"Todo lleva a pensar que a mi hermano lo asesinaron los sirios"
Bahia Hariri, 53 a?os, madre de cuatro hijos y diputada por el Parlamento de L¨ªbano desde 1992, acusa a Siria de estar detr¨¢s del atentado que caus¨® el pasado octubre la muerte de su hermano, el ex primer ministro Rafik Hariri, y de otras veinte personas. Bahia Hariri, que se encuentra en Espa?a, para participar en los actos previos a la Eurocumbre del Mediterr¨¢neo, ha roto as¨ª el largo silencio que se hab¨ªa impuesto.
Pregunta. ?Qui¨¦n asesin¨® a su hermano?
Respuesta. No acuso a nadie, pero todo lleva a pensar que los sirios lo asesinaron.
P. ?Pero por que?
R. Despu¨¦s de estar 30 a?os en L¨ªbano, a los sirios no les era f¨¢cil marcharse. Hasta los libaneses no esperaban que ocurriera un d¨ªa. Dejar detr¨¢s de s¨ª una personalidad tan fuerte con tantas relaciones en el mundo ¨¢rabe y a escala internacional preocup¨® a los sirios. Rafik Hariri represent¨® la moderaci¨®n, la visi¨®n de futuro, la paz, la construcci¨®n, el papel de L¨ªbano. Ellos no pod¨ªan imaginarse retirarse y dejarlo con vida. Desgraciadamente, as¨ª fue.
"Tengo confianza en el comit¨¦ de Naciones Unidas que investiga el atentado"
"Del di¨¢logo deber¨ªa salir el convencimiento de poner fin al mandato del presidente"
P. ?Cree que alg¨²n d¨ªa se conocer¨¢ toda la verdad del atentado?
R. Tengo confianza en el comit¨¦ de investigaci¨®n.
P. ?Significa que se f¨ªa de los trabajos de la ONU?
R. S¨ª, claro. Aunque opino que la mayor¨ªa de los resultados de la investigaci¨®n los ha conseguido la judicatura libanesa.
P. ?Cree que los libaneses son m¨¢s efectivos que el equipo internacional que dirige el magistrado alem¨¢n Devlis Mehlis?
R. S¨ª, mientras tenga la protecci¨®n internacional. Son muy eficaces. Han intentado colaborar con Mehlis para acabar el dossier. Han hecho muchas cosas.
P. ?Pero Damasco no est¨¢ muy participativa?
R. Hasta ahora no ha hecho todo lo que se le ha pedido.
P. ?Hasta qu¨¦ punto las conclusiones de este informe afectar¨¢n al futuro de L¨ªbano?
R. Son definitivas. Aunque se tarde, no tenemos otra elecci¨®n para la estabilidad del pa¨ªs.
P. Pocas horas despu¨¦s del atentado pidi¨®, en un vibrante mensaje, la dimisi¨®n del Gobierno liban¨¦s. ?Cree que lo ha conseguido?
R. As¨ª fue.
P. ?Pero no se olvida de que el presidente de L¨ªbano, Emile Lahoud, un dirigente estrechamente vinculado al r¨¦gimen de Damasco, sigue en el palacio de Baada?
R. Lo del presidente es otro tema. Hay un procedimiento lento para llegar a la verdad, para estabilizar el Estado de derecho y consolidar la unidad libanesa. El tema del presidente es diferente. No es una cuesti¨®n que pueda resolverse con manifestaciones sino con di¨¢logo para llegar al bienestar del pa¨ªs, con el patriarca maronita y el resto de interlocutores. No es una cuesti¨®n puramente democr¨¢tica, de recuento, sino de di¨¢logo para llegar al convencimiento de que ha llegado el momento de poner fin al mandato demasiado largo del presidente.
P. ?Qu¨¦ ha pasado en el seno de su familia? Todo el mundo habl¨® de usted como la sucesora de Rafik Hariri y como futura candidata a primer ministro, pero un consejo familiar decidi¨® colocar al frente a su sobrino Saad.
R. No ha habido ning¨²n cambio. La sucesi¨®n no depende del cargo, sino de la continuidad del proyecto. Ahora, con lo que hago, estoy siguiendo el proyecto. Mantenerlo es una cuesti¨®n de di¨¢logo, de v¨ªnculos, de consolidaci¨®n con las distintas partes libanesas. Es una nueva encrucijada en la que ahora L¨ªbano est¨¢ llamado a acudir para fundamentar bien su independencia y su libertad con todos los libaneses.
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