Una pica al sur del r¨ªo Bravo

"Atractivo y complejo". ?stas son las dos principales caracter¨ªsticas del mercado mexicano para la inversi¨®n extranjera, en opini¨®n de Mariano Muela, consejero econ¨®mico y comercial de la Embajada espa?ola. Un mercado grande (105 millones de habitantes) en crecimiento, 700.000 millones de d¨®lares de producto interior bruto (PIB), dos millones de kil¨®metros cuadrados de superficie, una poblaci¨®n joven y un mercado estable. Adem¨¢s, M¨¦xico posee rango de inversi¨®n (investment grade), que atrae inversi¨®n de cartera, el riesgo pa¨ªs est¨¢ en m¨ªnimos hist¨®ricos (1,2 puntos), es pa¨ªs miembro de la OCDE, la previsi¨®n de inflaci¨®n para el cierre del a?o es del 3,5%, el d¨¦ficit p¨²blico se sit¨²a en torno al 0,2% del PIB y el d¨¦ficit de la balanza de cuenta corriente es del 1,3% del producto interior bruto. Las empresas espa?olas se han decidido a invertir all¨ª.

La balanza comercial hispano-mexicana ha sido favorable a Espa?a en los ¨²ltimos cuatro a?os, con un saldo de 650 millones de d¨®lares en 2004

La inversi¨®n espa?ola en el mercado mexicano supone el 48% de la Uni¨®n Europea y el 12% del total en el periodo 2000-2004

Las empresas espa?olas se han mostrado muy competitivas, a pesar de las limitaciones, en proyectos de transmisi¨®n del sector el¨¦ctrico

Los bancos est¨¢n en condiciones, tras la 'crisis del tequila', de ofrecer pr¨¦stamos en un contexto de progresiva reducci¨®n de tipos de inter¨¦s

El Tratado de Libre Comercio es utilizado como paraguas para introducir productos espa?oles en EE UU sin pagar aranceles tan altos

M¨¦xico tiene solidez econ¨®mica y tambi¨¦n solidez pol¨ªtica. Es un pa¨ªs abierto al exterior que ha firmado 12 tratados de libre comercio con otras tantas naciones y bloques econ¨®micos (caso de la Uni¨®n Europea), con necesidades insatisfechas por la inmadurez de su mercado, y estrat¨¦gicamente situado entre Estados Unidos y Centroam¨¦rica.

Este cuadro positivo de M¨¦xico tiene contrastes, que invitan a la cautela a la hora de hacer negocios en este pa¨ªs. En primer lugar, se trata de un mercado tremendamente complejo, donde la inseguridad es, seg¨²n diversas fuentes consultadas, el obst¨¢culo que m¨¢s amedrenta a los inversores. Inseguridad ciudadana e inseguridad jur¨ªdica (descrita con el eufemismo de "dificultades operativas") son moneda corriente en un pa¨ªs donde, parad¨®jicamente, prima el formalismo de la regulaci¨®n excesiva sobre el sentido com¨²n.

La abundancia de normas suena a iron¨ªa en un sistema judicial que el diario Reforma ha descrito como "ciego, cojo, manco y mudo". La falta de garant¨ªas en este ¨¢mbito se debe, esencialmente, a la incompetencia el sistema judicial mexicano. "Los procedimientos son anquilosados, formalistas, burocratizados, lentos y poco preparados para problemas de negocios complejos. Son una traba para la inversi¨®n", se?ala un asesor de empresas espa?olas.

Entre los tremendos contrastes mexicanos resalta la fuerte dependencia comercial de Estados Unidos, y los 27 millones de personas (30% de la poblaci¨®n) que viven en el umbral de la pobreza.

El primer mercado

As¨ª es el mercado mexicano. La inversi¨®n espa?ola supone el 48% de la inversi¨®n de la Uni¨®n Europea (UE) y el 12% del total en el periodo 2000-2004, seg¨²n datos del Ministerio de Econom¨ªa de M¨¦xico. Espa?a ocupa como pa¨ªs inversor en M¨¦xico el primer lugar de la UE y el segundo a nivel mundial detr¨¢s de Estados Unidos. En el periodo 1994-2004, la inversi¨®n extranjera directa fue de 164.650 millones de d¨®lares, de los que 93.298 millones correspondieron a EE UU, y 13.996 millones a Espa?a. M¨¦xico es el primer mercado espa?ol en Am¨¦rica Latina.

