La primera retrospectiva de Otto Dix en Espa?a condensa su cr¨ªtica a la realidad

La Fundaci¨®n Juan March de Madrid (Castell¨®, 77, www.march.es) present¨® ayer, con un concierto de jazz y cabar¨¦, la primera retrospectiva en Espa?a del artista alem¨¢n Otto Dix (Gera, 1891-Singen, 1968), un representante de la nueva objetividad y cr¨ªtico con la realidad del periodo de entreguerras en Alemania. Considerado por los nazis como un artista degenerado, el montaje de 84 obras (35 ¨®leos, 27 gouaches y acuarelas y 22 dibujos) recorre todas las etapas art¨ªsticas, sobre todo los a?os veinte y treinta en Berl¨ªn y Dresde, con sus vinculaciones a los movimientos de la vanguardia.

La muestra recoge su larga vida como testigo excepcional de los sucesos del siglo XX

Los nazis incautaron 260 obras suyas que fueron vendidas en el extranjero o destruidas

Una conferencia de Ulrike Lorenz, directora del Kunstforum Ostdeutsche Galerie de Ratisbona, m¨¢xima especialista en Otto Dix, y un concierto con piezas de Kurt Weill, Ervin Schulhoff, Hanns Eisler y Erich Wolfgang Korngold, interpretadas por Nuria Orbea (soprano) y Mois¨¦s Fern¨¢ndez Via (piano), enmarcaron la inauguraci¨®n de la retrospectiva de Otto Dix, la primera que se presenta en Espa?a y que coincide en las fechas con la celebrada en Berl¨ªn hace 80 a?os.

"Dix es un artista reconocido en la pintura alemana del siglo XX, con una madurez en el periodo de entreguerras y represaliado por los nazis en 1933", declar¨® Javier Gom¨¢, director de la Fundaci¨®n Juan March, en la presentaci¨®n de la muestra, junto a la especialista Ulrike Lorenz, Manuel Font¨¢n, nuevo director de exposiciones que sustituye a Jos¨¦ Capa, vinculado a la instituci¨®n desde 1973, y el presidente de la Fundaci¨®n Otto Dix, de Vaduz (Lichtentein), Rainer Pfefferkorn, que ha prestado la mitad de las obras expuestas, siendo el resto de 18 museos, galer¨ªas y coleccionistas alemanes.

Javier Gom¨¢ destac¨® la participaci¨®n de Otto Dix en los ismos de su ¨¦poca, en especial el movimiento de la nueva objetividad, dentro de la figuraci¨®n y en la tradici¨®n del expresionismo n¨®rdico y con referencias a los primitivos alemanes de los siglos XVI y XVII, como Cranach, El Bosco y Brueghel. "La exposici¨®n recoge toda su larga vida como testigo excepcional de los acontecimientos del siglo XX, desde el apogeo del imperio alem¨¢n, la fundaci¨®n del grupo El Puente y el mayo franc¨¦s, que sigui¨® este lector insaciable de Nietzsche y de la Biblia. En la primera sala est¨¢n los retratos de sociedad y sigue por el conjunto de Metr¨®polis de costumbres y aleg¨®rico, los bajos fondos de la noche de Berl¨ªn y desnudos, adem¨¢s de los paisajes tras su exilio interior al ser represaliado por los nazis".

Durante la exposici¨®n se ofrece un programa audiovisual, con el pase del documental Manos creadoras (1926), del director alem¨¢n Hans C¨¹rlis, donde aparece Otto Dix, y el documental Berl¨ªn. Sinfon¨ªa de una ciudad, de Walther Ruttmann (1927), arquitecto y cineasta del expresionismo alem¨¢n. A partir del 28 de febrero se celebrar¨¢ un ciclo de cuatro conferencias sobre el arte degenerado, con las intervenciones de Ferran Gallego, Valeriano Bozal, Luis Gago y F¨¦lix Duque. El cat¨¢logo incluye ensayos de Ulrike Lorenz, con comentarios sobre 11 obras y los escasos textos escritos por el artista. "Su obra est¨¢ llena de patetismo, crueldad y brutalidad", se?al¨® Manuel Font¨¢n.

A las contradicciones de la sociedad alemana de los a?os veinte y del propio artista se refiri¨® Ulrike Lorenz ante el gran estudio preparatorio para el tr¨ªptico Metr¨®polis, realizado con carboncillo, tiza, l¨¢piz, sanguina y color opaco sobre papel montado sobre lienzo, expuesto por primera vez en Espa?a, modelo id¨¦ntico a la pintura que conserva el museo de Stuttgart sin pr¨¦stamo a otros museos. En esta obra aparecen alguna caracter¨ªstica del pintor, como las t¨¦cnicas de pintores tradicionales, un bar de jazz de los a?os veinte con retratos de personajes coet¨¢neos del pintor y a los lados "las contradicciones de la ¨¦poca, su cara oscura, con prostitutas en un barrio chino y un hombre herido de guerra con muletas que tiene los rasgos de Otto Dix".

La obra de Dix, seg¨²n la estudiosa del artista, ense?a la cultura alemana y la mentalidad alemana de los a?os veinte, con las contradicciones pol¨ªticas de la Rep¨²blica de Weimar, la alegr¨ªa del cabar¨¦ y el sufrimiento de la guerra. "Es un artista que entra en los ismos de su ¨¦poca, desde el dada¨ªsmo y el cubismo hasta el expresionismo. Es uno de los realistas m¨¢s cr¨ªticos del siglo XX, que decidi¨® quedarse en las relaciones humanas en lugar de las grandes abstracciones. Nos puede contar algo sobre nuestras propias contradicciones y nuestra vida. Su obra trata la dicotom¨ªa entre eros y tanatos, el amor y la muerte, que es la confrontaci¨®n fundamental del ser humano".

Ulrike Lorenz marca en la exposici¨®n las diferentes fases creativas de Otto Dix, que el visitante, como es habitual en la Fundaci¨®n Juan March, puede seguir con el programa de mano. En los primeros espacios aparecen retratos y autorretratos anteriores de la I Guerra Mundial, que llega hasta comienzos de los a?os veinte, "los a?os dorados" que aparecen en Metr¨®polis. En los a?os treinta y cuarenta, el artista vuelve a los antiguos maestros de la pintura alemana, tras verse forzado al exilio interior por los nazis, que se refleja en la pintura de paisajes, para cambiar de estilo, tras la II Guerra Mundial, con la vuelta a sus or¨ªgenes del expresionismo.

"Aqu¨ª est¨¢ el Dix completo", afirma Lorenz, con su postura "cr¨ªtica en todo" sobre la sociedad de su ¨¦poca, siendo tambi¨¦n un representante t¨ªpico de la Rep¨²blica de Weimar, "con la apertura a las ideas y a la libertad". Los nazis incautaron 260 obras de Dix, que pasaron a colecciones privadas, se vendieron en el extranjero o fueron destruidas, seg¨²n Lorenz. Cree que hay algunas coincidencias con el pintor George Grosz, s¨®lo durante una ¨¦poca muy breve, y otros artistas de la nueva objetividad que vivieron la misma realidad. "Dix era un realista interesado por las consecuencias de las guerras y Grosz denuncia a los causantes de las guerras, al capitalismo. No se puede especular sobre la influencia actual de Dix en los actuales realistas alemanes".