢nimos est¨¢n muy encrespados y ayer, por primera vez, productores y comerciantes pusieron el grito en el cielo simult¨¢neamente, mientras Mandelson se contradec¨ªa a s¨ª mismo.

Quien el lunes ironizaba y calificaba de exageradas las advertencias de los que han esgrimido el espectro del desabastecimiento en este oto?o, ayer dec¨ªa que no hab¨ªa que descartarlo. "No creo que est¨¦n ni remotamente justificadas esas historias de miedo sobre desabastecimiento de prendas comparables a las de la ¨²ltima guerra mundial", dijo el comisario el lunes, reci¨¦n llegado de sus vacaciones y dispuesto a resolver la crisis que se ha enconado en agosto.

Menos de 24 horas despu¨¦s, el panorama hab¨ªa cambiado radicalmente. Ante la comisi¨®n de Comercio Exterior del Parlamento Europeo, Mandelson se?al¨® que la soluci¨®n al conflicto pasa por la liberaci¨®n de las decenas de millones de prendas made in China que se apilan a las puertas de la Uni¨®n. "Las consecuencias de no hacerlo ser¨¢n graves da?os para muchos peque?os detallistas y negocios de tama?o medianos", empez¨® la retah¨ªla. "Podr¨ªa suponer algunos desabastecimientos en oto?o y, mucho m¨¢s probable, precios m¨¢s altos para muchos de nuestros ciudadanos que no pueden pagar m¨¢s por su ropa", a?adi¨®.

Importaciones a Espa?a

Mandelson revel¨® ayer que los pa¨ªses que m¨¢s reclaman la limitaci¨®n de las importaciones, como Espa?a o Francia, est¨¢n entre los que m¨¢s licencias de importaci¨®n han concedido. Mandelson, que encuentra resistencias a sus propuestas de flexibilidad, sac¨® los colores a algunos Gobiernos, entre los que hay no pocos que se oponen a la tolerancia que ¨¦l propugna: "Tras la firma del acuerdo, los Estados miembros concedieron gran n¨²mero de licencias de importaci¨®n, en particular Italia, Francia, Alemania, Espa?a, Reino Unido y, en menor medida, la Rep¨²blica Checa y Hungr¨ªa".

Los Gobiernos, que anoche recibieron las propuestas de Mandelson para salir de la crisis y hoy las discutir¨¢n entre s¨ª en la reuni¨®n de embajadores de Bruselas, viven estos d¨ªas azuzados por los distintos grupos de presi¨®n. Euratex, la patronal del sector de la producci¨®n textil, que inspir¨® la acci¨®n que llev¨® al acuerdo de Shanghai, hab¨ªa abandonado el campo en agosto a Eurocommerce, que defiende a importadores y comerciantes. Ayer volvi¨® a la ofensiva.

Eurocommerce agradec¨ªa a Mandelson sus esfuerzos y consideraba llegada la hora de que los Gobiernos de la Uni¨®n act¨²en con responsabilidad. "Los productores no ser¨¢n perjudicados si la UE incrementa unilateralmente su cuota para 2005, mientras que muchos detallistas e importadores se ahorrar¨¢n graves da?os", coment¨® Peter Bernert, presidente del grupo.

Para Euratex, lo que hace el comercio es tratar de evitar un oneroso error de c¨¢lculo. Importadores y distribuidores encargaron un aluvi¨®n de productos, "perfectamente sabedores de los riesgos que ello pod¨ªa suponer a la luz de la cl¨¢usula especial de salvaguardia incluida en el acuerdo de acceso de China a la Organizaci¨®n Mundial de Comercio", se?al¨® Filiep Libeert, presidente de los fabricantes europeos. "Nadie deber¨ªa alegar que no era consciente de los riesgos que implicaba", a?adi¨®.