A?o y medio de silencio

El proyecto de la ley de Suelo viene de la anterior legislatura. Empez¨® a debatirse a finales de 2004 y fue rechazado en febrero de 2005 por el Parlamento, al no lograr el tripartito los apoyos pol¨ªticos de alg¨²n partido de la oposici¨®n. El texto, elaborado por el quipo de Madrazo, volvi¨® a presentarse con id¨¦ntico contenido y recibi¨® el visto bueno del nuevo Gobierno tras el pasado verano. Otra vez empez¨® el debate entre los partidos pol¨ªticos y, cuando parec¨ªa que encallar¨ªa nuevamente, en marzo se logr¨® el acuerdo con los socialistas. Un proceso en el que el PNV se mantuvo en silencio, dejando la inciativa a la consejer¨ªa de Javier Madrazo.

Por eso ha extra?ado que, superada ya la fase de presentaci¨®n de enmiendas e iniciado el estudio del proyecto en ponencia, los peneuvistas hayan sacado una propuesta con cambios de calado. El portavoz del PSE, Rodolfo Ares, mostr¨® ayer su sorpresa porque, "con todo el tiempo que el PNV ha tenido para hacerlo, no lo haya hecho hasta ahora". El propio I?igo Urkullu reconoci¨® que "no es habitual" esta actuaci¨®n de uno de los socios de un Gobierno, aunque s¨ª por parte de los partidos de la oposici¨®n.

El dirigente peneuvista explic¨® la tardanza de su partido en que el debate no hab¨ªa terminado con las organizaciones sociales, pese a tratarse de un asunto que viene de la anterior legislatura. "Ha podido ocurrir que hayamos dado pasos para elaborar la ley sin haber tenido todos los partidos pol¨ªticos las propuestas debidamente completadas". Por ello, dijo que la ponencia en el Parlamento es el lugar para realizar nuevas aportaciones, "antes de llegar a otros tr¨¢mites donde est¨¢ ya todo cerrado".

Destac¨® Urkullu que su propuesta reserva un m¨ªnimo del 20% para alquiler social p¨²blico, un 60% se repartir¨ªa entre la vivienda protegida -en un porcentaje pendiente de definirse- y la tasada, con precios de entre 78.000 y 210.000 euros. El 20% restante ser¨ªa para la libre.

Con estos planteamientos, vaticin¨® que los j¨®venes podr¨¢n acceder a viviendas a trav¨¦s de los alquileres sociales, descendcr¨¢n los precios del mercado libre, habr¨¢ un control del precio real suelo evitando la especulaci¨®n y se "romper¨¢ la din¨¢mica de que la nueva construcci¨®n sea el lugar preferido para invertir".