Los sindicatos vuelven a paralizar la UPV en demanda de m¨¢s sueldo para los docentes

La UPV volvi¨® a ser ayer una universidad sin profesores. La llamada un¨¢nime de los sindicatos a la huelga por la mejora en las retribuciones de los 4.200 docentes consigui¨® en su primera jornada de las dos presvistas esta semana (la otra est¨¢ convocada hoy) un nivel de respuesta calificado por las centrales como "exitoso" y "muy similar" al del 29 de marzo, cuando la incidencia se cifr¨® en un 90%. En la treintena de centros de la universidad p¨²blica, la actividad acad¨¦mica e investigadora fue nula o muy escasa, aunque en algunas facultades y escuelas se pudo constatar mayor presencia de docentes con respecto a la anterior convocatoria. "El apoyo ha sido incontestable", recalcaron los portavoces de los sindicatos.

La proximidad de la ¨¦poca de ex¨¢menes -comienzan en dos semanas- se reflej¨® en una mayor presencia de estudiantes en comparaci¨®n con el paro del 29 de marzo. Los alumnos aprovecharon la ausencia de clases para estudiar en las bibliotecas de una universidad con la mayor¨ªa de sus aulas desiertas. El mantenimiento, en l¨ªneas generales, del apoyo masivo a las reivindicaciones salariales fue interpretado por los sindicatos como una muestra m¨¢s de la necesidad de que la consejer¨ªa de Educaci¨®n "cambie su actitud y abra una negociaci¨®n real lo m¨¢s pronto posible". De este modo, se evitar¨¢n los posibles efectos negativos de nuevas movilizaciones en pleno periodo de evaluaci¨®n. "Conf¨ªamos en que los estudiantes no van a tener que sufrir las consecuencias, pero eso es responsabilidad de Educaci¨®n", insistieron.

?ste fue el mensaje que los representantes sindicales expresaron en las concentraciones frente a los vicerrectorados de Vitoria y San Sebasti¨¢n y en el Rectorado de Leioa, que congregaron a cerca de 300 personas. Pese a que las demandas, recogidas en un escrito entregado en el registro general de la instituci¨®n, no han variado un ¨¢pice desde que comenzara este pulsoo, ayer se pudo observar una transformaci¨®n en el tono del mensaje. La paralizaci¨®n del decreto de complementos, el aumento general de sueldos -calculado en una cantidad que ronda los 6.000 euros brutos anuales- y su desvinculaci¨®n a disponibilidades presupuestarias contin¨²a marcando el discurso sindical, pero la esperanza ha ganado posiciones en detrimento de la exigencia. "Algo se est¨¢ moviendo", reconocieron ayer las centrales.

Los sindicatos se aferran a las declaraciones del rector, Juan Ignacio P¨¦rez, el pasado mi¨¦rcoles en el ¨²ltimo Consejo de Gobierno de la UPV. Adem¨¢s de secundar una declaraci¨®n pidiendo a todos "el m¨¢ximo esfuerzo" para alcanzar un acuerdo, P¨¦rez mostr¨® su apoyo a la mejora de las retribuciones de los docentes y mostr¨® su "certeza" de que se alcanzar¨¢ un acuerdo "en un plazo razonable". No obstante, el Rectorado eludi¨® ayer hacer cualquier comentario sobre el alcance de la nueva jornada de paro.

Las previsiones optimistas de se vieron refrendadas ayer desde el Departamento de Educaci¨®n. Fuentes de la consejer¨ªa mostraron su disposici¨®n a "dignificar" las retribuciones de los profesores de la universidad p¨²blica. "Estamos a favor de negociar, de dialogar y de llevar estas cuestiones a buen puerto", adelantaron.

No obstante, eludieron pronunciarse sobre el cu¨¢ndo y el c¨®mo. S¨ª quisieron dejar patente su malestar por el perjuicio que, a su juicio, representa para la comunidad acad¨¦mica y para la propia imagen de la universidad las dos jornadas de huelga. "Hay que dignificar el salario de los docentes, pero tambi¨¦n el buen nombre de la UPV. Y medidas como esta huelga cuando est¨¢n tan cerca los ex¨¢menes no ayudan a ello", indicaron.

Esta posici¨®n ratifica la recogida en una reciente respuesta parlamentaria de la consejer¨ªa de Educaci¨®n a una pregunta del grupo popular sobre este asunto. El consejero, Tontxu Campos, se?ala en ella que la voluntad de su departamento es favorable a la mejora del salario del profesorado, pero deja claro que su margen de acci¨®n es limitado, lo que achaca al hecho de que es el Gobierno central el que fija los emolumentos de los docentes en la ense?anza superior p¨²blica.

Frente a esta argumentaci¨®n, los sindicatos han recordado en varias ocasiones que esta circunstancia es com¨²n en todas las comunidades aut¨®nomas y que en la mayor¨ªa de ellas ya se han adoptado diferentes iniciativas con car¨¢cter general que han redundado en una mejora de las condiciones salariales de los profesores.