F¨¢cil de utilizar

El Note es un monovolumen peque?o muy pr¨¢ctico como segundo veh¨ªculo familiar de ciudad e incluso como coche ¨²nico. Su arquitectura aporta como ventajas una altura superior a lo normal, que facilita el acceso, y una posici¨®n de conducci¨®n m¨¢s elevada, que mejora la visibilidad. Adem¨¢s tiene un interior amplio y modulable, que permite variar el reparto del espacio en un momento, e incluye muchos accesorios pr¨¢cticos en el d¨ªa a d¨ªa, como el acceso y arranque sin llave, de serie en el acabado Tekna. Destacan tambi¨¦n los asientos delanteros, grandes y c¨®modos, adem¨¢s de los mandos, de estilo futurista y con un manejo sencillo e intuitivo.

Un motor de gasolina brillante

El Note incorpora un motor 1.6 16v. de gasolina muy moderno que sorprende por su calidad de funcionamiento. Est¨¢ fabricado en aluminio, rinde 110 CV y va acoplado a un cambio manual de cinco marchas desarrollado por Renault, aunque se ofrece tambi¨¦n con un autom¨¢tico de s¨®lo cuatro marchas, un tanto anticuado.

Lo mejor de este propulsor es que responde con br¨ªo casi desde el ralent¨ª, tiene fuerza a medio r¨¦gimen, aunque no tanto como un di¨¦sel, y despu¨¦s se estira con naturalidad hasta las 6.500 vueltas sin aparente esfuerzo. Con esta base, el Note tiene un tacto ¨¢gil y refinado, mueve el peso sin pereza y permite viajar a buen ritmo en cualquier trazado, incluso con carga. S¨®lo acusa cierta rumorosidad mec¨¢nica en carretera y exige reducir a cuarta en las subidas largas, pero adelanta bien y mantiene sin apuros la velocidad de crucero que se elija. Adem¨¢s sorprende con unos consumos ajustados para un 1.6 de gasolina: gasta siete litros en conducci¨®n suave y es dif¨ªcil llegar a nueve, tanto en ciudad como estirando m¨¢s las marchas.

Buen comportamiento din¨¢mico

El Note tiene unas suspensiones bien adaptadas a las carreteras europeas y ofrece un buen compromiso entre estabilidad y confort. No es un coche blando ni especialmente c¨®modo, pero tampoco resulta seco en los baches y, aunque rebota m¨¢s de lo deseable en las ondulaciones del asfalto y parece un poco impreciso, ofrece un comportamiento equilibrado. A pesar de su carrocer¨ªa monovolumen se conduce casi como un turismo, obedece con precisi¨®n al comienzo de la curva y s¨®lo en los virajes m¨¢s cerrados acusa el peso y tiende a deslizar de delante. Pero no balancea en exceso, se agarra bien y circula con aplomo en carreteras amplias y autopista, en parte por las llantas de 16 pulgadas, que aportan unas reacciones m¨¢s s¨®lidas y consistentes. En ciudad tiene un tama?o ajustado para aparcar, se conduce con dos dedos y exige el m¨ªnimo esfuerzo.

Las virtudes del Note se completan con unos frenos correctos y un completo equipo de seguridad en el acabado superior Tekna, muy recomendable, porque incluye de serie seis airbags, el imprescindible control de estabilidad ESP y otros detalles interesantes.