Nueva cara en las viejas cadenas
Katie Couric ser¨¢ la primera mujer al frente de las noticias de la CBS
La cadena CBS pagar¨¢ 15 millones de d¨®lares (12,4 de euros) a la periodista Katie Couric por encargarse del telediario nocturno que hasta hace poco presentaba el legendario Dan Rather. El contrato convierte a Couric en la periodista mejor pagada de la televisi¨®n estadounidense; ser¨¢, adem¨¢s, la primera mujer que presente en solitario uno de los informativos de las grandes networks.
Couric es el arquetipo del nuevo periodista televisivo, capaz de mezclar seriedad con un don innegable para el melodrama. Sus 15 a?os al frente del informativo matinal Today en la NBC han convertido a esta presentadora, agradable y pizpireta, en uno de los rostros m¨¢s conocidos. Su fichaje por la CBS ha cruzado la frontera corporativa, ha encabezado como noticia los informativos de otras cadenas y ha sido portada de los principales semanarios.
En los a?os setenta, las grandes emisoras ten¨ªan una audiencia de 70 millones; hoy s¨®lo son 30 millones
Pero su fichaje llega, por encima de todo, cuando los telediarios de las grandes cadenas atraviesan el peor momento. Los 60 millones de espectadores que ve¨ªan con devoci¨®n a sus periodistas favoritos en los a?os setenta hoy son s¨®lo 30 millones. La audiencia tiene ahora m¨²ltiples medios para recibir el mensaje y no acepta ya una sola versi¨®n. Y el rigor de las voces conocidas -voces con canas y una larga profesi¨®n a sus espaldas- se ha transformado en un presente incierto con la marcha de Tom Brokaw y Dan Rather y el fallecimiento de Peter Jennings.
De esos tres dinosaurios, Brokaw es el ¨²nico que ha podido escoger c¨®mo y cu¨¢ndo jubilarse. Anunci¨® su retirada -tras las ¨²ltimas elecciones presidenciales- con a?os de antelaci¨®n y ello permiti¨® a la NBC forjar poco a poco la imagen de su nueva estrella, Brian Williams, que tiene un gran talento y un empe?o incansable, pero es de momento demasiado joven y demasiado fr¨ªo, o quiz¨¢ el calendario no ha corrido lo bastante para olvidar a su antecesor.
Peter Jennings sorprendi¨® con el anuncio de su enfermedad. El c¨¢ncer de pulm¨®n apenas le permiti¨® despedirse; falleci¨® el pasado agosto. La ABC, sorprendida por esta vacante inesperada, valor¨® varias opciones, pero decidi¨® cambiar el formato para evitar comparaciones y escogi¨® dos copresentadores, Bob Woodruff y Elizabeth Vargas. La f¨®rmula parec¨ªa funcionar, pero la fortuna no parece acompa?ar a esta cadena: Woodruff se recupera de las grav¨ªsimas heridas que sufri¨® en un ataque con granadas en la guerra en Irak y Vargas est¨¢ a punto de desaparecer unos meses con una baja por maternidad.
El caso de Dan Rather es amargo. Unos documentos falsos sobre el pasado del presidente Bush precipitaron una jubilaci¨®n que pod¨ªa haber sido fausta y acab¨® siendo discreta y por la puerta de atr¨¢s. Desde entonces, la CBS ha valorado decenas de opciones y ha hecho pruebas a m¨²ltiples candidatos hasta que finalmente pudo cerrar la semana pasada el fichaje del a?o.
Katie Couric es tan entra?able que es capaz de conseguir noticias inyectando su propia simpat¨ªa a sus entrevistados. Sus a?os al frente de Today junto a Matt Lauer demuestran que sabe saltar del ¨²ltimo esc¨¢ndalo de corrupci¨®n a la ¨²ltima receta de cocina. Esa habilidad, que en otra ¨¦poca pod¨ªa haberse contemplado como la mejor f¨®rmula para perder el rigor, proporciona a Couric el nuevo elemento favorito para los analistas estadounidenses: credibilidad. Couric conoce el pa¨ªs. No es un producto de Washington. No es engolada. No est¨¢ obsesionada por las grandes historias.
A cambio, Katie Couric tendr¨¢ que luchar contra sus propios excesos. Comparti¨® con la audiencia el dolor por el fallecimiento de su marido y convirti¨® la enfermedad que acab¨® con ¨¦l -un c¨¢ncer de colon- en su obsesi¨®n, hasta el punto de retransmitir en directo la colonoscopia. Hay quien dice, por esto y por otros excesos de la nueva estrella, que Estados Unidos ha visto m¨¢s de lo que desear¨ªa ver de Katie Couric. En cualquier caso, a partir de septiembre, en la CBS, habr¨¢ todav¨ªa m¨¢s.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.