Dos testigos acusan de otras agresiones a los detenidos por el crimen de la mendiga
El padre de uno de los imputados afirma que el v¨ªdeo "no demuestra que actuaron con crueldad"
Dos testigos han declarado ante los Mossos d'Esquadra que dos de los tres j¨®venes acusados de quemar viva a una mendiga en Barcelona ya hab¨ªan agredido a otros indigentes unas semanas antes de ocurrir ese crimen. La polic¨ªa auton¨®mica catalana ha remitido esas declaraciones a la juez que investiga el caso, quien probablemente citar¨¢ a declarar a los testigos para que ratifiquen esas declaraciones, realizadas de manera voluntaria.
El informe ampliatorio de los Mossos d'Esquadra fue enviado al Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 9 de Barcelona el pasado 30 de diciembre, dos semanas despu¨¦s de que Mar¨ªa del Rosario Endrinal, de 51 a?os, falleciese a consecuencia de las heridas sufridas al ser quemada viva con disolvente. En el atestado policial se relata la comparecencia de un joven de 20 a?os que explic¨® haber visto a los acusados la noche del 27 de noviembre en la calle Gran de Gr¨¤cia de Barcelona. La cadena SER inform¨® ayer que, seg¨²n ese testigo, los j¨®venes arrojaron un contenedor de basuras contra la puerta de una sucursal del BBVA en cuyo interior hab¨ªa un grupo de mendigos protegi¨¦ndose del fr¨ªo.
El mismo testigo declar¨® a la polic¨ªa que no pod¨ªa concretar el alcance de la acci¨®n porque los agresores salieron corriendo. Cuando trascendi¨® el crimen de la indigente, ese testigo acudi¨® voluntariamente a los Mossos d'Esquadra al sospechar que los protagonistas de la agresi¨®n con el contenedor de basuras pod¨ªan estar relacionados con el la muerte de la mujer. La polic¨ªa auton¨®mica le mostr¨® entonces las fotograf¨ªas de los detenidos y el testigo identific¨® sin ninguna duda a Ricardo P. B., uno de los tres imputados por los hechos y que est¨¢ en prisi¨®n.
Grabaciones en el m¨®vil
Del mismo modo, otra joven acudi¨® a los Mossos d'Esquadra tras el crimen para relatar que los dos detenidos mayores de edad hab¨ªa mostrado a varios compa?eros del mismo instituto al que acud¨ªa ella una grabaci¨®n que ten¨ªan en su tel¨¦fono m¨®vil en la que se recoge la agresi¨®n a un indigente que paseaba por la calle. La testigo acudi¨® ante la polic¨ªa auton¨®mica acompa?ada de su madre, e identific¨® sin ninguna duda a los sospechosos que les mostraron, hasta el punto de que ella misma los lleg¨® a identificar por su nombre. Chapa, en el caso de Oriol P. S., y Baguer, en alusi¨®n a Ricardo P. B.
El abogado de la acusaci¨®n particular, Llu¨ªs Costa, ya hab¨ªa solicitado hace unos d¨ªas a la juez que instruye el caso, Silvia L¨®pez Mej¨ªa, que citase a declarar a esa testigo, as¨ª como al due?o de un cibercaf¨¦ que frecuentaban los acusados para recuperar las grabaciones que ten¨ªan en sus tel¨¦fonos.
Esteban P., padre de uno de los detenidos, declar¨® ayer que las impactantes im¨¢genes del v¨ªdeo del cajero autom¨¢tico, difundidas por los medios de comunicaci¨®n, que muestran con bastante detalle la agresi¨®n a la mendiga, "no demuestran la crueldad con las que se ha dicho que actuaron" los detenidos. En su opini¨®n, la grabaci¨®n muestra que se produjo una explosi¨®n, "y que no se trat¨® de un incendio, como se ha dicho". En este sentido, aduce que su hijo estaba dentro del cajero cuando se inici¨® el fuego "y hasta le salpic¨® algo de l¨ªquido, lo que hizo que los j¨®venes se asustaran y huyeran".
En relaci¨®n con la actuaci¨®n de los acusados, el padre afirm¨® que se trata de "unos desgraciados que, bajo el influjo del alcohol, hicieron de todo". Esteban P. precis¨®, refiri¨¦ndose a su hijo, que "es un tonto", y reclam¨® que se le castigue por lo que sucedi¨®, no por lo que se dice que pas¨®. En su opini¨®n, la muerte de la mendiga no puede calificarse de homicidio porque no existi¨® ni premeditaci¨®n ni intencionalidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.