Darwin o Dios en las escuelas de EE UU
Once padres piden a un juez federal de Pensilvania que impida la ense?anza de la teor¨ªa del 'dise?o inteligente' o creacionismo
?Cre¨® Dios al hombre a su imagen y semejanza? ?O procede de un proceso evolutivo de miles de millones de a?os? Creacionismo frente a evoluci¨®n. El tema es un viejo conocido de los estadounidenses, no en vano la mitad de los ciudadanos del pa¨ªs m¨¢s rico del planeta o no sabe o no cree que los seres humanos hayan "evolucionado". Esta semana la teor¨ªa de la evoluci¨®n y el llamado Dise?o Inteligente han ocupado la sala de un tribunal federal. En Dover, un peque?o pueblo rural de Pensilvania, la religi¨®n entr¨® disfrazada en las clases de biolog¨ªa de un instituto a trav¨¦s del Dise?o Inteligente -defendido por el presidente George W. Bush-, nombre que no es m¨¢s que la nueva envoltura con la que los fundamentalistas cristianos est¨¢n presentando la vieja tesis del creacionismo b¨ªblico y el rechazo a la teor¨ªa de la evoluci¨®n formulada por Charles Darwin.
La mitad de los estadounidenses no sabe o no cree que el hombre haya evolucionado
Once padres de familia, apoyados por la mayor parte de la comunidad cient¨ªfica y por la Uni¨®n Americana para las Libertades Civiles, as¨ª como por Americanos Unidos por la Separaci¨®n de Iglesia y Estado, se querellaron el a?o pasado contra el consejo educativo del centro cuando tuvieron noticia de que a sus hijos adolescentes les ense?aban la teor¨ªa del Dise?o Inteligente. Los profesores entraban en el aula y afirmaban: "La teor¨ªa de la evoluci¨®n no es un hecho. Hay ciertas brechas en ella para las cuales no existe evidencia, y los estudiantes deb¨¦is ser estimulados para mantener la mente abierta". El libro de texto al que les refer¨ªan era Sobre pandas y personas, la biblia del Dise?o Inteligente. Esta teor¨ªa -que no rechaza de plano la evoluci¨®n- sostiene, sin embargo, que la vida en la Tierra es demasiado compleja para ser explicada por las mutaciones gen¨¦ticas. Por tanto, debe de existir un "dise?ador inteligente" detr¨¢s del proceso evolutivo. Uno de los profesores del instituto, William Buckingham, lleg¨® a criticar a un alumno en una reuni¨®n del consejo escolar por estudiar la teor¨ªa de la evoluci¨®n y asegur¨® que al adolescente le "hab¨ªan lavado el cerebro". Buckingham justific¨® el empleo de esta teor¨ªa porque alguien ten¨ªa que "defender a Jes¨²s". Su mujer, Charlotte, citaba vers¨ªculos del Viejo Testamento durante las juntas, seg¨²n aseguraron testigos durante el juicio esta semana.
Las discusiones en el tribunal ser¨¢n cruciales para que el juez federal John Jones III determine si el consejo directivo ha violado la cl¨¢usula constitucional que establece la separaci¨®n entre la Iglesia y el Estado, pilar fundamental de la Constituci¨®n americana, como aseguran los querellantes que sucede. No es la primera vez que dos versiones opuestas sobre el origen de la vida se enfrentan en un tribunal estadounidense. En 1925, cuando incluso en los c¨ªrculos cient¨ªficos la teor¨ªa de la evoluci¨®n era controvertida y sus detractores la asociaban al ate¨ªsmo, tuvo lugar el que fue conocido como "el juicio del mono". En aquel juicio se acusaba al profesor John Scopes de violar una ley de Tennessee -Butler Act-, que declaraba ilegal "para cualquier profesor de cualquier universidad o escuela p¨²blica ense?ar cualquier teor¨ªa que niegue la historia de la Creaci¨®n Divina del hombre, como muestra la Biblia, y ense?ar en cambio que el hombre desciende de un orden inferior de animales".
Scoper fue declarado culpable y condenado a pagar una multa de 100 d¨®lares. La decisi¨®n fue apelada ante el Supremo y Scopes qued¨® absuelto por una cuesti¨®n t¨¦cnica: ning¨²n tribunal de distrito pod¨ªa cobrar multas superiores a los 50 d¨®lares. Scopes gan¨® la batalla y su victoria fue la del triunfo de la ciencia y el progreso ante el dogma irracional. La confusi¨®n entre pensamiento cient¨ªfico y religi¨®n est¨¢ de nuevo ante un tribunal federal. Lo m¨¢s probable es que sea el Tribunal Supremo el que finalmente determine si el Dise?o Inteligente debe ser ense?ado en las escuelas o debe quedarse fuera de ellas.
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