Ir¨¢n recupera la oferta de Mosc¨² de enriquecer uranio en territorio ruso

Con la amenaza de una posible resoluci¨®n del Consejo de Seguridad de la ONU sobre su cabeza, el Gobierno de Teher¨¢n resucit¨® ayer la oferta rusa para enriquecer el uranio iran¨ª en su territorio. Pero s¨®lo en el caso de que el dossier iran¨ª regrese al Organismo Internacional para la Energ¨ªa At¨®mica (OIEA), lo que equivale a borrar del horizonte la amenaza de sanciones por parte de la comunidad internacional. Ir¨¢n quiere ahora que se reconozca su capacidad nuclear, y ofrece a cambio negociar las condiciones del enriquecimiento de uranio a escala industrial.

"No aceptaremos ninguna resoluci¨®n impuesta por la fuerza", manifest¨® el jefe negociador iran¨ª, Al¨ª Lariyan¨ª, durante una conferencia en la Universidad Sharif de Teher¨¢n. "Ir¨¢n es al¨¦rgico a las condiciones de suspensi¨®n", a?adi¨® en referencia a la amenaza de sanciones.

"La propuesta rusa sigue sobre la mesa", hab¨ªa declarado poco antes el portavoz del Ministerio de Exteriores, Hamid Reza Asefi. "En las actuales circunstancias es normal que revisemos las distintas proposiciones sobre cu¨¢ndo se hace [el enriquecimiento] y en qu¨¦ condiciones", a?adi¨®.

Mosc¨² ofreci¨® en su d¨ªa la creaci¨®n de una empresa conjunta ruso-iran¨ª que enriqueciera en territorio ruso el uranio que Teher¨¢n necesita como combustible nuclear. De esta forma, se trataba de salvar la desconfianza de Estados Unidos y la Uni¨®n Europea hacia las intenciones ¨²ltimas de Ir¨¢n. Aunque los dirigentes de la Rep¨²blica Isl¨¢mica siempre han defendido que su programa es civil y pac¨ªfico, la t¨¦cnica de enriquecimiento les dar¨ªa eventualmente acceso a fabricar material fisible para bombas.

La propuesta rusa no lleg¨® a prosperar ante la insistencia iran¨ª de que se le permitiera mantener al menos un peque?o programa de investigaci¨®n en ese terreno. EE UU interpret¨® este deseo como una maniobra de despiste.

El debate qued¨® superado con el anuncio el pasado d¨ªa 11 de que Ir¨¢n hab¨ªa logrado enriquecer uranio al 3,5%, el umbral necesario para fabricar combustible nuclear. Es a¨²n una fase experimental, pero pasar a la producci¨®n industrial es s¨®lo una cuesti¨®n de tiempo y de instalaciones adecuadas, algo en lo que Ir¨¢n reconoce estar trabajando.

"El enriquecimiento en laboratorio ha empezado, va a continuar y es irreversible", subray¨® Asefi, quien no obstante dej¨® la puerta abierta a negociar la siguiente fase. "Deseamos encontrar soluciones al enriquecimiento a escala industrial mediante la negociaci¨®n", a?adi¨® el portavoz. Esta idea fue lanzada el pasado martes por el veterano pol¨ªtico Al¨ª Akbar Hachem¨ª Rafsanyani, bajo cuya presidencia se inici¨® el programa at¨®mico.

Medidas de confianza

"Deber¨ªamos continuar con nuestras medidas de confianza y ellos deber¨ªan aceptar que poseemos la tecnolog¨ªa de enriquecimiento. Ahora tenemos que negociar sobre las siguientes fases", defendi¨® Rafsanyani durante una conferencia sobre las pol¨ªticas nucleares de Ir¨¢n.

"Lo que nos est¨¢n diciendo es que lo van a hacer [enriquecer uranio a escala industrial] con nosotros o solos", interpretan fuentes diplom¨¢ticas europeas. "Hace un a?o les est¨¢bamos pidiendo que renunciaran al ciclo de combustible y hoy lo m¨¢s que podemos aspirar es a negociar en qu¨¦ condiciones acceden a ¨¦l", se?alan dando por hecho que, de no mediar una presi¨®n exterior insoportable, la comunidad internacional tendr¨¢ que hacerse a la idea de convivir con un Ir¨¢n nuclear. Los dirigentes iran¨ªes est¨¢n convencidos de que su programa at¨®mico no es el problema. Creen que los recelos de EE UU son una excusa para potenciar un cambio de r¨¦gimen, y que si ceden, ma?ana se encontrar¨¢ otro pretexto para ponerles contra las cuerdas. De ah¨ª que los reformistas defiendan las negociaciones directas con Washington para desbloquear la situaci¨®n. Pero los reformistas fueron barridos del mapa con el triunfo electoral de Mahmud Ahmadineyad el pasado junio.