La balanza comercial hispano-mexicana ha sido favorable a Espa?a en los ¨²ltimos cuatro a?os, con un saldo de 650 millones de d¨®lares en 2004.

Tras d¨¦cadas de un r¨¦gimen pol¨ªtico autoritario y una econom¨ªa protegida y aut¨¢rtica, M¨¦xico est¨¢ en pleno proceso de apertura y liberalizaci¨®n, aunque tiene todav¨ªa camino por recorrer. La energ¨ªa, las telecomunicaciones y los medios electr¨®nicos siguen cerrados en buena medida a la inversi¨®n extranjera, a falta de reformas estructurales que ning¨²n Gobierno se ha atrevido a realizar.

A pesar de los l¨ªmites a la inversi¨®n extranjera, empresas espa?olas se han mostrado muy competitivas en el sector el¨¦ctrico en proyectos de transmisi¨®n (Dragados, Abengoa, Elecnor, Isolux) y de generaci¨®n (Uni¨®n Fenosa e Iberdrola). Mediante un sistema de contratos conocido como Independent Power Producer (IPP), equivalente a productores independientes de energ¨ªa. La Comisi¨®n Federal de Electricidad saca a concurso, por ejemplo, una licitaci¨®n para generar energ¨ªa bajo un esquema de concesi¨®n, manteniendo la propiedad mexicana. Gana el concurso la empresa que vende el kilovatio m¨¢s barato. Por esta v¨ªa, Iberdrola ha invertido entre 6.000 y 7.000 millones de d¨®lares en un proyecto de 5.000 megavatios, y Uni¨®n Fenosa otros 2.000 millones de d¨®lares por la generaci¨®n de 1.800 megavatios.

Otras empresas tropiezan con dificultades por parte de los reguladores federales. Es el caso de Gas Natural, que se queja de la competencia feroz de los productores locales, con el respaldo de ayuntamientos y gobiernos estatales. Los contratos de servicios no siempre se respetan cuando hay un cambio de gobierno en un Estado. "El gobierno de turno revisa el contrato y puede que d¨¦ por concluida la concesi¨®n", asegura una fuente que prefiere guardar el anonimato.

En el sector petroqu¨ªmico, algunos analistas estiman que en los pr¨®ximos 10 a?os M¨¦xico requerir¨¢, inevitablemente, inversiones no inferiores a los 70.000 millones de d¨®lares. La duda es c¨®mo llegar¨¢ esta inyecci¨®n de dinero sin reformar la Constituci¨®n, que cierra el paso a la inversi¨®n privada en el sector. La presencia de Repsol-YPF en M¨¦xico es m¨¢s simb¨®lica que real, a la espera de que una eventual apertura del sector le permita participar, por ejemplo, en proyectos de prospecci¨®n de nuevos yacimientos en aguas profundas. La petrolera espa?ola dispone de la tecnolog¨ªa especializada que no tienen los mexicanos. De momento, Repsol-YPF ha firmado un contrato de servicios m¨²ltiples de obra p¨²blica, financiado por el sistema Pidiregas (proyectos de inversi¨®n directa con registro diferido del gasto). Mediante este mecanismo las empresas extranjeras contribuyen en la financiaci¨®n de obras p¨²blicas, que el Estado reingresa poco a poco al ritmo con que aumenta la deuda p¨²blica.

El empresario espa?ol Alejandro Sampelayo, consejero delegado de Procointer, dedicada a servicios de comercio exterior, apunta que las energ¨ªas alternativas son un nicho de oportunidad para empresas espa?olas. Gamesa E¨®lica ha ganado un concurso para la construcci¨®n de un corredor e¨®lico en el Istmo de Tehuantepec -La Venta II-, en el Estado de Oaxaca, para poner en marcha un gran programa de generaci¨®n de energ¨ªa el¨¦ctrica. Se trata de una inversi¨®n de 100 millones de d¨®lares en una de las zonas de mayor energ¨ªa e¨®lica del mundo.

Oleada inversora

Durante la ¨²ltima d¨¦cada, la primera oleada de inversiones espa?olas en los sectores industrial y financiero se produjo a partir de 1998, superados los coletazos de la crisis econ¨®mica de 1995 conocida como efecto tequila. En el sector de telecomunicaciones, donde Telef¨®nica mantiene una posici¨®n dominante en varios pa¨ªses de Am¨¦rica Latina, el gigante espa?ol no ha conseguido plantar cara a Carlos Slim, primera fortuna de M¨¦xico y amo y se?or de la telefon¨ªa mexicana de la mano de Telmex. Las barreras legales en varios Estados no han podido ser superadas por la empresa espa?ola, que acusa a su competidora Telcel (propiedad de Slim) de abuso de posici¨®n dominante y de aprovecharse de una regulaci¨®n acorde con sus intereses.

