"Para conseguir un acuerdo es fundamental dejar atr¨¢s el pasado"

John Hume, antiguo l¨ªder del Partido Socialdem¨®crata y Laborista (SDLP) irland¨¦s, el partido nacionalista moderado y cat¨®lico en el mapa pol¨ªtico del Ulster, ha sido uno de los personajes clave del proceso de paz en Irlanda del Norte. Jug¨® un papel muy importante en los a?os 80 y los primeros 90 para convencer a Gerry Adams de que llevara a los republicanos del IRA/Sinn Fein a abandonar la lucha armada y abrazar la v¨ªa pol¨ªtica y, luego, como cimentador de los Acuerdos de Viernes Santo. Sus desvelos fueron premiados no s¨®lo con la paz en la provincia, sino con el Nobel de la Paz en 1998, junto al unionista David Trimble, y el Premio Mahatma Gandhi de la Paz en 2001.

Retirado ya de la vida pol¨ªtica por su achacosa salud, Hume, de 69 a?os, recalca en una breve entrevista telef¨®nica que en los conflictos es m¨¢s importante la gente que los territorios, defiende la Uni¨®n Europea como el mejor ejemplo de resoluci¨®n de conflictos en el mundo y pide a las v¨ªctimas de ETA que dejen atr¨¢s el pasado para construir el futuro.

"El reto es darse cuenta de que la gente es lo importante, no el territorio"

Pregunta. ?Qu¨¦ se puede aprender del proceso de paz en Irlanda del Norte ante el proceso que empieza ahora en el Pa¨ªs Vasco?

Respuesta. Lo primero que se puede aprender es que lo importante es la gente, no el territorio. La gente lucha por la tierra, "esta es nuestra tierra", dicen. Y el reto es darse cuenta de que la gente es lo importante, no el territorio. Cuando la gente est¨¢ dividida, la violencia no es la forma de resolver el problema; no hace m¨¢s que ahondar la divisi¨®n. Cuando tienes una divisi¨®n de esa naturaleza la manera de resolverla es el di¨¢logo, para crear una atm¨®sfera pac¨ªfica. El segundo aspecto se refiere a los tres principios necesarios para llegar a un acuerdo. Siempre digo que la UE es el mejor ejemplo de resoluci¨®n de conflictos en la historia del mundo. Cuando miramos al siglo que acabamos de pasar, la primera mitad ha sido la peor en la historia del mundo. Dos guerras mundiales, millones de seres humanos muertos. ?Qui¨¦n pod¨ªa prever que en la segunda mitad del siglo esos pa¨ªses estar¨ªan reunidos en una Europa unida? Creo que todos los dem¨®cratas tenemos la obligaci¨®n de estudiar lo que se ha hecho y los principios fundacionales de la UE. Esos principios se pueden aplicar a cualquier tipo de conflicto. Y eso es lo que hicimos en Irlanda del Norte.

P. ?Cu¨¢les son esos principios?

R. El primer principio es el respeto por la diferencia. Muchos conflictos se deben a diferencias, lo mismo de religi¨®n que de nacionalidad. La diferencia es un accidente de nacimiento. No es algo por lo que se deba luchar, sino algo que deber¨ªamos respetar. El segundo principio es crear instituciones que respetan las diferencias. La UE, el Consejo de Ministros, la Comisi¨®n, el Parlamento, todos los pa¨ªses est¨¢n ah¨ª. Y el tercer principio es lo que llamo el "proceso oculto". Todos trabajan juntos por el inter¨¦s com¨²n, los intereses socioecon¨®micos. Derraman sudor, pero no l¨¢grimas. Cuando miramos al Acuerdo de Viernes Santo en Irlanda del Norte, encontramos los mismos tres principios. Respeto por la diferencia: la identidad de ambas comunidades se respeta plenamente. Instituciones que respetan las diferencias: la Asamblea de Irlanda del Norte se elige por sistema electoral proporcional, con lo que se asegura que todos los sectores de la poblaci¨®n est¨¢n plenamente representados. Luego, la Asamblea representada proporcionalmente elige el Gobierno de Irlanda del Norte, en el que est¨¢n representados todos los sectores. Cuando todas esas instituciones est¨¦n en vigor quedar¨¢ implementado el tercer principio, lo que llamo "proceso oculto": los representantes de todos los sectores estar¨¢n trabajando juntos por el inter¨¦s com¨²n, el desarrollo socioecon¨®mico de Irlanda del Norte. Cuando se haga eso se habr¨¢ dado una ruptura con el pasado y la nueva Irlanda habr¨¢ evolucionado.

P. ?Cu¨¢l fue la cuesti¨®n clave de las negociaciones? En Espa?a, por ejemplo, hay diferentes visiones sobre lo que se debe hacer con los terroristas de ETA que est¨¢n en prisi¨®n.

R. Para conseguir un acuerdo es fundamental que dejemos el pasado detr¨¢s de nosotros y trabajar juntos por el futuro. Esa fue nuestra manera de abordar el problema.

P. Hay gente que piensa que para que haya un acuerdo antes se han de destruir las armas y que fue un error que eso no se hiciera as¨ª en Irlanda del Norte.

R. Eso fue parte del acuerdo una vez que fue alcanzado. Por supuesto, un aspecto fundamental del acuerdo es que es absolutamente contrario a la violencia, y estar contra la violencia significa que tienes que renunciar por completo a las armas. Y eso es lo que ocurri¨®.

P. Hay gente que piensa que los dos partidos moderados que promovieron el acuerdo, los unionistas del UUP que lideraba David Trimble y el SDLP que usted dirig¨ªa entonces se han sacrificado por la paz porque, una vez formalizado el acuerdo, han perdido poder.

R. El hecho es que, una vez se alcanz¨® el acuerdo, propusimos que la ¨²ltima palabra la tuviera la gente, y no los pol¨ªticos. El acuerdo se someti¨® a refer¨¦ndum en el norte y en el sur. Por primera vez en la historia, la gente de Irlanda toda vot¨® junta. Era nuestra obligaci¨®n como dem¨®cratas implementar la voluntad de la gente. Y eso significaba implementar todos los aspectos del Acuerdo de Viernes Santo. Eso significa que los grupos paramilitares ya no pueden reclamar, como hicieron a menudo en el pasado, que hablan en nombre de la gente. El refer¨¦ndum reforz¨® el acuerdo.