Un 4¡Á4 de lujo con siete plazas

Un todoterreno grande y completo con toda la elegancia de Mercedes y el espacio interior de los monovol¨²menes m¨¢s amplios. El GL es la alternativa de la marca alemana a los Audi Q7 y Volvo XC90, dos 4¡Á4 de prestigio con siete plazas. Llegar¨¢ a Espa?a en septiembre y tendr¨¢ unos precios estimados a partir de 65.000 euros (320 CDi).

El nuevo GL presenta una imagen imponente y refleja la clase de Mercedes en un dise?o distinguido y exquisito. Comparte el chasis del Clase R y los motores del todoterreno ML, pero es mucho m¨¢s grande que ¨¦ste y se sit¨²a un escal¨®n por encima: mide 5,08 metros de largo, 49 cent¨ªmetros m¨¢s.

Siete plazas opcionales

Estas medidas definen un aspecto casi mastod¨®ntico, muy al gusto del p¨²blico norteamericano, pero permiten habilitar un interior muy amplio, con tres filas de asientos en configuraci¨®n 2+3+2 para alojar a siete pasajeros con suficiente espacio para las piernas. La ¨²ltima es opcional y los asientos se pueden plegar bajo el piso con una sola mano. En cambio, el maletero es justo con siete plazas, 200 litros, aunque llega a 1.240 si se oculta la tercera fila.

El Clase GL aplica las tecnolog¨ªas de Mercedes y cuenta con una gama de potentes motores: 320 y 420 CDi (224 y 306 CV) en turbodi¨¦sel, y 450 y 500 (340 y 388 CV) en gasolina. Todos vienen con el cambio secuencial 7G-Tronic de siete marchas e incluyen tracci¨®n 4¡Á4 4-Matic (con reductora y bloqueos de diferencial) y la suspensi¨®n neum¨¢tica Airmatic regulable en altura. Las dos ¨²ltimas soluciones potencian la versatilidad del GL, porque permiten afrontar con confort y seguridad los viajes en carretera y son de gran ayuda para superar zonas dif¨ªciles en el campo. El conjunto se completa con un equipo de serie sin carencias: ocho airbags, ABS, ESP, sensor de lluvia, climatizador, control de velocidad de crucero, radio-CD, ordenador de viaje... y todo tipo de opciones.Seguridad o recaudaci¨®n. De los 265 radares fijos que se han instalado en las carreteras espa?olas, s¨®lo 70, el 26%, est¨¢n en tramos con puntos negros o de alta siniestralidad.

Es una de las conclusiones del estudio realizado por Autopista, la revista de referencia en la prensa del motor espa?ola. El an¨¢lisis ha valorado la ubicaci¨®n de los radares que vigilan nuestras carreteras: los 150 de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico (DGT), los 35 del Pa¨ªs Vasco y los 80 de Catalu?a, dos comunidades que tienen transferidas las competencias de Tr¨¢fico.

El estudio se?ala que el 40% de los radares, un total de 104, se ubican en zonas de baja peligrosidad, o, lo que es lo mismo, con caracter¨ªsticas viarias cercanas a lo id¨®neo: tramos rectos, con buen asfalto, sin problemas de visibilidad ni cruces o pasos a nivel conflictivos, entre otras cosas. El semanario considera que estos detectores tienen "fines recaudatorios" y no cumplen con el objetivo de prevenci¨®n de accidentes para el que se aprobaron. Adem¨¢s, otro 34%, unos 91 aparatos, presentan deficiencias en se?alizaci¨®n, lo que merma sus aportaciones en seguridad: no se avisa con suficiente antelaci¨®n de la presencia del radar, que supuestamente alerta a su vez de un tramo peligroso, ni tampoco se indica la velocidad m¨¢xima a la que se puede circular en esa zona concreta.

A finales de 2007, la DGT prev¨¦ tener instalados un total de 515 detectores de velocidad.

Catalu?a, la que m¨¢s tiene

El estudio refleja tambi¨¦n que Catalu?a es la comunidad con m¨¢s radares (80), seguida del Pa¨ªs Vasco (35), Andalucia (29), Madrid (27) y Castilla y Le¨®n (22). Las que menos son La Rioja (2), Murcia y Extremadura (4 cada una), Asturias (6) y Cantabria (7). Madrid ostenta el m¨¦rito de ser la comunidad con mejor porcentaje de detectores bien colocados (52%), y Catalu?a recibe el dudoso galard¨®n de ser la que tiene m¨¢s radares peor ubicados: un 60%. La ubicaci¨®n de los radares puede consultarse en la p¨¢gina de Tr¨¢fico: www.dgt.es.