El Tribunal de la Competencia reabre la pugna legal contra el canon de los CD

Tras m¨¢s de dos a?os peleando la batalla sigue. El Servicio de Defensa de la Competencia, que deb¨ªa estudiar la legalidad del canon sobre soportes digitales, archiv¨® sin m¨¢s la denuncia que interpusieron el abogado Javier De la Cueva, la Asociaci¨®n de Internautas y la Asociaci¨®n de Usuarios de Internet. De la Cueva recurri¨® y el Tribunal de Defensa de la Competencia le ha dado la raz¨®n, al ordenar que se reabra el asunto y contin¨²e investigando.

De la Cueva prepara sus nuevas arremetidas contra un canon que considera "injusto, ins¨®lito y demencial". "El m¨¢s perjudicado por el canon es quien m¨¢s informaci¨®n necesita almacenar, y en cualquier pa¨ªs civilizado quien m¨¢s informaci¨®n guarda es la Administraci¨®n p¨²blica", dice, as¨ª que no se entiende que el Estado est¨¦ pagando una parte sustanciosa por usar CD y DVD para grabar informaci¨®n que no est¨¢ protegida por derechos de autor (por tratarse de documentos p¨²blicos). Y ah¨ª est¨¢ el argumento de De la Cueva.

El canon que actualmente pagan los discos digitales (CD, DVD, minidisc) es resultado de un acuerdo al que llegaron en 2003 ASIMELEC, que asocia a empresas de electr¨®nica y comunicaciones, con la SGAE y varias entidades de gesti¨®n de derechos de autor m¨¢s (AIE, de int¨¦rpretes, AISGE, DAMA, CEDRO y EGEDA). En los CD v¨ªrgenes, que cuestan unos 35 c¨¦ntimos la unidad, el canon representa el 40% del precio, mientras que en los DVD el canon supone el 60% de los 80 c¨¦ntimos que se pagan por disco, seg¨²n datos de ASIMELEC.

La recaudaci¨®n se reparte entre las entidades de gesti¨®n, que a su vez lo distribuyen entre sus socios, cantantes, int¨¦rpretes, escritores, etc¨¦tera. ASIMELEC calcula que las entidades de gesti¨®n recaudaron con el canon unos 70 millones en 2005.

En 2003, De la Cueva denunci¨® el acuerdo ante el Servicio de Defensa de la Competencia, un organismo dependiente del Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda, encargado de vigilar el buen funcionamiento del mercado.

El argumento: el acuerdo para fijar un canon representa un abuso de posici¨®n dominante y una fijaci¨®n ilegal de precios. La denuncia esgrim¨ªa adem¨¢s una cuesti¨®n a la que a¨²n no le han dado respuesta: "?Por qu¨¦ los juicios, que se graban en CD, deben pagar un canon a las entidades de gesti¨®n si no hay ning¨²n bien que sea una obra protegida?", pregunta el abogado.

Desde el a?o 2000 las actas de los juicios civiles y mercantiles se graban por ley en discos compactos. Cada abogado que solicite una copia est¨¢ pagando un canon. "La SGAE se lleva de cada disco que me graban con las actas su parte", dice, cuando el canon tiene como funci¨®n compensar por copias dom¨¦sticas que se hacen de obras como pel¨ªculas o m¨²sica.

"Lo que subyace bajo el canon es un sistema corrupto desde el punto de vista legislativo", critica De la Cueva. Desde el vicepresidente del Gobierno presentando los presupuestos en CD, hasta los polic¨ªas grabando im¨¢genes de sus c¨¢maras en DVD, todos esos discos pagan canon a las entidades de gesti¨®n".

De la Cueva, una vez reabierto el procedimiento, solicitar¨¢ a trav¨¦s del Servicio de Defensa de la Competencia que la Administraci¨®n p¨²blica informe de cu¨¢nto le cuesta el canon. De momento, tras m¨¢s de dos a?os siguiendo el proceso legal tortuoso "estamos en 2003, otra vez al principio".

La nueva ley de propiedad intelectual, que se tramita en el Congreso, introducir¨¢ modificaciones que afectar¨¢n al canon. Tras justificarlo porque Espa?a permite la copia privada, el canon deber¨¢ ajustar su cuant¨ªa en funci¨®n de varios criterios como capacidad de almacenamiento del aparato o implantaci¨®n de los sistemas anticopia. ?stos, sin embargo, deber¨¢n permitir siempre la realizaci¨®n de un m¨ªnimo de tres copias privadas.

En Alemania, la ley grava incluso los discos duros, una idea que en Espa?a han propuesto diferentes entidades de gesti¨®n. Las alternativas que diferentes grupos proponen al canon pasan por la supresi¨®n del mismo a cambio de la implantaci¨®n de los sistemas anticopia que, en caso de ser plenamente efectivos, supondr¨ªan la imposibilidad de obtener copia privada.