Un bicentenario helado
La colocaci¨®n de una placa en la casa natal de Arriaga abre en Bilbao las celebraciones de su 200? aniversario
El teatro municipal y el conservatorio de m¨²sica de Bilbao llevan su nombre, pero hasta ayer el lugar donde vino al mundo el compositor Juan Cris¨®stomo de Arriaga el 27 de enero de 1806 pasaba desapercibido. El alcalde de Bilbao, I?aki Azkuna, descubri¨® ayer en la casa natal del m¨²sico -el n¨²mero 12 de la calle Somera, en el coraz¨®n del Casco Viejo- una placa conmemorativa en un acto que sirvi¨® para inaugurar el a?o Arriaga, todo un programa de conciertos y actividades diversas que se extender¨¢ a lo largo de los pr¨®ximos doce meses.
La amenaza de que la nevada arreciase acort¨® la ceremonia, a la que asistieron familiares de Arriaga, la corporaci¨®n municipal y numerosos representantes del mundo musical de Bilbao. Azkuna destac¨® que en la figura de Arriaga se representan todos los m¨²sicos de la ciudad, "desde Guridi y Arambarri a los actuales como Ach¨²carro".
El Ayuntamiento ofrecer¨¢ hoy caldo y 'txistorra' al p¨²blico que asista al homenaje
La fiesta del bicentenario de Arriaga, un m¨²sico precoz que escribi¨® su primera composici¨®n con 11 a?os y a los 13 ya se atrevi¨® con la ¨®pera Los esclavos felices contin¨²a hoy con un doble car¨¢cter, institucional y popular. La corporaci¨®n municipal desfilar¨¢ poco antes del mediod¨ªa desde el Ayuntamiento al Teatro Arriaga por unas calles que desde hace semanas est¨¢n llena de carteles con la imagen del compositor y la leyenda Arriaga bizirik/Arriaga vive. El retrato de ¨¦poca del m¨²sico se ha retocado, coloc¨¢ndole unos auriculares que tratan de darle un toque actual.
En la escalinata del teatro, el alcalde descubrir¨¢ el busto del compositor, remozado para la ocasi¨®n, junto al que se podr¨¢ ver un viol¨ªn, uno de los objetos personales de Arriaga que se conservan. Y la fachada principal del teatro quedar¨¢ cubierta por una pancarta gigante con su imagen.
La previsi¨®n de que contin¨²e la ola de fr¨ªo ha obligado a recortar el programa en el exterior del teatro. Est¨¢ previsto un alarde de danzas, pero, finalmente, la Banda Municipal no actuar¨¢. La celebraci¨®n popular continuar¨¢ en el interior de una carpa instalada en la plaza Arriaga, donde el Ayuntamiento obsequiar¨¢ a los asistentes al homenaje con un refrigerio a base de caldo y txistorra.
Con el aforo pr¨¢cticamente completo, la Orquesta Sinf¨®nica de Bilbao (BOS) ofrecer¨¢ por la tarde en el mismo teatro el primero de los conciertos que dedicar¨¢ a la m¨²sica del autor a lo largo de este a?o. Los programas preparados por su director art¨ªstico, Juan Jos¨¦ Mena, han huido de los conciertos monogr¨¢ficos y la obra de Arriaga se pondr¨¢ en relaci¨®n con otros m¨²sicos. Para el concierto inaugural se ha elegido a Mozart, en el a?o en que su m¨²sica ocupa la primera l¨ªnea de la atenci¨®n mundial al conmemorarse el 250? aniversario de su nacimiento.
Arriaga y Mozart nacieron un 27 de enero, con 50 a?os de diferencia. Sus biograf¨ªas coinciden tambi¨¦n en la precocidad, la pasi¨®n por la m¨²sica y en su temprana desaparici¨®n. A los 15 a?os, el m¨²sico bilba¨ªno se traslado a estudiar a Par¨ªs y en dos a?os consigui¨® ser profesor del conservatorio. Sus composiciones llamaron la atenci¨®n por su originalidad y elegancia, pero su prometedora carrera se trunc¨® al fallecer antes de cumplir s 20 a?os. Bilbao se ha empe?ado en recordar su figura y su m¨²sica a lo largo de 2006.
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