Juan Gait¨¢n hace un balance vital en 'Memorias de un equilibrista'

"Mi camino es hacia lo breve. Considero que el novel¨®n est¨¢ superado y que en estos tiempos no podemos escribir mucho m¨¢s all¨¢ del punto y seguido. Aunque claro est¨¢, lo breve no est¨¢ re?ido con lo profundo". El ¨²ltimo intento de calar hondo en el lector por parte del escritor y periodista malague?o Juan Gait¨¢n es breve, muy breve. Son fogonazos de pensamiento, microrrelatos de poso l¨ªrico en los que ha vuelto la vista atr¨¢s para rendir cuentas en el ecuador de su vida. "Ser¨¢ la crisis al afrontar los cuarenta", dice el autor descre¨ªdo.

Memorias de un equilibrista escarba entre los vericuetos de la memoria literaria de un periodista que ha dejado de lado sus perfiles y columnas para mirarse algo m¨¢s dentro. "Por primera vez me ha parado a reflexionar sobre mi memoria y he hablado de m¨ª sin pudor", confiesa. A pesar del tono l¨ªrico, Gait¨¢n no utiliza la primera persona, sino la figura de "un hombre", protagonista de estas historias fugaces. "La memoria es poco eficaz e injusta. Lo poco que guardamos est¨¢ manipulado y encima reescrito", avisa.

Editado dentro de la colecci¨®n Traspi¨¦s ficci¨®n, de la editorial granadina Traspi¨¦s, este volumen de relatos da un paso atr¨¢s desde una visi¨®n del protagonista que se mira al espejo para recordar un tiempo que se le escapa de las manos, y dudar as¨ª sobre cualquier certeza objetiva: "El calendario dice que han pasado cuarenta a?os, pero no sabe d¨®nde los ha metido. Para el hombre la edad siempre fue como una moneda extranjera, un valor inexacto y lejano", escribe en El aniversario.

Para lograr su obsesi¨®n por depurar, "heredada del articulismo", Gait¨¢n mantiene la t¨¦cnica de su libro anterior de relatos breves, Ang¨¦licas y diab¨®licas. "Lo breve es el camino del descubrimiento, y creo que la esencia de lo novedoso est¨¢ ah¨ª", apunta. "La realidad siempre supera la ficci¨®n y est¨¢ ocurriendo a diario. Cuando la realidad se torna sucia, huyo de las palabras innecesarias, pero siempre escribo para ponerme en limpio", explica.