El dialogante Luis Valls

Era uno de los antiguos del Opus Dei, seguidor de San Josemar¨ªa Escriv¨¢ de Balaguer en su libro de las Conversaciones, donde hace alarde su fundador de libertad de conciencia.

Era Valls un independiente, que le¨ªa con atenci¨®n la revista Triunfo donde yo escrib¨ªa propugnando un cristianismo abierto. Y cuando me invitaba a comer con ¨¦l en su banco tomaba nota durante la comida de lo que yo dec¨ªa, sin hacer aspavientos acerca de mis ideas.

Y cuando yo cumpl¨ª 90 a?os, en el homenaje que me hicieron muchos amigos creyentes y no creyentes, de derechas o de izquierdas, asisti¨® entre las 225 personas invitadas por mis siete hijos, y tuvo mucho inter¨¦s en hablar con mi familia, sin hacer ning¨²n reproche a mis ideas cat¨®licas abiertas y progresistas.

Yo por eso tengo un inmejorable recuerdo de ¨¦l, porque le gustaba conocerlo todo y pensar por su cuenta, siendo sin embargo respetuoso seguidor de las ideas de San Josemar¨ªa Escriv¨¢ de Balaguer, particularmente de las que figuran en su discurso de 1967 a los amigos de la Universidad de Navarra, pidiendo Escriv¨¢ un "materialismo cristiano", "huyendo de toda intolerancia y fanatismo" y "convivir en paz con todos", fomentando "la propia libertad personal".

Ya s¨¦ que otros del Opus Dei no son as¨ª, pero Valls me dio ejemplo de esa sana libertad, con ideas unas veces abiertas y otras limitadas como todos los seres humanos.

Su muerte tendr¨¢ que ser recordada en un mundo en crisis religiosa donde est¨¢n enfrentados creyentes contra increyentes, y creyentes entre s¨ª.

Luis Valls Taberner fue un ejemplo para m¨ª, a pesar de no pensar lo mismo que yo en algunas ideas religiosas.