"M¨¦xico se ha degradado completamente"

Sergio Gonz¨¢lez Rodr¨ªguez, ensayista y narrador, trabaja desde hace tiempo en busca de las claves de los homicidios de Ciudad Ju¨¢rez. Fruto de su labor es Huesos en el desierto (Anagrama, 2002), que ya ha alcanzado su tercera edici¨®n. Este documento se ha convertido en el libro de cabecera de quienes investigan la violencia y la impunidad en la frontera norte de M¨¦xico.

PREGUNTA. ?De su libro han bebido autores que han abordado los asesinatos en Ciudad Ju¨¢rez?

RESPUESTA. Cuando estaba escribiendo Huesos en el desierto, Roberto Bola?o escrib¨ªa su novela 2666. Roberto contact¨® conmigo y empezamos a intercambiar correos electr¨®nicos. Me preguntaba cosas muy espec¨ªficas, muy detalladas, para describir puntualmente asuntos, como el tipo de armas, vestuario, los autos utilizados. Un d¨ªa llegu¨¦ a Blanes y Roberto me dijo que me iba a incluir como un personaje en su libro. Nunca pens¨¦ que lo fuera a hacer. Yo aspirar¨ªa simplemente que Huesos en el desierto se leyera como el pretexto para 2666.

"Estamos hablando del principal grupo delincuencial de Am¨¦rica Latina"

"?Qu¨¦ hacer con un pa¨ªs que permite asesinatos sistem¨¢ticos de mujeres en la frontera?"

P. ?Qu¨¦ le impuls¨® a escribir Huesos en el desierto?

R. Para m¨ª, la sociedad mexicana es el trayecto de una degradaci¨®n en los ¨²ltimos a?os. Nuestra tradici¨®n es vanguardista, antinacionalista, moderna, vinculada a una cultura urbana, negadora de costumbrismos, realista. De pronto nos encontramos que esa situaci¨®n cultural del pa¨ªs se ha degradado hasta tal punto que M¨¦xico ha dejado ser el pa¨ªs que conocimos, y hay que reconstruirlo. Ahora tenemos una sociedad tragada por el narcotr¨¢fico, la desigualdad es cada vez m¨¢s creciente, una democracia que no llega a construirse, con un dominio extraordinario de medios electr¨®nicos y una decadencia de libros. Tenemos que volver a encontrar c¨®digos y formas de dar racionalidad y sentido a esa degradaci¨®n. ?ste es, en parte, el intento de Huesos en el desierto. Qu¨¦ hacer con un pa¨ªs que permite asesinatos sistem¨¢ticos de mujeres j¨®venes en la frontera. Tenemos que repensar integralmente las cosas.

P. Durante la investigaci¨®n para escribir el libro, ?descubri¨® algo que no conoc¨ªa?

R. Lo que m¨¢s me conmocion¨® fue el contacto con las familias de las v¨ªctimas. Eso cambi¨® todo. Podemos tener un planteamiento previo, racional, frente a esto. El planteamiento intelectual, pero cuando vas ad¨®nde vive la familia de una v¨ªctima y te cuentan con sus propias palabras lo que ocurri¨®, estableces dos l¨ªneas muy poderosas: la racionalidad que puedes dar a un relato de adversidad y el testimonio vivo y directo de las cosas. Cuando escuchas estos relatos de quienes lo vivieron de primera mano todo cambia. Ah¨ª desplazas tu inter¨¦s intelectual y tu racionalidad hacia una zona que es absolutamente tr¨¢gica, impactante y conmovedora.

P. En Huesos en el desierto, ?prevaleci¨® el periodista o el escritor?

R. Actualmente, el estatuto literario debe estar en ser capaz de hacer una denuncia con un esfuerzo expresivo que permita que se mantenga m¨¢s all¨¢ de lo noticioso.

P. Despu¨¦s de publicar el libro la situaci¨®n en Ciudad Ju¨¢rez ha empeorado y la violencia contra las mujeres no se da s¨®lo en M¨¦xico sino tambi¨¦n en otros pa¨ªses.

R. Ah¨ª est¨¢, quiz¨¢, la explicaci¨®n de todos estos asuntos. En Ciudad Ju¨¢rez se da la misma inercia de machismo y misoginia inherente a la cultura mexicana. Adem¨¢s, hay una confluencia de factores que son particularmente identificados en el caso de Ciudad Ju¨¢rez: crimen organizado, poder pol¨ªtico y econ¨®mico, contrabando hist¨®rico entre Estados Unidos y M¨¦xico, una sociedad binacional de estatutos contrapuestos y asim¨¦tricos (Estados Unidos y frontera mexicana) y, sobre todo, un factor determinante que se llama C¨¢rtel de Ju¨¢rez, que no es solamente la imagen de unos pillos vestidos folcl¨®ricamente con botas haciendo contrabando de droga a Estados Unidos. Estamos hablando del principal grupo de delincuentes de Am¨¦rica Latina con enorme influencia en Estados Unidos, estamos hablando de una industria de lavado de dinero de 24.000 millones de d¨®lares anuales en M¨¦xico, seg¨²n cifras de la ONU.