El padre del f¨²tbol brasile?o

Sucedi¨® en 1894. El joven brasile?o Charles Miller desembarc¨® en el puerto de Santos, de vuelta a casa, despu¨¦s de un decenio de estudios en Gran Breta?a. Con tan s¨®lo 19 a?os, el buen hijo de una familia de banqueros escoceses, vest¨ªa un cl¨¢sico y ajustado traje ingl¨¦s y luc¨ªa un gran bigote, estilo ambassador, que le cubr¨ªa casi la mitad de la cara y que estaba de moda en la ¨¦poca. En sus elegantes maletas de madera transportaba un peque?o tesoro: una bomba de aire, dos uniformes, un grueso libro con la reglas del football y dos balones de la marca Shoot. Esas pelotas de f¨²tbol, cosidas a mano por artesanos en Liverpool, fueron las primeras en rodar por las tierras brasile?as.

El relato de este momento hist¨®rico, los or¨ªgenes del f¨²tbol en Brasil, es obra del espa?ol John Mills. El historiador, afincado en Brasil, naci¨® en Vigo hace 67 a?os y es hijo de padre brit¨¢nico y madre vasca. Charles Miller, o pai do futebol brasileiro, es el t¨ªtulo del nuevo libro de Mills, editado en portugu¨¦s, que presenta fotos y documentos in¨¦ditos sobre la vida de Miller, rescatados de archivos en S?o Paulo y Gran Breta?a. "Era un purista, un caballero en el campo. Hac¨ªa del f¨²tbol su filosof¨ªa de vida y es el constructor del f¨²tbol arte brasile?o", dice Mills.

Despu¨¦s de 15 a?os de investigaci¨®n, el historiador espa?ol pudo hasta fechar, el 14 de abril de 1895, el primer partido de f¨²tbol en Brasil. Relata que el encuentro fue jugado en una esquina de un barrio noble de S?o Paulo, entre equipos formados por ingleses radicados en la capital paulista. El S?o Paulo Railway, de Miller, venci¨® a la Compa?¨ªa de Gas por 4-2.

Con tan s¨®lo nueve a?os, Miller fue enviado por su padre para recibir una educaci¨®n austera en Bannister Court School, de Southampton (Gran Breta?a), En los colegios tradicionales brit¨¢nicos aprendi¨® tambi¨¦n la pasi¨®n por el f¨²tbol. El libro describe a Miller como un futbolista innovador. Cuando estudiaba en Gran Breta?a, Miller invent¨® un regate en el cual elevaba la pelota a media altura con el exterior del pie; mientras corr¨ªa, se la pasaba por encima de la cabeza y la dominaba por delante. La jugada fue bautizada en su homenaje como charles, pero entr¨® en el glosario futbol¨ªstico brasile?o como chaleira, tetera en portugu¨¦s.

De regreso a Brasil, introdujo el deporte en los clubes sociales de la ¨¦lite paulista, en lo que, por ejemplo, los negros ten¨ªan prohibida la entrada. Pero el bal¨®n salt¨® los muros de las clases sociales y gan¨® las calles porque era un deporte "que no exig¨ªa ni zapatos para jugar", explica Mills.

El historiador achaca el triunfo del f¨²tbol en Brasil, principalmente, al clima favorable "de verano e inviernito" y a "la mezcla de razas" de la sociedad.

Miller muri¨® en 1953, cinco a?os antes de que la selecci¨®n brasile?a ganara el primero de sus cinco t¨ªtulos mundiales.

La familia de Mills tambi¨¦n es parte de la historia del f¨²tbol. Su abuelo, Alfredo, es uno de los 33 socios que fundaron, en 1898, el Athletic. Y la afici¨®n familiar contin¨²a. "En los tiempos ¨¢ureos del Athletic, cuando perd¨ªa, dec¨ªamos: '?Hoy no hay merienda!'. Pero, si fuera ahora, nos morir¨ªamos de hambre", se lamenta Mills por la mala campa?a del equipo.