En manos del mercado

Las veinte condiciones impuestas por el Gobierno para autorizar la OPA de Gas Natural sobre Endesa pueden agruparse en raz¨®n de sus objetivos: las que pretenden limitar la capacidad de dominio en el mercado del gas, como la venta mediante subastas p¨²blicas de la cantidad equivalente al gas importado por Endesa o la colocaci¨®n en el mercado de una parte del contrato con Argelia; las orientadas a impedir una excesiva concentraci¨®n en el mercado el¨¦ctrico, y las que establecen los m¨¦todos de seguimiento de la venta de activos, que estar¨¢ sometida a vigilancia del Servicio de Defensa de la Competencia. El Consejo de Ministros ha seguido el criterio razonable de que una operaci¨®n propuesta en el mercado en condiciones de legalidad y transparencia no puede ser impedida mediante una prohibici¨®n dif¨ªcil de argumentar, ni mediante condiciones imposibles de cumplir, como fue el caso de la fusi¨®n frustrada entre Endesa e Iberdrola. Estaba fuera de lugar prestar atenci¨®n siquiera al dictamen contrario a la OPA elaborado a instancias del PP por la mayor¨ªa del Tribunal de Defensa de la Competencia.

La obligada desinversi¨®n de activos el¨¦ctricos y de gas es un incentivo muy poderoso para la competencia energ¨¦tica, puesto que reforzar¨¢ las posiciones de empresas el¨¦ctricas competidoras como Uni¨®n Fenosa, conceder¨¢ oportunidades de inversi¨®n a otras y permitir¨¢ la aparici¨®n de operadores en el mercado de gas, hasta ahora monopolizado por Gas Natural. Consid¨¦rese que las restricciones decididas ayer por el Gobierno liberan para uso de otros agentes la electricidad equivalente a cuatro centrales nucleares y el 10% de la oferta de gas. Si se tiene en cuenta, adem¨¢s, que una entidad independiente gestionar¨¢ los cambios de suministrador de energ¨ªa a los clientes en las zonas donde redes de electricidad y gas est¨¢n dominadas por Gas Natural, es evidente que son condiciones m¨¢s matizadas, mejor pensadas y probablemente m¨¢s efectivas para la competencia que las redactadas para la fracasada fusi¨®n entre Endesa e Iberdrola. Por supuesto, es imprescindible que sean reforzadas con pr¨®ximas medidas regulatorias.

El siguiente paso l¨®gico es que Gas Natural acepte las condiciones, que son perfectamente asumibles en t¨¦rminos financieros e industriales. A partir de ese momento, la OPA se situar¨¢ en el terreno objetivo de la decisi¨®n de los accionistas de Endesa, del que nunca debi¨® salir. En ese territorio del mercado, Gas Natural tendr¨¢ que analizar la conveniencia de elevar el precio de la oferta para asegurarse el ¨¦xito de la operaci¨®n y rentabilizar el costoso tr¨¢mite que a¨²n deber¨¢ recorrer ante las autoridades de competencia. Tiene margen financiero para ello. Por encima de la feroz politizaci¨®n que ha hecho del caso el PP, ha empezado la hora de los propietarios de Endesa: sus accionistas.