El Capit¨¢n Trueno, en forma a los 50

Cuando apareci¨® la primera entrega de sus aventuras, el 14 de mayo de 1956, un episodio con el t¨ªtulo ?A sangre y fuego! y con la frase de reclamo "?Hab¨ªa que tomar la fortaleza a toda costa!", nadie pod¨ªa imaginar que nac¨ªa un mito. Editorial Bruguera consideraba que el Capit¨¢n Trueno ser¨ªa s¨®lo un personaje m¨¢s. Medio siglo despu¨¦s, el valiente cruzado, capaz de batirse -amablemente, pues, de hecho, eran aliados- con el mism¨ªsimo Ricardo Coraz¨®n de Le¨®n (y abollarle el escudo), sigue en plena forma y tiene detr¨¢s un pasado digno de una leyenda. "Es una gran felicidad", dijo ayer trabajosamente, pues su salud es delicada, V¨ªctor Mora (Barcelona, 1931) del 50? cumplea?os de su criatura. "Ha sido algo inesperado, no hubiera nunca imaginado que llegar¨ªa a algo as¨ª".

El Capit¨¢n y Sigrid s¨®lo consumar¨¢n su amor en una vi?eta ?26 a?os despu¨¦s de haberse conocido!

Desde los cuadernillos apaisados de la colecci¨®n Dan, a 1,25 pesetas, con su contraportada de vi?etas en azul, hasta el ingreso de Trueno en el ciberespacio (el Capit¨¢n tiene p¨¢gina web, www.capitan-trueno.com), el personaje no ha dejado de nutrir el imaginario colectivo. Ahora, como homenaje, en las bodas de oro de Trueno con sus lectores se publica El Gran Libro del Capit¨¢n Trueno (Ediciones B), un libro entra?able, muy ilustrado, que recoge d¨¦cada a d¨¦cada la historia y las vicisitudes (guerreras y editoriales) del caballero y rescata la memoria de Trueno.

Lo ha escrito Armon¨ªa Rodr¨ªguez, la mujer de V¨ªctor Mora, e incluye asuntos tan interesantes como la similitud del calzado de Trueno con las espardenyes catalanas, el desencuentro con el cine o las cortapisas de la censura: el Capit¨¢n y Sigrid s¨®lo consumar¨¢n su amor en una vi?eta en mayo de 1982, ?26 a?os despu¨¦s de haberse conocido! (el volumen incluye adem¨¢s de esa tronante escena de cama otra vi?eta de 1987 en la que la reina de Thule aparece rotundamente desnuda).

El libro, presentado ayer en Barcelona por la propia Rodr¨ªguez y su marido, con la intervenci¨®n de otro grande del c¨®mic, Francisco Ib¨¢?ez, pasa revista a todos los dibujantes que han dado vida al personaje, empezando por el primero, el genial e irrepetible Ambr¨®s. En sus p¨¢ginas se recuerda que el Capit¨¢n Trueno, aut¨¦ntico fen¨®meno de masas, fue el motivo de un sello de 1995, que tiene una calle dedicada (en Rivas, Madrid) y que le lanzaron grandes piropos desde la izquierda: "[El Capit¨¢n Trueno] fue un discurso progresista en medio de la ortodoxia franquista" (Manuel V¨¢zquez Montalb¨¢n).

El acceso a los archivos personales de Mora ha permitido que el libro presente algunos documentos in¨¦ditos, como p¨¢ginas originales de los guiones, ilustraciones o un dibujo de Trueno, Goliath y Crisp¨ªn regalado por Ambr¨®s a Mora y que nunca hab¨ªa sido exhibido p¨²blicamente.

"Desafiando las leyes de la f¨ªsica, primero fue el Trueno y luego la luz, una luz cegadora, maravillosa", manifest¨® ayer Ib¨¢?ez, el padre de Mortadelo y Filem¨®n, del Capit¨¢n de las vi?etas. "Nos ha hecho pasar horas inolvidables a todos", continu¨®. Ib¨¢?ez consider¨® que el ¨²nico rival que ha tenido Trueno "por estos pagos" era "un caballerete de cuyo nombre no quiero acordarme, un tipo enjuto, sin importancia, que, al rev¨¦s que Trueno, no daba la talla". El Capit¨¢n se enfrent¨® a cantidad de enemigos, desde Sir Black hasta el Conde Kraffa, pasando por tiburones, leones, pulpos y hasta dinosaurios, "pero el peor fue su propio editor", dijo en referencia a los problemas de masificaci¨®n de producci¨®n, cambios de dibujantes y enfrentamiento con los creadores de la serie, que fueron frecuentes durante una etapa de Bruguera. Ib¨¢?ez acab¨® abrazando a Mora, un abrazo en el que parecieron fundirse, como ellos, Trueno y Mortadelo.