"El museo es un lugar de descubrimiento, que es sin¨®nimo de aprendizaje"
El Museo de Arte Moderno de Nueva York, el MOMA, fue uno de los primeros en crear un departamento de educaci¨®n del que es responsable, desde hace dos a?os, Susan McCullough. El programa empleado, la Did¨¢ctica del arte y el patrimonio, ha sido exportado a diferentes museos de Europa y Am¨¦rica Latina y emplea el m¨¦todo del pensamiento visual: basado en plantear debates sobre las obras de arte y fomentar as¨ª valores c¨ªvicos entre los espectadores. McCullough ha formado a 40 profesores de la ESO que se encargar¨¢n de aplicar este m¨¦todo en sus centros escolares entre los alumnos de 9 a 12 a?os en Madrid.
Pregunta. ?C¨®mo puede ayudar un museo a los colegios en la formaci¨®n de los alumnos?
Respuesta. Sirve para acercar el arte a las familias y a los alumnos que, de otro modo, o no llegar¨ªan a los museos o estar¨ªan algo perdidos. Pero tambi¨¦n el departamento educativo de un centro de arte debe salir de las salas y ense?ar arte m¨¢s all¨¢, tambi¨¦n en las aulas. Con el programa Did¨¢ctica del arte los profesores, previamente entrenados, imparten sesiones en las aulas con diapositivas antes de llevar a los chicos al museo. Una vez en el museo descubren lo que no se ve¨ªa en la diapositiva. No s¨®lo aprenden de arte, sino que aprenden con el arte.
P. ?Qu¨¦ aprenden con el arte?
R. Intentamos aportar valores, integrar lo que les explicamos en el museo con sus curr¨ªculos educativos de las escuelas. Que los chicos relacionen lo que est¨¢n viendo con el mundo que les rodea y lo que les ense?an en clase. Aprenden a escucharse, a razonar, argumentar, convencer a los otros y al final se forman ciudadanos tolerantes. Por ejemplo, el profesor nos comenta que le gustar¨ªa trabajar con el concepto de identidad y recurrimos a la galer¨ªa de retratos donde a los chicos se les pregunta qu¨¦ ven, c¨®mo creen que es el personaje, c¨®mo interpretan el lenguaje corporal... La obra de arte es un documento a interpretar, a descubrir, para que los ni?os razonen el porqu¨¦ de las cosas, que aprendan a enriquecerse de las diferencias, a ser humildes y escuchar.
P. ?Qu¨¦ aporta el museo que no se pueda tener en un aula?
R. El museo es un lugar de descubrimiento, que es un sin¨®nimo de aprendizaje. Un entorno donde se est¨¢ seguro, las preguntas son abiertas y las respuestas tambi¨¦n, el ni?o se siente seguro porque no le est¨¢n poniendo notas. Adem¨¢s, el aprendizaje de la est¨¦tica da pie a muchas cosas que no se aprenden en un aula. Un alumno inmigrante que no conoce el sistema educativo espa?ol y que no interviene en clase por verg¨¹enza o por no saber qu¨¦ decir s¨ª puede participar en el museo porque le preguntan cosas sobre su percepci¨®n, sobre lo que ve.
P. ?C¨®mo se puede explicar un cuadro de Kandinski a un ni?o de 10 a?os y relacionarlo con su mundo?
R. Intentamos que sientan cierto inter¨¦s por lo que ven, que lo relacionen con algo con lo que ya est¨¢n familiarizados. Les preguntamos qu¨¦ sienten al ver un cuadro determinado, lo que les sugiere, a qu¨¦ les recuerda y vamos guiando ese di¨¢logo hasta donde nos interesa. Al final no es tanto que sepan de Kandinski como que se sientan ¨²tiles, que lo que piensan importa, que su opini¨®n es v¨¢lida para el grupo y que sientan que sirve para entablar una discusi¨®n, desarrollar un vocabulario y hablar de lo que sienten ante un cuadro.
P. ?C¨®mo miran los ni?os el arte?
R. Siempre sorprende su sensibilidad especial. Por ejemplo en las Se?oritas de Avignon, un cuadro que habla de s¨ªfilis, ellos, en muchas ocasiones, lo identifican con el sida, una enfermedad de este siglo. Creo que es una de las cosas m¨¢s importantes, que los museos sean un espacio para crear ciudadanos, seres pensantes. Pero tambi¨¦n un ni?o de cuatro a?os puede acercarse al arte y pensarlo, por ejemplo, a trav¨¦s de animales, de los sonidos que hacen, de sus dibujos sobre lo que han visto.
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