Hipnotismo
Nada me resulta menos grato que comprobar d¨ªa tras d¨ªa como algunos dirigentes pol¨ªticos se empe?an en demostrar a los ciudadanos que sus adversarios son delincuentes o traidores a la patria. Apelan con frecuencia a la deshonestidad o a la falta de patriotismo de los grupos adversarios para alcanzar logros pol¨ªticos. Juzgados y d¨ªas de control parlamentario al Gobierno se est¨¢n utilizando para estos menesteres. En esta situaci¨®n hay que seguir hablando claro y con insistencia. Hay que decir que los juzgados no son ni deben ser los centros en los que se dirime la honestidad pol¨ªtica de partidos democr¨¢ticos sean el PSOE, PP, IU o PA. Podr¨¢ decirse en aquellos casos en los que el grupo pol¨ªtico como tal -caso Herri Batasuna- incurre o puede haber incurrido en delito. No en otros. No cuando integrantes de grupos democr¨¢ticos pueden haber cometido delito. Mezclar conductas individuales con colectivas, y as¨ª atribuir al grupo lo que son comportamientos individuales, es estar abierto a la mentira como forma de hacer pol¨ªtica. M¨¢s intensa, m¨¢s grave y m¨¢s falsas cuando, desde ella, se apela a los sentimientos nacionales. No a la raz¨®n. Algo que se viene haciendo mediante la utilizaci¨®n del Estatuto catal¨¢n. Unas veces identific¨¢ndolo con el Estatuto andaluz; otras identificando a gobernantes andaluces como traidores a la patria. Tratan estos hipnotizadores que los ciudadanos desv¨ªen su atenci¨®n para que sientan y perciban que el PSOE, como si fuera HB, es un partido que se dedica a subvertir el orden constitucional. Una situaci¨®n peligrosa. Encolerizar y apasionar a los ciudadanos no es lo que se espera de personas integradas en grupos pol¨ªticos democr¨¢ticos, donde las reglas del juego parten de la raz¨®n y la reflexi¨®n a la hora de hablar y decidir. Es necesario, pues y cuanto antes, salir de esta situaci¨®n. No entrar en ambig¨¹edades que s¨®lo favorecen a quienes no les importa este tipo de pr¨¢cticas. Hay que salir de este estado hipn¨®tico y, sobre todo, hacer saber a quienes practican la hipnosis como medio de obtener rentabilidad pol¨ªtica que est¨¢n condenados al fracaso. Y, en estos casos, claridad e informaci¨®n son las formas adecuadas de evitar que la sociedad caiga en un estado de catalepsia que s¨®lo beneficia a estos hipnotizadores que hacen con su demagogia su particular democracia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.