La petici¨®n de relevo del presidente del CRL profundiza la crisis de la instituci¨®n

La decisi¨®n de Mart¨ªn Auzmendi de abandonar la presidencia del Consejo de Relaciones Laborales (CRL) al perder la confianza del sindicato ELA ahonda la crisis general de esta entidad por la incapacidad de cumplir su funci¨®n de foro de relaci¨®n entre sindicatos y patronal. El cuestionamiento por ELA de la actuaci¨®n de Auzmendi en el laudo de Caballito ha llevado a ¨¦ste a pedir el relevo al frente del CRL, al no estar previsto en sus estatutos su dimisi¨®n. La patronal Confebask y CCOO lamentaron la decisi¨®n y culparon a ELA del deterioro que sufre este organismo.

Auzmendi comunic¨® su decisi¨®n irrevocable de dejar el cargo en el ¨²ltimo pleno del CRL, celebrado el pasado 29 de marzo. El desencadenante de este paso ha sido la p¨¦rdida de confianza de ELA, sindicato que se la retir¨® el pasado mes de enero a ra¨ªz del laudo sobre la empresa Pferd R¨¹ggeberg (Caballito) de Vitoria, protagonista de la huelga m¨¢s larga mantenida en Euskadi. El sindicato de Jos¨¦ Elorrieta confirm¨® ayer que hace m¨¢s de dos meses comunic¨® a Auzmendi que "daba por rota su relaci¨®n confederal con ¨¦l", reproch¨¢ndole que hubiera elegido para el laudo un mediador que considera parcial. Sin embargo, ELA calific¨® en un comunicado de "inapropiada e irresponsable" la reacci¨®n de Auzmendi por sacar ese conflicto bilateral "al ¨¢mbito p¨²blico", comunic¨¢ndolo al resto de los miembros del consejo representados en el pleno.

El afectado rehus¨® ayer pronunciarse sobre la situaci¨®n creada. No obstante, personas allegadas se?alaron la incongruencia que supone que el sindicato que ostenta el 40% retire su confianza al presidente del CRL y, al mismo tiempo, le moleste que act¨²e de forma consecuente y quiera dejar el cargo. En este sentido, recordaron que Mart¨ªn Auzmendi acept¨® su designaci¨®n por el lehendakari en 2002 con la condici¨®n que fuera aceptada por todos los miembros del pleno de este ¨®rgano.

Este episodio profundiza la crisis del CRL, bloqueado en su funcionamiento por la desuni¨®n de los sindicatos entre s¨ª y la ruptura del di¨¢logo entre ¨¦stos y la patronal. La necesidad de adoptar las decisiones por mayor¨ªa simple de ambas partes (la patronal, de un lado, y los sindicatos ELA, LAB, CC OO y UGT, de otro), otorga de hecho a Confebask y ELA el derecho de veto. El desencuentro y la falta de di¨¢logo han sido la nota dominante en los ¨²ltimos a?os.

La petici¨®n de Auzmendi de abandonar la presidencia se produce tras cuestionar en varias ocasiones la utilidad p¨²blica del CRL en tales circunstancias. En una comparecencia en el Parlamento en febrero de este a?o, Auzmendi lleg¨® a admitir que la aportaci¨®n de este ¨®rgano a las relaciones laborales y como foro de encuentro entre la patronal y los sindicatos es "francamente lamentable". La entidad, creada en 1981, cuenta con un presupuesto de 2,6 millones de euros para el presente ejercicio.

La misma situaci¨®n de deterioro institucional atraviesa el Consejo Econ¨®mico y Social (CES), como ha reconocido p¨²blicamente su presidente, Antxon Lafont. A la vista de ello, el consejero de Empleo, Joseba Azkarraga, tuvo que realizar en febrero un llamamiento a los agentes sociales e instituciones a "implicarse en el debate sobre cu¨¢l debe ser el futuro de ambos ¨®rganos como instrumentos v¨¢lidos para el fortalecimiento del di¨¢logo social". Admiti¨® que su funcionamiento podr¨ªa ser "manifiestamente mejorable" y se comprometi¨® a analizar el futuro de estos dos ¨®rganos consultivos.

Buena labor

Frentes a los reproches de ELA, Confebask y CC OO salieron ayer en defensa de la actuaci¨®n de Auzmendi y responsabilizaron al sindicato mayoritario de la situaci¨®n creada en el CRL. La patronal destac¨® la "buena labor" que estaba desplegando Auzmendi y subray¨® que las explicaciones dadas por ELA sobre el motivo de desencuentro ponen en evidencia su concepci¨®n de los ¨®rganos de encuentro. A su juicio, declara abiertamente que los ¨¢rbitros y sus laudos tienen que ser "necesariamente de su gusto", aunque en el caso de Caballito no recus¨® al ¨¢rbitro cuando fue nombrado. El secretario general de CC OO en Euskadi, Josu Onaindi, asegur¨® que este episodio pone en evidencia la "actitud prepotente y arrogante" de ELA, cuya intenci¨®n es "condicionar toda la vida sindical en Euskadi". Onaindi reclam¨® la intervenci¨®n del lehendakari.