Espa?a perseguir¨¢ los genocidios aunque no haya v¨ªctimas espa?olas
El Constitucional anula resoluciones del Supremo y de la Audiencia
El Tribunal Constitucional respald¨® ayer la tesis defendida por la premio Nobel Rigoberta Mench¨², Comisiones Obreras y varias asociaciones de derechos humanos, seg¨²n la cual la justicia espa?ola deber¨¢ investigar sin restricciones los delitos de genocidio, terrorismo y torturas cometidos en Guatemala entre 1978 y 1986. El Constitucional anula sendas resoluciones del Tribunal Supremo y de la Audiencia Nacional al respecto.
La decisi¨®n del alto tribunal es de gran trascendencia pues implica que a partir de ahora el principio de jurisdicci¨®n universal para perseguir los delitos de genocidio primar¨¢ sobre el principio de subsidiariedad o sobre la existencia o no de intereses nacionales. Es decir, la justicia espa?ola deber¨¢ investigar los hechos sin que sea necesario demostrar que no se est¨¢n persiguiendo esos delitos en el pa¨ªs en el que se cometieron, ni que hubo v¨ªctimas espa?olas u otros aspectos que justifiquen el inter¨¦s de Espa?a. Se trata de que delitos grav¨ªsimos no queden impunes.
El 2 de diciembre de 1999, Rigoberta Mench¨² denunci¨® en la Audiencia Nacional diversos hechos cometidos en Guatemala entre 1978 y 1986 calificados como genocidio, torturas, terrorismo, asesinatos y detenciones ilegales. Entre ellos se inclu¨ªa el asalto a la Embajada espa?ola en Guatemala en 1980, en la que resultaron muertas 37 personas, y los asesinatos de varios sacerdotes espa?oles y de otras nacionalidades.
Pero el fiscal de la Audiencia Nacional solicit¨® el archivo porque entend¨ªa que Espa?a no era competente para juzgar los hechos.
Sin embargo, el juez central 1 de la Audiencia Nacional declar¨® su competencia y realiz¨® diversas pesquisas. Pero el fiscal recurri¨® la decisi¨®n y el pleno de la Sala de lo Penal, decidi¨® que se archivase el caso, porque aunque reconoc¨ªa el principio de jurisdicci¨®n universal, se?alaba que era prioritaria la justicia guatemalteca y no se hab¨ªa acreditado la negativa de jueces de aquel pa¨ªs para perseguir esos delitos.
Un nuevo recurso al Tribunal Supremo, obtuvo una resoluci¨®n diferente. En este caso, el alto tribunal, por una exigua mayor¨ªa de ocho votos a favor y siete en contra, resolvi¨® que Espa?a pod¨ªa investigar los hechos, pero siempre que se demostrase un v¨ªnculo o conexi¨®n con un inter¨¦s nacional espa?ol.
Revolc¨®n al Supremo
El Constitucional, sin embargo, en una sentencia de la que ha sido ponente el vicepresidente Guillermo Jim¨¦nez S¨¢nchez, da un revolc¨®n al Supremo, al se?alar que resulta "harto discutible" que la exigencia de v¨ªnculo o conexi¨®n con un inter¨¦s nacional sea una "costumbre internacional". Incluso llega a decir que las resoluciones alemanas citadas por el Supremo como precedentes no representan el estado de la cuesti¨®n, pues resoluciones posteriores dictadas en dicho pa¨ªs avalan el principio de jurisdicci¨®n universal sin necesidad de v¨ªnculos con intereses nacionales y que "existen multitud de precedentes en Derecho Internacional que avalar¨ªan la postura contraria a la seguida por el Tribunal Supremo".
El Constitucional reconoce la prioridad de la justicia guatemalteca para perseguir esos delitos, pero agrega que se deben investigar en Espa?a, sin tener que probar que all¨ª no se investigan, porque la finalidad del Convenio contra el Genocidio es que cr¨ªmenes tan atroces no queden impunes. La exigencia impuesta por el Supremo de que las v¨ªctimas ten¨ªan que ser espa?olas, es para el Constitucional "un requisito a?adido no contemplado en la ley" que es contrario a los fines de la persecuci¨®n universal.
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