Maragall acepta las condiciones de los tres partidos para cambiar el Gobierno

El presidente de la Generalitat de Catalu?a, Pasqual Maragall, liquid¨® ayer en tres minutos -de un discurso de m¨¢s de una hora y media en el Parlamento aut¨®nomo- el asunto que ha sacudido la pol¨ªtica catalana en los cuatro ¨²ltimos d¨ªas: su pretendida y frustrada reestructuraci¨®n del Gobierno. Maragall reiter¨® su prop¨®sito de llevar adelante la reforma, pero consciente de la desautorizaci¨®n que ha sufrido por parte de las formaciones que le sustentan (Partit dels Socialistes, Esquerra Republicana e Iniciativa per Catalunya), anunci¨® que la pospondr¨¢ a los pr¨®ximos "d¨ªas o semanas" tras abrir un periodo de consultas. En principio no ser¨ªa antes del 2 de noviembre, fecha en que el pleno del Congreso debe tomar en consideraci¨®n el proyecto de Estatuto catal¨¢n.

"Nadie tiene tantos elementos como yo para evaluar la oportunidad de los cambios", afirma el presidente

Maragall dedica tres minutos a la crisis en su discurso del debate de pol¨ªtica general

El presidente catal¨¢n aplaza la reestructuraci¨®n tras el jaque de los partidos que le sustentan

Todos los diputados de la C¨¢mara catalana esperaban expectantes la intervenci¨®n del presidente de la Generalitat en el inicio del debate de pol¨ªtica general en la ma?ana de ayer. Y no precisamente por conocer los objetivos del Gobierno catal¨¢n que deb¨ªa marcar Maragall para los pr¨®ximos meses. La atenci¨®n se centraba en c¨®mo el presidente explicaba la reciente crisis y c¨®mo sal¨ªa airoso de ese atolladero tras ver abortadas sus primeras intenciones.

Las palabras de Maragall, al principio de su discurso, fueron similares a las que hab¨ªa dirigido horas antes a los miembros de su Gobierno en la reuni¨®n semanal del Consell Executiu. A pesar de la tormenta desatada, Pasqual Maragall anunci¨® que continuar¨¢ adelante con esta reforma porque, reiter¨®: "Es una prerrogativa del presidente a la que no podr¨ªa renunciar sin falta grave de mis obligaciones".

No obstante admiti¨® que las "recientes circunstancias", que eludi¨® concretar, no son "las m¨¢s id¨®neas" para llevar a cabo un cambio de consejeros de forma inmediata. Anunci¨®, como ya hizo en un comunicado oficial la noche del domingo, que abrir¨¢ un proceso de consultas con los dirigentes del PSC, ERC e ICV para "evaluar las condiciones en que se han de producir estos necesarios cambios". ?sta es la condici¨®n exigida el lunes por las ejecutivas de los tres partidos. Y para que no se repitan informaciones que puedan malograr su objetivo lo har¨¢, dijo, "con la discreci¨®n necesaria para garantizar su eficacia" [de la reestructuraci¨®n gubernamental].

Maragall quiso, con sus palabras, reafirmar su autoridad como presidente de la Generalitat por encima incluso de la opini¨®n que puedan defender las formaciones del tripartito. Lo expres¨® en tres ocasiones. La primera, para rebatir las cr¨ªticas de socialistas y republicanos sobre la oportunidad de emprender la crisis de Gobierno: "Supongo que nadie pondr¨¢ en duda que soy quien tiene m¨¢s elementos para evaluar la oportunidad de una iniciativa de este orden". La segunda, cuando afirm¨®: "Como presidente, actuar¨¦, no tengan ninguna duda, ejerciendo en todo momento el liderazgo de la mayor¨ªa parlamentaria y asegurando su cohesi¨®n que es la garant¨ªa de la estabilidad de la acci¨®n del Gobierno". Y la tercera, para subrayar su potestad para realizar cualquier recambio de consejeros.

El presidente insisti¨® en que la reestructuraci¨®n del Ejecutivo es inevitable con la finalidad de "dar un impulso a la acci¨®n de gobierno y abordar con un nuevo empuje los retos que tenemos enfrente".

Ante las quinielas publicadas estos d¨ªas sobre los consejeros destinados a perder su cargo, Pasqual Maragall quiso tranquilizarles en la reuni¨®n previa del Consell Executiu, convocada a primera hora de la ma?ana y que se prolong¨® por espacio de 45 minutos. El presidente catal¨¢n apel¨® en esa cita a la "confianza mutua" entre ¨¦l y sus consejeros y les agradeci¨® el trabajo que han realizado durante los casi dos a?os de legislatura. No son¨® a despedida, pero algunos consejeros socialistas ya conoc¨ªan la decisi¨®n de su jefe de filas de que no repetir¨ªan, como es el caso del de Industria, Josep Mar¨ªa Ra?¨¦; Agricultura, Antoni Siurana o Cultura, Caterina Mieras, tal como anunci¨® ayer este diario.

Maragall recibi¨® ayer un espaldarazo del presidente del Gobierno central, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, mucho m¨¢s contundente que el de la v¨ªspera en Barcelona. Zapatero se mostr¨® confiado en que tanto el presidente catal¨¢n como las fuerzas que le apoyan sabr¨¢n solventar esta situaci¨®n durante el debate de pol¨ªtica general, que contin¨²a hoy y concluye ma?ana. El presidente espa?ol reclam¨® respeto para las actuaciones que pueda emprender Maragall.