Francia baja ocho puntos el tipo m¨¢ximo del impuesto sobre la renta

T¨ªmidamente, seg¨²n los expertos, pero el Gobierno conservador de Dominique de Villepin ha puesto en marcha una reforma fiscal que destaca por la reducci¨®n de seis a cuatro tramos del impuesto sobre la renta, con un m¨¢ximo del 40%, frente al 48% anterior, y el establecimiento de un techo m¨¢ximo fiscal para todos los contribuyentes del 60% sobre el total de los ingresos. La rebaja de impuestos prometida queda pospuesta.

Espa?a no es el ¨²nico pa¨ªs europeo atareado con las reformas fiscales. En Francia tambi¨¦n se vive este debate despu¨¦s de que el presidente Chirac, en su campa?a presidencial de 2002, prometiera una rebaja fiscal que ha quedado pospuesta sine die, aplastada por el peso de la enorme deuda p¨²blica -superior a 1,1 billones de euros-. Lo ¨²nico que notar¨¢n los franceses este a?o, as¨ª, ser¨¢ una simplificaci¨®n del modelo.

La ley de Finanzas de 2006, que los contribuyentes no encontrar¨¢n hasta dentro de algo m¨¢s de un a?o, en pleno periodo electoral, fue aprobada a finales de diciembre junto a los presupuestos del Estado. La reforma instituye un derecho llamado de restituci¨®n para aquel contribuyente que pague m¨¢s del 60% del total de sus ingresos del a?o precedente en la suma de todas las cargas fiscales. Cuando un contribuyente, una vez ha satisfecho todas sus cuentas con las Administraciones -incluidos los impuestos locales como la tasa de residencia, la de recogida de basuras o el impuesto audiovisual- descubre que la suma de sus impuestos directos de 2006 es superior al 60% de sus ingresos de 2005, podr¨¢ pedir a Hacienda que le devuelva la diferencia. El Gobierno calcula que 14.000 hogares se beneficiar¨¢n de esta medida, que le costar¨¢ al erario p¨²blico en torno a los 250 millones.

La reforma reduce de seis a cuatro los tramos, con una tasa m¨¢xima del IRPF que baja del 48,09% a un 40%. Los restantes tramos se fijan en 5,5%, 14% y 30%. A cambio se suprimen numerosos reembolsos y exenciones. Para las empresas, la tasa profesional no podr¨¢ superar el 3,5% del valor a?adido. Asimismo, la reforma aligera la fiscalidad de las donaciones, as¨ª como las donaciones entre hermanos.

Una de las reformas que m¨¢s pol¨¦mica ha creado ha sido la del Impuesto de solidaridad sobre la Fortuna (ISF), originalmente sobre los grandes patrimonios. El Parlamento aprob¨® una exenci¨®n del 75% del ISF sobre el valor de las acciones nominativas propiedad de los dirigentes o asalariados de una empresa siempre que conserven sus acciones durante m¨¢s de seis a?os.

El Ejecutivo conservador pretende evitar fugas de capitales. Son cada vez m¨¢s numerosos los empresarios que se domicilian fiscalmente en B¨¦lgica o Suiza para evitar el ISF, un impuesto que originalmente se dirig¨ªa a los m¨¢s ricos, pero que por efecto de la subida de pisos afecta cada vez m¨¢s a las clases medias, e incluso a pensionistas. Adem¨¢s se favorece la mobilidad profesional, con una prima de 1.500 euros para los parados que acepten un trabajo a m¨¢s de 200 kil¨®metros de su domicilio y para los propietarios que, tambi¨¦n sin trabajo, al mudarse pongan en alquiler el piso.