Bill Gates dona otros 500 millones para luchar contra la tuberculosis
Intenso debate sobre la influencia de la derecha religiosa en EE UU
Estados Unidos present¨® ayer en Davos su cara m¨¢s atractiva y otra m¨¢s preocupante. La mejor es la de la filantrop¨ªa. Bill Gates, presidente de Microsoft, anunci¨® que triplicar¨¢ en los pr¨®ximos 10 a?os, hasta 900 millones de d¨®lares (750 millones de euros), lo que su fundaci¨®n aporta para la lucha contra la tuberculosis, a la que ya ha dedicado 300 millones. Suma, pues, 600 millones m¨¢s (494 millones de euros), un gesto con pocos precedentes.
Esa enorme cantidad no es sino una gota en el Plan Global para Parar la Tuberculosis de 31.000 millones de d¨®lares (aunque se necesitar¨ªan 56.000 millones) para tratar a 50 millones de personas afectadas por esta enfermedad y prevenir otros 14 millones de muertes en los pr¨®ximos 10 a?os.
Por otra parte, Bill Gates, ya como empresario, no se mostr¨® preocupado por la pirater¨ªa de sus programas en China, pues cree que en 10 a?os el gigante asi¨¢tico habr¨¢ desarrollado una industria suficiente para querer proteger la propiedad intelectual. Gates cree que China se va a desarrollar como lo ha hecho Taiwan, y quiz¨¢ intente crecer econ¨®micamente antes de abrir la mano en las libertades. En todo caso, entiende que la mayor parte del esfuerzo investigador de Microsoft seguir¨¢ en Estados Unidos, para lo que su fundaci¨®n est¨¢ invirtiendo en educaci¨®n, preferentemente en institutos m¨¢s peque?os y especializados que impulsen el rigor.
A la vez, y ¨¦sta es la segunda cara de Estados Unidos, en este Davos que se celebra bajo el lema del imperativo creativo ha entrado el debate sobre el creacionismo (la doctrina que proclama que todo tiene un origen divino, niega el darwinismo y la teor¨ªa de la evoluci¨®n y ahora se presenta con el nombre de dise?o inteligente), con una cena-debate dedicada a esta cuesti¨®n y un coloquio sobre la influencia de la derecha religiosa en Estados Unidos, o "la mano de Dios en la Pol¨ªtica", en un panel dominado por evang¨¦licos americanos, aunque algunos se presentaron como progresistas.
Los di¨¢logos sobre religi¨®n han sido habituales en el Foro Econ¨®mico Mundial, y la v¨ªspera hubo uno sobre "el pecado". Pero hasta un prominente pastor protestante baptista de Estados Unidos, muy cercano a la Administraci¨®n de Bush, reconoci¨® que era la primera vez que hab¨ªan introducido la cuesti¨®n del "dise?o inteligente", cuya ense?anza en las escuelas, seg¨²n dijo, apoya un 20% de los estadounidenses, y "cuando llegue a 30%, habr¨¢ una revoluci¨®n", a?adi¨®.
Eso no significa que todos los presentes compartieran esta idea. Por el contrario, fue muy discutida. Alg¨²n experto describi¨® c¨®mo los grupos de presi¨®n bien organizados logran que esta visi¨®n se introduzca en los libros de texto que se deciden en cada Estado de la federaci¨®n. Sea como sea, la realidad es que los creacionistas han puesto una pica en un Davos que anda algo perdido en cuesti¨®n de ideas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.