Hombres fuertes en embarcaciones fr¨¢giles

"Llegan empapados, vomitados, defecados... Lo primero es cambiarles de ropa y darles una manta para el fr¨ªo", explica Rub¨¦n Fern¨¢ndez, director provincial de Salud y Socorro de Cruz Roja en Tenerife. Este fin de semana, su equipo -m¨¢s de un centenar de personas entre profesionales de Cruz Roja y voluntarios- ha atendido a cerca de 400 inmigrantes subsaharianos que intentaban llegar a Espa?a en cayuco.

Lo segundo es curarles las heridas. "Ven¨ªan con rozaduras en las ingles y en las nalgas provocadas por el salitre. Mareados, deshidratados, y a veces con s¨ªntomas de inanici¨®n pero en 15 minutos vuelven a estar bien. Les damos comida, suero y se recuperan enseguida. De 400 personas, apenas hemos tenido que enviar al hospital a cuatro o cinco por deshidrataciones m¨¢s graves", asegura Fern¨¢ndez.

Los subsaharianos son "fuertes y resistentes", seg¨²n Juan Antonio Corujo, coordinador de las cerca de 200 personas de Cruz Roja que atienden a los inmigrantes que llegan a Canarias en cayucos, "unas barcas aparentemente robustas, pero muy endebles en realidad".

Gente fuerte que llega en embarcaciones fr¨¢giles. Y en silencio. "Al principio son muy desconfiados y no quieren hablar. Pero van ganando confianza mientras les atendemos y entonces te empiezan a contar que la traves¨ªa ha sido muy dura, que lo hab¨ªan intentado otras veces desde Marruecos o que salieron de su casa hace dos a?os... Cada cayuco es distinto y tiene su historia. No todos vienen de pa¨ªses costeros. Muchos emprendieron el viaje desde el centro de ?frica hace a?os".

Su primera posesi¨®n en Espa?a es el kit; un obsequio de Cruz Roja que incluye: un ch¨¢ndal, dos camisetas, dos mudas de ropa interior, dos pares de calcetines, un par de zapatillas de deporte y otro par de cholas, que es como se llaman las chanclas de playa all¨ª. "Siempre tenemos un stock de 2.000 kits en el almac¨¦n. Como este fin de semana han venido tantos, hemos tenido que hacer otro pedido a Madrid. El mi¨¦rcoles lo tendremos aqu¨ª. Malo ser¨¢ que se nos agoten en dos d¨ªas. Nos quedan m¨¢s de mil", comenta Rub¨¦n Fern¨¢ndez, desde Tenerife. En total, en Canarias, hay 8.000 kits preparados; 16.000 calcetines secos.

La mayor¨ªa de los subsaharianos que han llegado este fin de semana a las costas canarias llevaba en el agua seis o siete d¨ªas de media, seg¨²n el director provincial de Salud y Socorro de Cruz Roja, aunque las medias no sirven de mucho en este oficio. "Quitando el pico de la oleada de marzo, est¨¢bamos acostumbrados a recibir uno o dos cayucos por semana, es decir, unas 140 personas". "Este fin de semana, llegaba un cayuco y ya te estaban avisando de que hab¨ªan interceptado otro", corrobora Corujo. "No hay problemas de abastecimiento de material porque simplemente tenemos que estar preparados siempre", explica. Este fin de semana llegaron tantos inmigrantes a Canarias como en todo un mes, pero Cruz Roja insiste en que la situaci¨®n est¨¢ controlada. "No estamos desbordados. Siempre hay voluntarios disponibles y nos ha llamado mucha gente estos d¨ªas que quer¨ªa ayudar. Cuando pasan este tipo de cosas, ganamos notoriedad y se mueven muchas conciencias. S¨ª que es cierto que sin voluntarios, esto ser¨ªa imposible", asegura Corujo.

"En 25 minutos tenemos montada toda la infraestructura", afirma Fern¨¢ndez. Normalmente, por cayuco, hay 10 o 12 trabajadores de Cruz Roja. Salvamento Mar¨ªtimo en la mayor¨ªa de los casos, pero tambi¨¦n la Guardia Civil y el centro de coordinaci¨®n de emergencias de Canarias les dan el aviso. "Desde que nos llaman para decirnos que han interceptado una embarcaci¨®n hasta que llega a la costa suele pasar una hora y media. Es un tiempo precioso porque nos da tiempo a prepararlo todo bien y adem¨¢s los suelen llevar al puerto que es donde lo tenemos todo instalado. Cuando la patera no es interceptada y llega por s¨ª misma a una playa, para nosotros es mucho m¨¢s complicado porque tenemos que montarlo todo de repente", afirma Corujo.

Cada intervenci¨®n -recepci¨®n del inmigrante, recogida de datos, hidrataci¨®n- suele durar unas tres horas. "El personal hace muchas rotaciones porque es un trabajo muy cansado, a veces a horas intempestivas, e intentamos que un mismo equipo no atienda dos cayucos seguidos. Pero este fin de semana termin¨¢bamos de atender una patera y llegaba la otra", explica Corujo. Tuvieron que saltarse la norma.

El equipo de Cruz Roja que atiende a los subsaharianos llegados en cayuco se llama Unidad de Respuesta Inmediata de Ayuda Humanitaria a Inmigrantes. Cuenta con m¨¦dicos, enfermeras, traductores y hasta logistas. "Respuesta inmediata", "ayuda humanitaria", "log¨ªstica"... La misma terminolog¨ªa que se utiliza en un escenario de guerra; los mismos profesionales que acuden a los conflictos armados.