Realojados los 50 ocupantes de un poblado chabolista de la Ca?ada Real Galiana
La Comunidad quiere recuperar la zona, donde viv¨ªan 13 familias junto a Valdeming¨®mez
C¨¢stor Montera vio ayer c¨®mo una excavadora se llevaba por delante su casa. Adem¨¢s de la suya, las otras 12 chabolas que formaban el poblado chabolista Camino del Vertedero, junto a Valdeming¨®mez, en la Ca?ada Real Galiana (Villa de Vallecas), fueron derribadas ayer. Las 50 personas que las ocupaban -ni?os la mitad de ellos- han sido realojadas por la Comunidad en pisos del IRIS de Vallecas y Legan¨¦s. Las familias se mostraron "felices" por tener una casa y abandonar un lugar pestilente y lleno de ratas. La Comunidad quiere "recuperar" y limpiar la zona.
La Ca?ada Real Galiana es una avenida que se extiende desde el kil¨®metro 14 de la A-3 (autov¨ªa de Valencia) y atraviesa Coslada y Rivas hasta llegar a Getafe. Son 15 kil¨®metros de carretera que se han convertido en una ciudad fantasma. A ambos lados de la v¨ªa se levantan chabolas, casas, chal¨¦s, naves... Ninguna tiene permiso, ya que una ordenanza prohibe edificar en la ca?ada.
La polic¨ªa calcula que 40.000 personas viven en la ca?ada ante la pasividad de las autoridades y la disponibilidad, fraudulenta, de terreno, luz y agua. Entre lo negativo, la zona est¨¢ al lado del vertedero de Valdeming¨®mez, y eso se respira en el aire.
Entre estos miles de personas, 13 familias viv¨ªan hasta ayer en el poblado chabolista Camino del Vertedero -a 100 metros de Valdeming¨®mez- entre monta?as de basura, ratas de 30 cent¨ªmetros y un insoportable hedor. Los 50 habitantes del poblado viven ya en sus nuevas casas en Mejorada, San Blas, Legan¨¦s y Villa de Vallecas. La Comunidad asegura que va a "recuperar" y limpiar la zona.
El realojo, financiado por el Gobierno regional con 2,3 millones de euros, ha sido posible gracias a la labor en un primer momento de los trabajadores sociales del distrito y de los del IRIS (Instituto para el Realojamiento e Integraci¨®n Social) m¨¢s tarde. Carlos Roca y Carolina Parra, educador y trabajadora social de la Comunidad, respectivamente, son ahora los encargados de hacer el seguimiento para que las familias se integren en sus barrios. Aunque con el trabajo de los a?os tienen parte del camino recorrido. Todos los chavales del poblado, unos 25, est¨¢n escolarizados. S¨®lo tienen una queja: "En muchas ocasiones tenemos que lidiar m¨¢s con los vecinos y sus prejuicios que con los realojados", se lamentan.
A?os de espera
La soluci¨®n a los problemas de estos ciudadanos ha llegado despu¨¦s de a?os de espera. Todos se mostraron ayer contentos por su nueva situaci¨®n, aunque algo tristes tambi¨¦n al ver c¨®mo las excavadoras arrasaban lo que han sido sus casas los ¨²ltimos 14 a?os.
C¨¢stor Montera, de 34 a?os, es uno de ellos. Ayer se mostr¨® "feliz" porque hab¨ªa llegado el d¨ªa del realojo. Y mucho m¨¢s feliz cuando vio su nueva casa, su primera casa. Apenas ten¨ªa palabras. Una sonrisa delataba su estado de ¨¢nimo, igual que el de su madre, Juana, con quien compartir¨¢ piso. Ahora quiere trabajar. Cuenta que le gustar¨ªa ser "barrendero o jardinero". De momento, le preocupa saber c¨®mo amueblar¨¢ la vivienda, que s¨®lo est¨¢ equipada en el ba?o y la cocina. Pagar¨¢ unos 40 euros al mes, aunque el viceconsejero de Medio Ambiente y Ordenaci¨®n del Territorio, Jos¨¦ Triguero, adelant¨® ayer que lo econ¨®mico no ser¨¢ problema. Tambi¨¦n anunci¨® Triguero que el Gobierno regional trabaja con los Ayuntamientos para arreglar la situaci¨®n de la Ca?ada Real.
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