El Sevilla va por la Liga de Campeones

El f¨²tbol tambi¨¦n es un estado de ¨¢nimo. Y tanto el Sevilla como el Barcelona, ambos ya campeones, lo tienen por las nubes. El partido disputado ayer es el que una colosal tormenta de granizo impidi¨® el pasado 23 de abril. Y fue muy distinto a lo que se supone que habr¨ªa sucedido entonces.

Desde el torment¨®n, el Barcelona se ha proclamado campe¨®n de Liga y el Sevilla se ha llevado la Copa de la UEFA. Una de las consecuencias de esta circunstancia aparec¨ªa impresa en las cuartillas de las alineaciones: en uno y otro conjunto faltaban hasta ocho de los titulares habituales. Otra, totalmente inesperada, que fue un partido abierto, bonito, entretenido, disputado, con goles... Un buen d¨ªa de f¨²tbol.

El equipo de Juande Ramos est¨¢ a un partido de redondear una campa?a de ensue?o

Al que m¨¢s picores le produc¨ªa el encuentro era al Barcelona. Con el trofeo de campe¨®n de Liga ya en la vitrina y la cabeza puesta en la final de la Liga de Campeones que disputar¨¢ el mi¨¦rcoles en Par¨ªs contra el Arsenal ingl¨¦s el partido era de lo m¨¢s inoportuno. Frank Rijkaard lleg¨® hasta a convencer a Eto'o de que lo mejor era que no viajara, que el Pichichi es menos trofeo que la Champions. Para el Sevilla s¨ª hab¨ªa premio: la posibilidad de presionar a Osasuna en la lucha por la plaza que da derecho a participar en la Liga de Campeones la pr¨®xima temporada. La ausencia de muchos de los titulares habituales no ten¨ªa otro motivo que el agotamiento de ¨¦stos. Javi Navarro y Maresca llevaban semanas compitiendo con dolores, y David Castedo y Mart¨ª, simplemente, no pod¨ªan m¨¢s.

Pero los que salieron por uno y otro bando fueron dignos representantes de los colores que vest¨ªan. En el Barcelona, Xavi intentaba recordarse a s¨ª mismo. Y bastantes veces lo consigui¨®. A los cuatro minutos, Motta le coloc¨® un pase a Ezquerro como Koeman sol¨ªa hacer con Begiristain. Pero el riojano lo tir¨® alto. Dos minutos despu¨¦s, Xavi insisti¨® por la banda de Ezquerro, que de nuevo estuvo cerca del gol aunque tampoco lo logr¨®.

Uno y otro equipo jugaban el f¨²tbol que normalmente interpretan otros y que est¨¢ dise?ado para otros. El Sevilla aceleraba en la medular y combinaba vertiginosamente entre l¨ªneas y frente al ¨¢rea barcelonista. En una de esas, Alves se apoy¨® en Renato, que le devolvi¨® la pelota con toda la clase del mundo para que el heterodoxo lateral metiera un golazo desde fuera del ¨¢rea. A los pocos minutos, el Sevilla marc¨® otra vez. De penalti pitado por una entrada de Belletti a Puerta, que pareci¨® no haber sido tal.

El Barcelona reaccion¨® e igual¨® el partido con un gol trabajado que logr¨® Ezquerro con un buen cabezazo y otro fruto de la suerte cuando un centro de Sylvinho se revir¨® en el aire y entr¨® por el primer palo de la porter¨ªa de Palop. El juego que se vio ayer no tuvo la calidad que habr¨ªan a?adido las estrellas ausentes. Pero fue enormemente honesto. Jugadas como las protagonizadas por Maxi y Larsson en la primera mitad o la del gol inexplicablemente anulado a Kepa en la segunda, est¨¢n dentro de la categor¨ªa de buen f¨²tbol.

El Sevilla se hizo con el mando en la segunda mitad y Kepa tradujo el dominio en el gol de la victoria que le mantiene en la lucha por la Champions. El Sevilla debe ganar al Madrid el martes y esperar a que pinche Osasuna y continuar as¨ª con la racha de m¨¢s ¨¦xito de su historia. La victoria de ayer fue asumida con absoluta normalidad por la hinchada sevillista. El equipo de Juande Ramos est¨¢ a un partido de redondear una temporada que ya es m¨¢s que espl¨¦ndida. El conjunto de Juande Ramos fue el m¨¢s reconocible. Las numerosas ausencias no se tradujeron en la p¨¦rdida de la personalidad elegida por el conjunto andaluz. El Bar?a acus¨® m¨¢s los descansos decididos por Rijkaard de cara a la final de la Liga de Campeones del mi¨¦rcoles. A¨²n as¨ª, unos y otros ofrecieron un buen espect¨¢culo, un buen trabajo. El Sevilla jug¨® mejor y

gan¨®. El Barcelona compiti¨® con honestidad y el p¨²blico disfrut¨® de otro buen d¨ªa de f¨²tbol en Nervi¨®n.