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Columna
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Le plantan cara a Marruecos

El cronista, entre la satisfacci¨®n y ciertas reservas, celebra que el Parlamento valenciano haya expresado, con firmeza, su rechazo a la execrable represi¨®n que las fuerzas marroqu¨ªes est¨¢n llevando a cabo en los territorios ocupados del S¨¢hara Occidental. El cronista que ha escrito insistentemente, como otros colegas, sobre una barbarie que atenta contra los derechos humanos, la integridad, la dignidad y la libertad del pueblo saharaui, v¨ªctima adem¨¢s de una clamorosa injusticia, de una insostenible situaci¨®n y de un expolio de sus recursos naturales desde hace ya 30 a?os, saluda la declaraci¨®n institucional, consciente de sus limitaciones, que las Cortes Valencianas formularon acerca de tan infames pr¨¢cticas, antes de que diera comienzo su sesi¨®n plenaria del mi¨¦rcoles. En la declaraci¨®n, las Cortes apoyan los leg¨ªtimos derechos de los saharauis a ejercer su autodeterminaci¨®n, mediante refer¨¦ndum, seg¨²n las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, y muy en particular la 1.495, "aprobada por unanimidad y que constituye el consenso de la comunidad internacional para garantizar una soluci¨®n justa y duradera". Se recuerda, en la misma, que el Frente Polisario recientemente liber¨® a los ¨²ltimos soldados marroqu¨ªes que permanec¨ªan en cautiverio y que, consecuentemente, el Gobierno del monarca alauita debe poner en libertad a los 150 prisioneros de guerra y a todos los detenidos, as¨ª como los medios para facilitar las investigaciones de los 500 desaparecidos igualmente saharauis. Las Cortes exigen la intervenci¨®n de la ONU, de la Uni¨®n Europea y de la Uni¨®n Africana para que se restablezca la legalidad internacional y se promuevan los mecanismos que garanticen la seguridad de la poblaci¨®n del S¨¢hara Occidental, hasta la celebraci¨®n del refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n. A nadie se le oculta, ni nadie lo oculta, todo hay que reconocerlo, que el texto de la declaraci¨®n est¨¢ m¨¢s que inspirado en que, un d¨ªa a¨²n cercano, se acord¨® en el Congreso de los Diputados. Y resulta evidente que el tono de su redacci¨®n es, a todas luces, de izquierdas. Plausible, el compromiso del Parlamento valenciano con el pueblo saharaui "de promover el contacto con las asociaciones, colectivos e instituciones implicadas en la defensa de los derechos humanos del pueblo saharaui y a mantener especiales relaciones con su delegaci¨®n en Valencia", para toda la Comunidad Valenciana, cuyo titular, Ahmed Mohamed Fadel, se encontraba en la tribuna de invitados, acompa?ando a Mahafud Ali Beiba, presidente del Parlamento de la Rep¨²blica ?rabe Saharaui Democr¨¢tica. El presidente de las Cortes Valencianas ley¨® la declaraci¨®n, y no tan solo con solemnidad, sino con apabullante literalidad. As¨ª es que, cuando lleg¨® a un p¨¢rrafo donde se mencionan los DD.HH (Derechos Humanos) de los saharauis, no se tom¨® licencia alguna y dijo "los de de hache hache de los saharauis". El se?or De Espa?a, siempre tan inefable y ocurrente. Por cierto, que el delegado Ahmed Mohamed Fadel propuso un viaje a los territorios ocupados, y su propuesta se acept¨®. Pero adem¨¢s, suscit¨® un vivo inter¨¦s entre los representantes de los grupos pol¨ªticos, que expresaron su deseo de trabajar en ello. El cronista permanecer¨¢ atento, porque conf¨ªa en que sus se?or¨ªas cumplan, aunque vuelvan trasquilados. Gajes.

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