Cat¨¢strofes evitables

A juzgar por las innumerables citas que se le dedican, Jared Diamond es un autor de culto para cient¨ªficos sociales de muy diversas disciplinas: ge¨®grafos pol¨ªticos, antrop¨®logos evolutivos, historiadores sociales. Y todo ello gracias a una magna obra maestra, que le hizo merecer una inmediata celebridad. Me refiero a su libro galardonado con el Pulitzer, Armas, g¨¦rmenes y acero (original de 1997 y traducida en esta misma editorial al a?o siguiente), en el que analizaba la colonizaci¨®n del planeta por los pueblos euroasi¨¢ticos con perspectiva evolucionista pero en clave geogr¨¢fica a la vez que tecnol¨®gica. Todo ello siendo un ornit¨®logo vocacional que ha invertido 40 a?os de su vida en observar sobre el terreno a las aves del para¨ªso que todav¨ªa pueblan las boscosas monta?as de los pap¨²es en Nueva Guinea, mientras daba clases de fisiolog¨ªa en la Universidad de California en Los ?ngeles y presid¨ªa la secci¨®n estadounidense del World Wildlife Fund, la mayor organizaci¨®n ecologista a escala mundial. Y ahora, ocho a?os despu¨¦s de la primera, publica esta segunda obra maestra, todav¨ªa m¨¢s poderosa que la anterior, aunque ya se puede sospechar que no alcanzar¨¢ la misma aprobaci¨®n un¨¢nime que obtuvo aqu¨¦lla.

Sin embargo, existe una clara simetr¨ªa y continuidad entre ambas, pues su estilo intelectual y su metodolog¨ªa son los mismos. Pero si en Armas, g¨¦rmenes y acero explicaba las razones del ¨¦xito cultural que permitieron a ciertas sociedades del pasado triunfar e imponerse sobre las dem¨¢s, en Colapso se ha propuesto la tarea sim¨¦tricamente opuesta de explicar las razones del fracaso cultural que precipit¨® a ciertas sociedades del pasado en la decadencia (como la Groenlandia vikinga), la degradaci¨®n (como la civilizaci¨®n maya) o el s¨²bito final (como el de la Isla de Pascua). Unas razones catastr¨®ficas que son las mismas que ahora cercan a las sociedades del presente, amenazando con precipitar a toda la humanidad interconectada en un fracaso colectivo mucho m¨¢s pavoroso porque habr¨ªa de producirse a escala global. Por eso es de temer que su mensaje de aviso y alerta no siente muy bien al conformismo dominante, que prefiere creer panglossianamente que vivimos en el mejor de los mundos posibles.

Pero aunque participe activamente en las luchas ecologistas, Diamond no es un determinista medioambiental, como le acusan sus adversarios para poder ignorar sus argumentos. Por el contrario, en su modelo explicativo, fundado en un pent¨¢gono causal, s¨®lo dos ¨¢ngulos son medioambientales (el deterioro ecol¨®gico y el cambio clim¨¢tico), pues hay otros dos que proceden del medio social (la presencia de vecinos hostiles y socios comerciales) mientras que el quinto es institucional o pol¨ªtico: las decisiones que adopte cada sociedad en respuesta a sus crisis ambientales y sociales. Por eso Diamond recurre a lo largo del libro a un an¨¢lisis comparado en el que contrapone el diferente resultado de supervivencia o colapso que obtienen sociedades an¨¢logas al enfrentarse a crisis ambientales y sociales semejantes. As¨ª por ejemplo, all¨ª donde los isle?os de Pascua se extinguieron s¨²bitamente en muy pocos a?os, tras alcanzar la cima de su apogeo en el que edificaron los colosales moais que simbolizan su extinci¨®n, los isle?os de Tikopia por el contrario, enfrentados a una crisis maltusiana parecida, supieron sobreponerse y cambiar, renunciando al culto del cerdo para aprender a readaptarse a su entorno de forma sostenible.

Tras recorrer diversas sociedades del pasado que fracasaron o aprendieron a resolver sus problemas ambientales mediante decisiones sociales acertadas o err¨®neas, el libro se centra en aquellas sociedades actuales que tambi¨¦n se enfrentan hoy a parecidas crisis ambientales y maltusianas: la deforestaci¨®n masiva de Hait¨ª, la superpoblaci¨®n de Ruanda-Burundi provocadora de un genocidio, la destrucci¨®n del suelo australiano por una explotaci¨®n agraria desertificadora, la espiral desarrollista de China en pos de igualar el nivel de consumo occidental...

Y tanto en el pasado como en el presente siempre aparecen los mismos problemas de tensi¨®n maltusiana entre unos recursos menguantes y una voracidad demogr¨¢fica, competidora o consuntiva que los expolia hasta extinguirlos s¨²bitamente.

De ah¨ª que Diamond dedique un cap¨ªtulo esencial, el n¨²mero 14, a exponer la hoja de ruta que conduce a las sociedades a superar con ¨¦xito sus crisis ambientales o a fracasar en el intento. Y esta hoja de ruta es un sendero de dilemas decisorios o encrucijadas electivas que se resumen en la conocida tragedia de los bienes comunales, ya identificada por el microbi¨®logo Garrett Hardin en 1968, en la que Diamond fundamenta toda su argumentaci¨®n. Una tragedia de agotamiento y extinci¨®n ineluctable si no se toma la decisi¨®n ejecutiva de autolimitar la explotaci¨®n ambiental: ya sea mediante racionamiento dictado desde arriba (seg¨²n el ejemplo alem¨¢n o japon¨¦s) o por un acuerdo colectivo pactado desde abajo (el modelo de reparto multilateral donde cada parte se responsabiliza de su coto privado).

En funci¨®n de esto, y pese a todo, el libro no cae en el alarmismo catastrofista sino que apuesta por un esperanzado optimismo posibilista. Es verdad que a los ocho problemas ecol¨®gicos y maltusianos que acabaron con las sociedades colapsadas del pasado han venido a a?adirse en la actualidad cuatro nuevos problemas in¨¦ditos (cambio clim¨¢tico, acumulaci¨®n de residuos t¨®xicos, escasez de energ¨ªa y agotamiento del suelo). Pero el que sepamos resolverlos y superarlos o no lo hagamos es de nuestra exclusiva responsabilidad. Otros supieron hacerlo as¨ª antes que nosotros, que contamos adem¨¢s con una ventaja que ellos no tuvieron: y es la de conocer su pasada experiencia para poder aprender hoy de su ejemplo pret¨¦rito.