La rama argelina de Al Qaeda

Del mosaico de grupos terroristas que asolaron Argelia a mediados de los noventa s¨®lo subsiste uno: el Grupo Salafista de Predicaci¨®n y Combate (GSPC).

A mediados de la d¨¦cada pasada hubo en Argelia m¨¢s de 20.000 hombres en armas que ten¨ªan en jaque al Ej¨¦rcito. Ahora s¨®lo siguen en pie de guerra entre 500 y 1.000, adscritos, en su gran mayor¨ªa, al GSPC. Operan, sobre todo, en las monta?as de la regi¨®n de Cabilia.

El grupo posee, aparentemente, dos fuentes de financiaci¨®n. La primera es el contrabando, a trav¨¦s del desierto, entre Argelia y sus vecinos del sur, que dirigir¨ªa Mojtar Belmojtar, apodado El Tuerto. La segunda la constituyen los robos y las colectas entre la inmigraci¨®n argelina en Europa.

Fundado en 1998, el GSPC fue una disidencia "moderada" de los Grupos Isl¨¢micos Armados que, con sus matanzas indiscriminadas, causaron buena parte de los 150.000 muertos que se cobr¨® la guerra civil larvada que vivi¨® Argelia.

Los fundadores del GSPC quer¨ªan dejar de matar civiles y concentrarse en militares y fuerzas de seguridad. Poco despu¨¦s de los atentados del 11 de septiembre de 2001, su direcci¨®n hizo un juramento de fidelidad a Al Qaeda.

Gendarmes y militares argelinos han asestado duros golpes al grupo terrorista. Su jefe, Nabil Sahraoui, fue acribillado por el Ej¨¦rcito, en junio de 2004, en Cabilia.

Su n¨²mero dos, Amari Saifi, m¨¢s conocido como El Paraca, cay¨® en manos de la guerrilla chadiana, que los entreg¨® a Libia, que lo extradit¨® a Argelia, donde fue condenado, en junio, a cadena perpetua. Berl¨ªn le reclama por ser el responsable del secuestro, en 2003, de 32 turistas, la mayor¨ªa alemanes.

Su nuevo cabecilla, Abdelmalek Dourkdal, dio ¨®rdenes de pasar al ataque fuera de las fronteras de Argelia. Hasta entonces s¨®lo hab¨ªan disparado sobre una patrulla tunecina. En junio, sus hombres asaltaron un cuartel del Ej¨¦rcito mauritano en Lemgheity. Dieron muerte a 15 soldados, pero cinco terroristas tambi¨¦n perdieron la vida.