El primerizo y el veterano
S¨¢nchez Medina sali¨® en 2004 de prisi¨®n tras cumplir una pena por homicidio. Su colega s¨®lo acumulaba una detenci¨®n
De aquellos polvos, estos lodos. Fernando S¨¢nchez Medina, el mayor de los dos presuntos atracadores que ayer asesinaron a la familia de joyeros de Castelldefels tuvo muy buenos maestros en las malas artes de la delincuencia. Con poco m¨¢s de 20 a?os vivi¨® como aprendiz los ¨²ltimos a?os dorados de los atracadores pata negra de Barcelona: Antonio Villena Vicario, Rafael Bueno Latorre y Miguel Puntor Jimeno, entre otros. Delincuentes muy duros y sin entra?as que aparecen muy bien retratados en el libro Atracadores, del periodista de R¨¤dio Barcelona Carles Qu¨ªlez.
A los 21 a?os, S¨¢nchez Medina acumulaba ya nueve detenciones a sus espaldas, todas ellas por robo, con o sin arma blanca y pistola. Hasta que en 1989 dio el salto y mat¨® por primera vez en uno de esos atracos. Pag¨® por ello y sali¨® de prisi¨®n en abril de 2004, pero ayer volvi¨® a entrar por la puerta grande en el laberinto de la delincuencia. Lo m¨¢s grave es que arrastr¨® tras de s¨ª al abismo a un chaval de apenas 20 a?os, Juan Antonio S¨¢nchez Hern¨¢ndez, que s¨®lo hab¨ªa sido detenido en una ocasi¨®n por robo.
Pero si lo que les separaba era el historial delictivo, lo que les un¨ªa era ser vecinos de la misma calle del barrio de la Mina, un barrio popular de la periferia de Barcelona a menudo criminalizado por los medios de comunicaci¨®n cuando se producen sucesos espeluznantes como el de ayer. La vinculaci¨®n de los supuestos criminales con la zona en la que resid¨ªan es uno de los peores favores que se pueden hacer a las pol¨ªticas que, con m¨¢s o menos acierto, llevan haciendo las distintas administraciones p¨²blicas para dignificar la zona y la vida de sus habitantes desde hace a?os.
El ejemplo de Sant Cosme
Probablemente la soluci¨®n m¨¢s eficaz ser¨ªa derribar el barrio entero y volverlo a construir de nuevo por fases, como ha sucedido en los ¨²ltimos a?os con Sant Cosme, otro barrio perif¨¦rico de Barcelona, situado en El Prat de Llobregat, al lado del aeropuerto, y que tambi¨¦n se asocia injustamente en muchas ocasiones con delincuencia y drogas.
Fuentes de la investigaci¨®n explicaron ayer que los dos detenidos son politoxic¨®manos, lo que les lleva a consumir coca¨ªna hoy, o hach¨ªs y drogas de dise?o ma?ana. Todav¨ªa no se conocen los detalles del triple crimen, pero la violencia que emplearon es dif¨ªcilmente imaginable sin una alteraci¨®n grave de su percepci¨®n de la realidad y su conducta.
Tambi¨¦n relatan los investigadores que unas horas despu¨¦s de estar detenido y de darse cuenta de la magnitud de lo ocurrido, S¨¢nchez Hern¨¢ndez, el m¨¢s joven, rompi¨® a llorar de manera t¨ªmida para inculparse del triple crimen afirmando abiertamente: "?He sido yo!, ?He sido yo!".
Pero la polic¨ªa otorga muy poca importancia a ese gesto y considera que, para entenderlo, hay que recordar que S¨¢nchez Medina le saca 16 a?os. Y mucha m¨¢s carrera delictiva, lo que explicar¨ªa que el m¨¢s joven mintiese al inculparse para allanarse el camino ante el futuro penitenciario que se le avecina, pese a que, con toda probabilidad, la pena que pueda recaer sobre uno y otro ser¨¢ pr¨¢cticamente id¨¦ntica. Pero es cierto que no es lo mismo que S¨¢nchez Hern¨¢ndez entre en prisi¨®n comi¨¦ndose los tres cr¨ªmenes que culpando al veterano.
Hay un detalle muy signficativo para los investigadores que se?ala a uno y exculpa al otro como presunto autor material del crimen. Y es que S¨¢nchez Medina, el mayor, tiene algunos cortes en las manos, probablemente fruto del breve forcejeo que pudo mantener con sus v¨ªctimas mientras las apu?alaba.
Las primeras explicaciones que, al parecer, dio a la polic¨ªa sobre esas heridas son contradictorias y apuntan en la direcci¨®n de quererse exculpar del triple crimen.
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