El Pent¨¢gono se limita a reiterar el p¨¦same

El teniente coronel Barry Venable, del Departamento de Comunicaci¨®n del Pent¨¢gono, dijo ayer que no hab¨ªa ning¨²n comentario inmediato sobre la decisi¨®n del juez Santiago Pedraz de ordenar la busca y captura de los tres militares norteamericanos implicados en la muerte de Jos¨¦ Couso y calific¨® el caso de "asunto legal complicado". "Por lo que se refiere a una respuesta a la decisi¨®n del juez, en caso de que sea lo que hemos sabido por los medios de comunicaci¨®n, habr¨¢ que esperar y ver. Por lo que respecta al incidente, la muerte de los periodistas en el hotel Palestina fue una tragedia, y EE UU tiene el p¨¦same m¨¢s sincero para los familiares de los que murieron".

En cuanto a la falta de cooperaci¨®n jur¨ªdica que plantea el juez, "hasta que hemos conocido la noticia, ni siquiera sab¨ªamos que se estaba trabajando en el caso; hicimos la investigaci¨®n, la dimos a conocer hace m¨¢s de dos a?os y, personalmente, yo no estaba al tanto de ninguna petici¨®n, aunque eso normalmente se hace a trav¨¦s de canales diplom¨¢ticos", a?adi¨® Venable. En la Embajada de Espa?a se afirma que "en su d¨ªa se hicieron las gestiones oportunas, a nivel pol¨ªtico, para que se atendieran las peticiones"; pero "a nivel judicial no se ha canalizado nada a trav¨¦s de esta embajada; el juez no nos hab¨ªa pedido nada".

El 12 de agosto de 2003, el Mando Central, del que dependen las tropas en Irak, anunci¨® el resultado de su investigaci¨®n. El informe dec¨ªa que el carro de combate abri¨® fuego como "respuesta proporcionada y justificadamente mesurada" porque los soldados creyeron que hab¨ªa iraqu¨ªes en el hotel "ayudando a dirigir fuego enemigo contra las tropas estadounidenses".

En el informe "Permiso para disparar", el Comit¨¦ de Protecci¨®n de Periodistas dijo que su propia investigaci¨®n, "basada en entrevistas con una docena de reporteros que estaban en la escena y con otros dos que estaban empotrados y que segu¨ªan las comunicaciones militares por radio antes y despu¨¦s del disparo, sugiere que el ataque, aunque no deliberado, fue evitable", porque los mandos "sab¨ªan que el hotel estaba lleno de periodistas y su intenci¨®n era que no resultara alcanzado". "Aparentemente estos mandos no transmitieron sus preocupaciones al oficial del carro de combate que dispar¨®".

Philip Wolford, el capit¨¢n al mando, declar¨® a una revista francesa que dio la orden porque el artillero, el sargento Thomas Gibson, le dijo que hab¨ªa alguien con prism¨¢ticos en el tejado del hotel.