Telef¨®nica adquiri¨® en marzo de 2002 el 65% de la operadora de telefon¨ªa celular Pegaso, con fuerte presencia en los Estados del norte de M¨¦xico. La operaci¨®n supuso una inversi¨®n de 70,5 millones de d¨®lares y convirti¨® a Telef¨®nica M¨®viles en la segunda empresa de celulares con ambiciones de seguir invirtiendo en aparatos de tercera generaci¨®n. Pero la telefon¨ªa fija sigue siendo un coto privado del gran magnate mexicano.

A partir de 2001 se produce la segunda oleada de inversiones espa?olas, con la llegada de un buen n¨²mero de peque?as y medianas empresas. M¨¦xico est¨¢ situado en una posici¨®n estrat¨¦gica, que para los nuevos inversores espa?oles es una buena v¨ªa de entrada a Estados Unidos gracias al Tratado de Libre Comercio (TLC). El tratado es utilizado como paraguas para introducir productos espa?oles en EE UU sin pagar aranceles tan altos. Entran como empresas mexicanas de capital espa?ol. Quienes se est¨¢n aprovechando de esta situaci¨®n son las empresas de componentes electr¨®nicos que llegaron a M¨¦xico de la mano de Telef¨®nica, por el llamado efecto arrastre, y que ahora est¨¢n en condiciones de convertirse en suministradores a operadores estadounidenses a precios competitivos.

Francisco Mart¨ªnez Boluda, abogado del despacho Ur¨ªa Men¨¦ndez en M¨¦xico, subraya que el futuro es del sector inmobiliario. Por una parte, el mercado espa?ol empieza a saturarse, mientras que el mexicano inicia un proceso a la inversa gracias a la recuperaci¨®n del cr¨¦dito, que estaba cerrado desde la crisis del tequila. Diez a?os despu¨¦s, las entidades vuelven a estar en condiciones de dar pr¨¦stamos en un contexto de progresiva reducci¨®n de los tipos de inter¨¦s y el consiguiente abaratamiento del dinero. El tipo b¨¢sico de redescuento del Banco Central es a partir del 8,8%. Los cr¨¦ditos hipotecarios rondan el 15%, con tendencia a disminuir.

Banca y vivienda

Promotores inmobiliarios espa?oles llegan a M¨¦xico con proyectos de vivienda media y residencial en una primera fase, para promover a medio plazo viviendas sociales, la m¨¢s requerida por las grandes masas empobrecidas. El Grupo LAR tiene un proyecto de promoci¨®n de viviendas sociales en Ciudad de M¨¦xico, y ha desembarcado en el sector residencial en gran parte del pa¨ªs.

Los bancos empiezan a diversificar sus acciones. Caja Madrid ha comprado la sociedad Mi Casita, para pr¨¦stamos hipotecarios. "El cr¨¦dito y el boom del sector inmobiliario dinamizar¨¢n la econom¨ªa", pronostica Mart¨ªnez Boluda. El BBVA-Bancomer y el Banco Santander-Serfin, las dos grandes entidades espa?olas que controlan el 60% del sistema bancario, ya est¨¢n otorgando cr¨¦ditos.

El sector hotelero, inversi¨®n tradicional espa?ola en la Riviera Maya y en el Pac¨ªfico (Acapulco y Puerto Vallarta) y en los hoteles de paso de la capital, cobra hoy un nuevo impulso. Francisco Medina, director general de Hoteles NH en Am¨¦rica, explica que el 65% de las 50.000 habitaciones disponibles en la Riviera Maya y Canc¨²n es de capital espa?ol. Cadenas como NH, Sol Meli¨¢, Riu, Barcel¨®, Iberostar, Oasis y Occidental siguen apostando por M¨¦xico. La costa atl¨¢ntica es una zona muy rentable, asegura Medina, que menciona como punto negro de la inversi¨®n algunos casos de "irregularidades en la certidumbre jur¨ªdica de la propiedad" en la Riviera Maya. En hoteles urbanos, la cadena NH apuesta por ciudades como el Distrito Federal, donde ha inaugurado un establecimiento en el centro hist¨®rico, Veracruz, Puebla, Guadalajara y Monterrey.

