El desgaste emocional de los sanitarios
Cuatro de cada diez m¨¦dicos y enfermeras espa?oles sufren elevados niveles de cansancio an¨ªmico
El cansancio emocional de los trabajadores sanitarios est¨¢ nueve puntos por encima de la media. ?ste es el resultado m¨¢s llamativo del mayor estudio realizado en Espa?a sobre el s¨ªndrome del desgaste profesional, en el que han sido encuestados 1.095 trabajadores de cinco hospitales de la provincia de Girona. Un 41,6% de los trabajadores sanitarios -principalmente m¨¦dicos y enfermeras- presentaron un alto nivel de cansancio emocional, mientras que la media de otros colectivos profesionales de referencia se sit¨²a en torno al 33%. El cansancio emocional no repercute necesariamente sobre el usuario de la sanidad, aunque puede considerarse como el inicio del s¨ªndrome del desgaste profesional y puede derivar en otros dos componentes del burnout: la despersonalizaci¨®n y la baja realizaci¨®n personal.
Un estudio propone fomentar la autonom¨ªa y la autoestima y mejorar la organizaci¨®n
El estudio, titulado El desgaste profesional en el personal sanitario y su relaci¨®n con los factores personales y ambientales, ha sido dirigido por Armand Grau, Rosa Su?er y Mar¨ªa M. Garc¨ªa y publicado en Gaceta Sanitaria. Los autores proponen que se instauren medidas que eviten que los profesionales sanitarios puedan verse inmersos en el futuro en estadios m¨¢s graves del s¨ªndrome del desgaste profesional. Adem¨¢s, advierten de que hay que formar a los trabajadores en t¨¦cnicas de autocontrol y gesti¨®n del estr¨¦s para reforzar su optimismo y autoestima.
Mientras que el cansancio emocional limita la capacidad de iniciativa del trabajador, la despersonalizaci¨®n lleva aparejadas actitudes fr¨ªas, d¨¦spotas o c¨ªnicas hacia los compa?eros de trabajo o los usuarios de la sanidad. Este efecto todav¨ªa no se observa entre los sanitarios. El estudio ha detectado que la despersonalizaci¨®n es 10 puntos menor entre los trabajadores sanitarios que en otros colectivos. Eso significa que los profesionales sanitarios son conscientes de que tratan con personas en situaci¨®n de dolor y no se deshumanizan. El tercero de los componentes del s¨ªndrome de desgaste profesional, la baja realizaci¨®n personal, se sit¨²a cinco puntos por debajo de la media que se ha tomado como referencia.
Rosa Su?er, antrop¨®loga y enfermera del hospital Josep Trueta, advierte de que el personal sanitario es el que sufre los mayores ¨ªndices de desgaste profesional. "A los m¨¦dicos les ha costado mucho esfuerzo llegar al puesto que ostentan y a menudo no se sienten reconocidos ni recompensados", asegura el doctor Armand Grau, del hospital de Figueres.
La necesidad de prestigiar la sanidad y fomentar un mayor reconocimiento social de sus profesionales son una demanda constante de estos colectivos. "Una sociedad inteligente cuida a sus cuidadores", advierte Grau. Algunas de las encuestas denotaban situaciones graves, con profesionales sanitarios que tomaban ansiol¨ªticos o antidepresivos, aunque a menudo resulta complejo discernir si las causas que originan estas situaciones tienen ¨²nicamente un origen laboral. Curiosamente, los m¨¢s j¨®venes son los m¨¢s afectados por el desgaste. Los autores consideran que seguramente los m¨¢s quemados ya han abandonado su puesto de trabajo. "Hemos pasado de un tiempo en que el m¨¦dico era un Dios a otro en que abundan las exigencias y se dan a menudo casos de maltrato verbal e incluso f¨ªsico", explica Su?er. Los autores del estudio constatan una apremiante necesidad de incentivar al personal sanitario, una tendencia que se est¨¢ imponiendo en los principales hospitales de todo el mundo.
Armand Grau no cree que este s¨ªndrome se haya incrementado en los ¨²ltimos a?os, pero s¨ª que existe una mayor sensibilidad y una mayor preocupaci¨®n de las empresas por la salud laboral de sus trabajadores. "Parece que ahora tienen m¨¢s claro que si un trabajador se encuentra bien ser¨¢ m¨¢s productivo", indica Grau.
El s¨ªndrome de desgaste profesional fue introducido por Freudenberguer en la d¨¦cada de 1960 y desarrollado en la de 1980 con un instrumento de valoraci¨®n denominado Maslach Burnout Inventory, que mide las tres dimensiones comentadas anteriormente. Algunos de los s¨ªntomas del s¨ªndrome se asocian con psicopatolog¨ªas como la depresi¨®n, la ansiedad o los trastornos adaptativos o de personalidad.
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