El Gobierno fija un impuesto m¨ªnimo del tabaco para frenar la bajada de precios

El Gobierno contraataca en la guerra del tabaco. Ante la rebaja escalonada de los precios por parte de las empresas, el Consejo de Ministros aprob¨® ayer la segunda subida de impuestos en lo que va de a?o. El impuesto proporcional pasa del 55,95% al 57% y el espec¨ªfico fijo sube de 6,20 a 8,20 euros por cada 1.000 cigarrillos. Adem¨¢s, establece un nivel m¨ªnimo impositivo de 55 euros por cada 1.000 cigarrillos. Esto significa que cada cajetilla llevar¨¢ un m¨ªnimo de impuesto de 1,10 euros. Hacienda puede ingresar con esta segunda subida 600 millones de euros.

El Gobierno ha aprovechado el error del PSOE el pasado jueves en la votaci¨®n para convalidar la subida de impuestos de pasado del 20 de enero y dar una vuelta de tuerca a la fiscalidad del tabaco. El objetivo es frenar la bajada de precios de venta al p¨²blico, al tiempo que desincentivar el consumo por razones de salud p¨²blica. La estimaci¨®n de ingresos con esta subida es de unos 600 millones de euros, que habr¨ªa que sumar a los 600 estimados de la anterior bajada con el mismo consumo que el anterior si no se hubiera bajado el precio.

En esta ocasi¨®n el Gobierno, adem¨¢s de subir los impuestos especiales (el proporcional hasta el 57% y el espec¨ªfico hasta 8,20 euros por 1.000 cigarrillos) ha fijado un nivel m¨ªnimo de imposici¨®n de 55 euros por cada 1.000 cigarrillos. Este impuesto se aplicar¨¢ cuando la suma del impuesto espec¨ªfico y el proporcional (tambi¨¦n llamado ad valorem) sea inferior a esa cifra de 55 euros por 1.000 cigarrillos (1,10 por cajetilla).

El objetivo de este nuevo impuesto m¨ªnimo es que las marcas baratas suben el precio de su cajetillas, objetivo que no se consigui¨® con la anterior subida fiscal. Seg¨²n el Gobierno, el fijar este nivel m¨ªnimo de imposici¨®n permite asegurar que todos los cigarrillos del mercado tendr¨¢n que soportar una tributaci¨®n de impuestos espaciales de al menos el 1,10 euros, a lo que hay que a?adir el 16% de IVA. Las empresas calculan que con este nivel obligado de impuesto m¨ªnimo, nadie puede vender sin perder dinero una cajetilla de tabaco a menos de 1,55 euros, ya que hay contar con los gastos de fabricaci¨®n y estancos.

M¨¢s de dos euros

El Ministerio de Sanidad ha defendido que la fiscalidad del tabaco deb¨ªa ser tal que ninguna empresa pudiera vender una cajetilla a menos de dos euros. El impuesto m¨ªnimo ha sido un instrumento que han utilizado ya al menos 16 pa¨ªses de la UE para frener al avance de las marcas baratas que tratan de buscar clientes entre los j¨®venes. Tanto Philip Morris como Altadis, las dos empresas que controlan casi el 80% del mercado espa?ol de cigarrillos han defendido este impuesto m¨ªnimo.

Sin embargo, Philip Morris baj¨® los precios de sus principales productos para luchar conbtra la subida de impuestos decretada por el Gobienro, provocando que Altadis le siguiera los pasos. En definitiva, lo que ha conseguido es que se imponga el impuesto m¨ªnimo como ya hicieran antes otros pa¨ªses europeos. El impuesto m¨ªnimo fijado de 55 euros por 1.000 cajetilla se halla por debajo de la media europea. La fiscalidad global del tabaco en Espa?a (sumando los impuestos especiales y el IVA) se situaba antes de esta subida en el 74,7%, justo en la media europea. Fortuna, la marca m¨¢s vendida, desde hoy tiene una fiscalidad total del 79,7% sobre el precio al p¨²blico. Hasta ayer era de 76,5% del precio final.

La nueva subida fiscal del tabaco, la segunda en lo que va de a?o y la tercera en seis meses, busca asestar un golpe a las marcas baratas de tabaco. Estas marcas, a las que se han apuntado la mayor¨ªa de los fabricantes, siguen creciendo en el mercado y son criticadas abiertamente por las autoridades sanitarias. Las marcas de cigarrillos de bajo precio duplicaron sus ventas durante el pasado a?o, al pasar de 8,2 billones de unidades a 16,5 billones

Marcas baratas

En cuota sobre mercado total de cigarrillos pasaron desde el 8,8% de final de 2004 al 17,8% a final de 2005. Esta espiral de crecimiento casa poco con la gran campa?a de concienciaci¨®n de la Ley Antitabaco que el Gobierno ha puesto en marcha en enero pasado.

En el segmento de cigarrillos rubios el crecimiento de las marcas baratas ha sido espectacular hasta el punto de que a final de 2005 ya controlaban el 35% del mercado.

El mercado espa?ol de cigarrillos en 2005 ascendi¨® a 93,1 billones de unidades, con un ligero descenso del 0,9% sobre final de 2004. El segmento de cigarrillos rubios ha logrado un crecimiento del 1,5% en el a?o, mientras que el de cigarrillos negros cay¨® el 16,3%.

En junio de 2005 y tras varios meses de estudio, Altadis se subi¨® al carro de las marcas baratas que ya avanzaban a un gran ritmo. La empresa afirma que nunca ha estado c¨®moda en este segmento. Altadis ha defendido una fiscalidad de m¨ªnimos obligados para que los precios al p¨²blico subieran. Altadis lanz¨® el Ducados Rubio en julio de 2006 a un precio de 1,35 euros y ha logrado una buena cuota en el mercado. Ahora est¨¢ a 1,75 euros.

En esta l¨ªnea, se sit¨²a el an¨¢lisis que hace Philip Morris, que ha sido la principal impulsora de la guerra de las tabaqueras en Espa?a.