EE UU intenta trasladar a la UE el peso de la reducci¨®n de las ayudas al sector agr¨ªcola

Estados Unidos se separ¨® ayer de la UE en las cruciales negociaciones del sector agr¨ªcola en la cumbre de la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC) que arranca hoy. El secretario de Comercio estadounidense, Rob Portman, dijo que su oferta de reducci¨®n de las ayudas a la agricultura no s¨®lo era buena, sino tambi¨¦n negociable. Con esta estrategia, Portman carg¨® sobre las espaldas de Europa la responsabilidad del ¨¦xito o el fracaso de la reuni¨®n. Para colmo, el ministro de Asuntos Exteriores de Brasil, Celso Amorim, que encabeza el bloque enfrentado a los pa¨ªses ricos, dio la raz¨®n a Portman y descarg¨® todas sus cr¨ªticas contra la intransigencia europea.

Lo que qued¨® bien claro en la jornada previa al arranque de la cumbre de la OMC es que ninguna de las potencias comerciales que negocian -la UE, EE UU y Brasil en representaci¨®n de los pa¨ªses en desarrollo- quiere irse de Hong Kong dejando la idea de que por su culpa no hubo acuerdo o que ¨¦ste no fue tan bueno como deb¨ªa esperarse. El comisario europeo de Comercio, Peter Mandelson, solicit¨® ayer un mayor esfuerzo por parte de EE UU y Jap¨®n para igualar la propuesta europea. "Necesitamos dar una se?al desde el principio", subray¨® Mandelson.

Para el mediod¨ªa, Portman ya ten¨ªa preparado su contraataque. "La econom¨ªa estadounidense es la m¨¢s abierta del mundo para los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo y los m¨¢s pobres, como lo demuestra un ¨²ltimo informe del Banco Mundial sobre apertura de mercados", se?al¨® Portman. "En la lista de pa¨ªses con menos restricciones a las importaciones de los Estados m¨¢s pobres, EE UU aparece en el quinto lugar, mientras que la UE est¨¢ en el 13 y Jap¨®n en el 21", explic¨®. Le falt¨® decir touch¨¦, pero bastaba verle la cara para notar la satisfacci¨®n con que devolv¨ªa el golpe.

El ministro de Exteriores brasile?o, Celso Amorim, dijo: "La diferencia entre EE UU y la UE es que los primeros hacen su oferta y se quedan abiertos a la negociaci¨®n. Los segundos, en cambio, hacen su propuesta y ya dicen que se plantan, que no pueden hacer m¨¢s concesiones. Los estadounidenses no s¨®lo han recorrido ya medio camino para desbloquear las negociaciones, sino que ya est¨¢n dispuestos a recorrer lo que falta a cambio de nuevas concesiones de nuestra parte", coment¨® Amorim.

"No obstante", explic¨®, "¨¦sta es la ronda del desarrollo y, por tanto, la prioridad es la eliminaci¨®n de los subsidios a la agricultura, no la apertura de nuestros mercados de servicios ni las rebajas de los aranceles industriales" que quieren la UE y EE UU. Amorim se refiri¨® a la pretensi¨®n de ambos bloques de condicionar la rebaja de las ayudas agr¨ªcolas a que los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo abran m¨¢s sus mercados. "Soy realista a corto plazo, y optimista a medio", dijo Amorim. La negociaci¨®n "va a exigir voluntad pol¨ªtica, pero creo que podemos dar los pasos que nos permitir¨¢n llegar a un acuerdo, quiz¨¢ entre abril y junio de 2006", a?adi¨®.

A ¨²ltima hora de ayer hubo una reuni¨®n de los representantes de la UE, Jap¨®n, India y Brasil. La delegaci¨®n brasile?a esperaba que Europa dejara entrever si estudia alguna m¨ªnima mejora de su oferta. Pero esto no s¨®lo no sucedi¨®, sino que mientras se celebraba el encuentro se conoci¨® que la ministra delegada para el Comercio Exterior de Francia, Christine Lagarde, hab¨ªa insistido en que Europa hab¨ªa llegado "a su l¨ªmite" con la ¨²ltima propuesta agr¨ªcola.

A pesar de las diferencias, ayer hubo un punto en com¨²n: la necesidad de avanzar en las ventajas para el desarrollo de los pa¨ªses m¨¢s pobres. El s¨¢bado pasado, Jap¨®n anunci¨® un conjunto de medidas para ayudar a la treintena de pa¨ªses menos adelantados del mundo por valor de 10.000 millones de d¨®lares, que incluye inversiones, asistencia, acceso a su mercado, etc¨¦tera. La UE ya da un trato preferencial a esas econom¨ªas desde hace tiempo. EE UU sostiene que invertir¨¢ unos 1.000 millones de d¨®lares en las econom¨ªas de Burkina Faso, Senegal, Ben¨ªn y Mal¨ª.