Calvario
Compr¨¦ el piso en el que vivo en mayo de 2004, un piso reformado de una casa antigua. Pues bien, el Ayuntamiento me env¨ªa una notificaci¨®n de orden de legalizaci¨®n de unas obras realizadas en abril de 2004, cuando yo a¨²n ni conoc¨ªa el piso. Resulta que, por medio de una denuncia de un vecino por ruidos, se present¨® la Polic¨ªa Municipal y vio que las obras que estaban haciendo no se ajustaban a la licencia solicitada. Estas obras las realiz¨® una peque?a empresa de reformas, que se puso de acuerdo con el anterior propietario de mi piso.
El Ayuntamiento inicia entonces un expediente y exige a esta empresa que paralice las obras y que presente la licencia adecuada para las que estaban haciendo. Esta empresa pasa del tema y no responde a su notificaci¨®n. La Polic¨ªa Municipal se presenta en junio de 2004, cuando el piso ya era de mi propiedad. Con tan mala suerte que no hab¨ªa nadie -yo a¨²n no hab¨ªa ido a vivir en ¨¦l-.
El siguiente paso fue en noviembre de 2004, cuando el Ayuntamiento hace una inspecci¨®n de la finca y acude un d¨ªa en el que yo tampoco estaba. Notifican a la empresa de reformas, otra vez, que han estado en la finca y que, al no haber nadie, esa empresa tiene que avisar al Ayuntamiento para que vayan un d¨ªa los inspectores. Como pueden imaginar, la empresa no responde tampoco al Ayuntamiento.
Despu¨¦s de unos meses, en febrero de 2005, el Ayuntamiento inicia un expediente sancionador de 9.000 euros contra esta empresa, ya que no ha respondido a sus requerimientos. Y aqu¨ª viene lo mejor: en abril, el Ayuntamiento archiva ese expediente sancionador, ya que esta empresa por primera vez responde al Ayuntamiento y, con el argumento de que ellos no son los titulares del piso, les dan la raz¨®n y les dejan que se vayan de rositas...
En septiembre de 2005, el Ayuntamiento manda la notificaci¨®n de orden de legalizaci¨®n de obras al propietario anterior del piso, pero se lo env¨ªa al domicilio de la empresa de reformas. Pues bien, esta empresa responde por su cuenta y vuelve a decir lo mismo, que no es el propietario del piso. Pues se lo admitieron de nuevo, y ya fue cuando me cay¨® a m¨ª el marr¨®n, que soy el propietario actual del piso. ?A qui¨¦n persigue el Ayuntamiento.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.