"Es muy arriesgado no cerrar los corrales"

El presidente de los colegios veterinarios, Juan Jos¨¦ Badiola, lleva una semana aconsejando al Ministerio de Agricultura que ordene el cierre o enmallado de los millares de corrales esparcidos por todos los pueblos espa?oles. Tambi¨¦n cree que la lista de 25 humedales "de riesgo" se ha quedado corta, y que hay que vigilar fincas de caza y granjas de patos.

Pregunta. ?Est¨¢n bien protegidos los humedales?

Respuesta. Hay que mejorar el sistema de detecci¨®n. Los guardas tienen que estar alerta ante cualquier muerte de aves, sobre todo en patos y otros palm¨ªpedos acu¨¢ticos. Puede haber varios brotes simult¨¢neos. Adem¨¢s, la lista de 25 humedales declarados de riesgo el a?o pasado se hizo antes de que el virus llegara a ?frica y Europa, y debe ampliarse cuanto antes.

P. El Gobierno no ha ordenado cerrar todos los corrales caseros. ?Est¨¢ tranquilo?

R. Nada tranquilo. Es muy arriesgado no cerrarlos. En Espa?a hay miles de pueblos, y raro es el que no tiene varios corrales caseros. Una orden de cierre en el ¨²ltimo minuto no se podr¨¢ cumplir. Hay que avisar ya a los alcaldes, que en los pueblos peque?os son los responsables sanitarios, y quienes pueden informar a los propietarios. El ministerio y las comunidades no saben ni d¨®nde est¨¢n situados, porque un corral con 30 gallinas no se considera una explotaci¨®n, y no se registra en ninguna parte.

P. ?Qu¨¦ tienen que hacer?

R. Cubrir el corral con una malla pajarera. Es s¨®lo cuesti¨®n de un par de meses. Tambi¨¦n deben estar muy atentos a los cambios de comportamiento de las aves: que pongan menos huevos si son ponedoras, o que coman menos de lo normal.

P. ?Qu¨¦ m¨¢s?

R. Hay que enmallar las granjas ecol¨®gicas y las de patos. En Navarra hay grandes granjas de patos, y est¨¢n al aire libre. Luego est¨¢n las fincas de caza, sobre todo de perdiz, que son casi como explotaciones y tienen bebederos y comederos que deben protegerse de las aves migratorias. En todos estos sitios, y tambi¨¦n en las ciudades, hay adem¨¢s que redoblar la vigilancia y decir a los ciudadanos que avisen si ven aves muertas, pero sin tocarlas.