Las empresas espa?olas del sector llegan con sus propias constructoras y con buena financiaci¨®n de bancos y cajas espa?olas. Quintana Roo (Canc¨²n) es la zona m¨¢s apreciada. Hay en marcha varios proyectos de hoteles que rondan los 400 millones de d¨®lares cada uno. El Grupo Globalia proyecta construir un hotel-resort de 2.000 habitaciones en Tulum. Este consorcio tur¨ªstico, propietario de Air Europa, con cinco frecuencias semanales del vuelo Madrid-Canc¨²n, y de la agencia de viajes Halc¨®n, pretende adquirir con el empresario local Olegario V¨¢zquez Ra?a, la compa?¨ªa Aerom¨¦xico.

La pr¨®xima oleada de inversiones espa?olas, seg¨²n vaticina el consejero comercial Mariano Muela, se dirigir¨¢ a las infraestructuras. En dicho sector, los proyectos p¨²blico-privados, conocidos popularmente como PPP, permiten nuevas f¨®rmulas de inversi¨®n mixta bajo el paraguas de la ley mexicana. Dentro de esta categor¨ªa, est¨¢n en marcha la fase 1 del proyecto Jorobas-Ecatepec, con la construcci¨®n de una carretera en el occidente del Estado de M¨¦xico por parte de Obrascon Huarte La¨ªn (OHL), sexto grupo constructor espa?ol, con una inversi¨®n de 300 millones de d¨®lares; y la concesi¨®n del tren suburbano de la Ciudad de M¨¦xico, adjudicado a la empresa Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF), que invertir¨¢ otros 300 millones de d¨®lares.

Ventaja comparativa

"Espa?a tiene una ventaja comparativa importante en el sector de infraestructuras, sobre todo en obras p¨²blica", subraya el abogado Mart¨ªnez Boluda, con una amplia n¨®mina de empresas espa?olas en su cartera de clientes.

Una v¨ªa indirecta para inversiones espa?olas ser¨¢n, en opini¨®n de Alejandro Sampelayo, los proyectos de prestaci¨®n de servicios (PPS) dedicados a la construcci¨®n y operaci¨®n gerencial de hospitales, universidades, autopistas y centros penitenciarios. "Son sociedades de prop¨®sito espec¨ªfico, formadas por empresas de distintos rubros", se?ala el empresario espa?ol. Compa?¨ªas como Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), OHL, Entrecanales y Cubiertas M¨¦xico-Necso y el Grupo Dragados toman posiciones para participar en la nueva oleada inversora.

El futuro pol¨ªtico ante un eventual triunfo del ex alcalde del Distrito Federal, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, en las elecciones presidenciales del a?o pr¨®ximo no preocupa especialmente a los inversores espa?oles, a juzgar por los testimonios recogidos. Un destacado banquero con grandes intereses en M¨¦xico confes¨® recientemente a su paso por esta capital que una victoria de L¨®pez Obrador no le produc¨ªa intranquilidad, por considerar que el margen de maniobra para cualquier gobierno es muy limitado, y no permite aventuras. "El factor AMLO

[iniciales del ex alcalde] no est¨¢ pesando. Hay tranquilidad", apunta Mart¨ªnez Boluda. "M¨¦xico tiene un tratado de libre comercio y est¨¢ en la ¨®rbita de Estados Unidos. Veamos el ejemplo de Brasil. El efecto Lula predomina sobre el efecto Ch¨¢vez", a?ade. "L¨®pez Obrador no podr¨¢ hacer lo que quiera en el Congreso, porque en ning¨²n caso tendr¨¢ la mayor¨ªa".

Las quejas se refieren m¨¢s al presente que al futuro. Pol¨ªticamente, en las siete d¨¦cadas que rein¨® el Partido Revolucionario Institucional (PRI) hab¨ªa reglas, corrupci¨®n, pero reglas. Ahora no se sabe. El funcionario est¨¢ asustado, con temor a violentar la ley. Hay m¨¢s incertidumbre porque el sistema de partido ¨²nico se vino abajo. As¨ª se expresan varios empresarios que lamentan la par¨¢lisis del Gobierno de Vicente Fox por no haber abordado ninguna de las grandes reformas pendientes: laboral, energ¨¦tica y fiscal, por no mencionar la pol¨ªtica.