Legan¨¦s 'forever'
VICENTE MOLINA FOIX
Los ni?os de Legan¨¦s que nacieron con el siglo podr¨¢n vivir 120 a?os, superando las fantas¨ªas de Carlos Saura, Garc¨ªa M¨¢rquez y otros artistas m¨¢s directamente volcados a la ciencia-ficci¨®n. La noticia la le¨ª en un reportaje de la revista Tiempo firmado por Pepa Rebollo y Jos¨¦ Mar¨ªa Goicoechea y basado en minuciosas investigaciones y preguntas a especialistas que sonaban muy serios. Uno de ellos, Jos¨¦ M¨¢rquez-Serres, presidente de la Sociedad Espa?ola de Medicina de Antienvejecimiento y Longevidad (el nombre de la instituci¨®n ya es una garant¨ªa, por lo longevo), afirmaba lo siguiente: "Se sabe que la esperanza de vida de los ni?os nacidos a partir de 2000 ser¨¢ de 100 a?os aunque, con el paso del tiempo, con los nuevos avances m¨¦dicos y con las modificaciones gen¨¦ticas, este margen puede llegar a ampliarse hasta los 150 a?os".
Una cosa es el futurismo, y otra el municipio. ?Qu¨¦ tiene Legan¨¦s que no tengan no ya otras poblaciones espa?olas sino, por ejemplo, el barrio de la Prosperidad, que me queda m¨¢s a mano? La respuesta tambi¨¦n la daba, por un lado, el semanario, y por otro este mismo peri¨®dico que usted est¨¢ leyendo, en un art¨ªculo de ¨²ltima p¨¢gina de Susana Hidalgo. No se trata de que Legan¨¦s sea Eldorado, Shangri-La, el Pa¨ªs de Cuca?a o Jauja siquiera. La explicaci¨®n es de un tinte m¨¢s sociol¨®gico que m¨ªtico, y nos llega por boca del doctor ?ngel Otero, de la Universidad Aut¨®noma de Madrid: "La peculiaridad de Legan¨¦s viene de la importancia de las relaciones sociales en la salud de los mayores y por lo que ¨¦stas colaboran para alcanzar un 'envejecimiento saludable' (el subrayado no es m¨ªo)".
Confieso que conozco mal Legan¨¦s, y me arrepiento. Por lo que he colegido de los citados art¨ªculos, Legan¨¦s no es que tenga calidad de vida, es que proporciona -pr¨¢cticamente- un seguro contra la muerte. Y el secreto est¨¢ en que en esa localidad madrile?a las personas mayores tienen muchas relaciones sociales, participan en actividades comunitarias y siguen, por lejos que les quede el mar, la dieta mediterr¨¢nea. Hasta aqu¨ª los expertos.
Ahora mis cavilaciones. La foto en colores de la ¨²ltima p¨¢gina de EL PA?S estaba plet¨®rica de energ¨ªa. Las autoridades locales han instalado, por lo visto, un parque gimn¨¢stico al aire libre en un enclave de igual nombre a otro de Alcorc¨®n que es sin¨®nimo de botell¨®n, foll¨®n y pistol¨®n: Polvoranca, una costa re?ida con la dieta mediterr¨¢nea. Pues bien, a ese parque, el primero de su especialidad en Espa?a, las personas de m¨¢s de 65 a?os (de las que en Legan¨¦s viven 24.000) van a ejercitarse en ch¨¢ndal y zapas, usando unas m¨¢quinas tra¨ªdas especialmente de China, donde parece que la vejez es mucha y muy maquinal.
En el leganense parque de Polvoranca hay 21 aparatos de gimnasia para la tercera edad, que pronto -estamos en Legan¨¦s, no se olvide- ser¨¢ la cuarta. Y todos esos aparatos llevan, aparte del nombre original en chino, que no lo daba el peri¨®dico, un subt¨ªtulo o apodo: "el ascensor", "el tim¨®n", "el autob¨²s", "los patines". Ser¨¢ que no tengo mucha ciencia aer¨®bica, pero a m¨ª esos sobrenombres maquinistas me sonaban a pose er¨®tica de un Kama Sutra tecnificado (yo mismo practiqu¨¦, de m¨¢s joven, "el tren", "el caballito", "la cuerda floja", "la trimurti" y otras figuras amorosas cuya descripci¨®n podr¨ªa chocar en esta p¨¢gina 2 del suplemento "Madrid", aunque son poca cosa comparadas con las que se anuncian, sin salir de "Madrid", entre la inmobiliaria y la cartelera).
De todo lo le¨ªdo, con el inter¨¦s propio de alguien que ya no cumplir¨¢ los 50, lo que m¨¢s saco en limpio es la esperanza de que los nuevos avances gen¨¦ticos, mayormente experimentados en Legan¨¦s, dignifiquen el erotismo "terciario" sin que a uno por practicarlo le llamen carcamal, si eres hombre, o lagarta jur¨¢sica si mujer. No lo digo yo. Lo dec¨ªa, en Tiempo, el doctor Alberto Castell¨®n, miembro destacado de la Sociedad Espa?ola de Geriatr¨ªa y Gerontolog¨ªa, no por m¨¢s corta de nombre menos fiable. Cito al doctor: "Establecer nuevas actividades entre los mayores abre una v¨ªa para que aquellas personas que se han quedado solas puedan tener una segunda oportunidad. Hay que acabar con esa idea de la sexualidad del viejo verde".
He empezado a mirar a c¨®mo est¨¢ el metro cuadrado en Legan¨¦s.
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