La valiosa colecci¨®n filat¨¦lica de la ONU, en manos de Afinsa

Naciones Unidas tambi¨¦n tiene su propio esc¨¢ndalo con los sellos para coleccionista. Y la compa?¨ªa espa?ola Afinsa aparece citada de rebote. El archivo filat¨¦lico de la ONU fue puesto a la venta en Ginebra (Suiza) hace justo tres a?os por varios funcionarios de la ONU. La transacci¨®n est¨¢ rodeada de dudas y est¨¢ siendo investigada por la oficina de control interno (OIOS) porque se realiz¨® sin la autorizaci¨®n del secretario general, Kofi Annan. Esos sellos fueron adquiridos en junio de 2003 por Greg Manning, la casa de subastas controlada por la filat¨¦lica espa?ola, investigada por fraude en Espa?a.

La ONU es la ¨²nica organizaci¨®n internacional autorizada a emitir sus propios sellos postales, que cursa en tres monedas diferentes: d¨®lares estadounidenses, francos suizos y euros. Son obras de arte en miniatura, como indican los expertos en este sector, creadas por artistas de todo mundo y que reflejan las preocupaciones universales de sus pueblos, lo que explica que el 85% de las piezas sean coleccionadas por filat¨¦licos. El organismo ha emitido un millar de sellos diferentes desde octubre de 1951.

Los sellos de la ONU son obras de arte en miniatura de artistas de todo el mundo

Y dispon¨ªa tambi¨¦n de su propia colecci¨®n, con miles de piezas desconocidas en el mundo de la filatelia. Hasta que un grupo de funcionarios de la Administraci¨®n Postal de las Naciones Unidas (APNU) decidi¨® poner el archivo filat¨¦lico en manos de la casa de subastas suiza David Feldman. La APNU registraba esos a?os unas p¨¦rdidas de 2,9 millones de d¨®lares. La colecci¨®n postal de Naciones Unidas -integrada por centenares de miles de sellos que databan desde 1951- fue subastada en los suburbios de Ginebra en mayo de 2003, sin que se le diera mucho bombo al evento.

Y habr¨ªa pasado desapercibida de no ser porque se pag¨® un precio r¨¦cord. Arthur Morowitz, consejero delegado de la firma neoyorquina Champion Stamp Collection, se hizo con la valiosa colecci¨®n tras desembolsar m¨¢s de tres millones de d¨®lares por los ocho lotes puestos a la venta por Feldman. Morowitz revendi¨® pocos d¨ªas despu¨¦s la colecci¨®n a Greg Manning, la casa de subastas de Nueva Jersey que se fusion¨® con la espa?ola Auctentia para crear en 2003 el grupo Escala. El precio que pag¨® la casa de subastas Greg Manning a Champion Stamp por el archivo de Naciones Unidas se desconoce.

La filial estadounidense de Afinsa, considerada como la mayor vendedora del mundo de sellos y monedas de coleccionistas, subast¨® a su vez las piezas m¨¢s raras y desconocidas de la colecci¨®n en noviembre de 2003. El lote inclu¨ªa dise?os originales, pruebas de impresi¨®n y sellos desconocidos, todas piezas muy apreciadas por los coleccionistas. El precio de salida de esas piezas, recogidas en un cat¨¢logo de medio millar de p¨¢ginas, rondaba los 150 d¨®lares y los 10.000 d¨®lares, y podr¨ªan haber duplicado o triplicado su valor.

Se calcula que la subasta permiti¨® recaudar a la filial de Afinsa en torno a 1,25 millones de d¨®lares, una cifra que no confirma la firma estadounidense. Tampoco se dan detalles sobre las ventas que podr¨ªa haber realizado la subsidiaria de Afinsa en los a?os sucesivos con la venta de los otros sellos que compon¨ªan el valioso archivo, no tan exclusivos como los del primer lote pero de gran valor para los coleccionistas.

En todo caso, la primera subasta de la colecci¨®n filat¨¦lica de la ONU de mayo de 2003 y la reventa posterior a Greg Manning del archivo no se consideran en principio irregulares. Naciones Unidas evita, entre tanto, citar en sus informes p¨²blicos la venta de su exclusiva colecci¨®n filat¨¦lica, a pesar de los detalles de la subasta en Ginebra est¨¦n publicados en la p¨¢gina en Internet de la firma suiza David Feldman. En paralelo, la ONU intenta aclarar los motivos que llevaron a los funcionarios de la APNU a desprenderse del archivo y tiene en curso una auditor¨ªa interna que pretende determinar si la venta de la colecci¨®n se hizo cumpliendo las reglas. El material hist¨®rico de la ONU debe contar con la autorizaci¨®n del secretario general de la ONU antes de que pueda ser vendida. Kofi Annan no habr¨ªa dado en principio ese permiso, seg¨²n fuentes del organismo. "Se trata de saber si esos funcionarios vendieron los sellos creyendo que beneficiar¨ªan a la instituci¨®n o si lo hicieron para enriquecerse personalmente", indican.

Se calcula que la ONU podr¨ªa haber recaudado unos 2,5 millones de euros en la subasta original del lote. Las fuentes consultadas evitan hablar en este momento de irregularidades en la APNU, a pesar de que los ocho funcionarios que supuestamente participaron en la venta de la colecci¨®n est¨¢n suspendidos de sus puestos. La Secretar¨ªa General de Naciones Unidas se mantiene a la espera de los resultados de la auditor¨ªa interna "para determinar si es necesario proceder a una investigaci¨®n en profundidad".

Y entre tanto, en la sede de la ONU se teme que los sellos que compon¨ªan el valioso archivo, sobre todo las piezas m¨¢s desconocidas y raras, est¨¦n ya demasiado dispersas como para poder recomponer la colecci¨®n original. Aunque en Nueva York se cree que la mayor parte del lote sigue a¨²n en manos de Afinsa, los problemas por los que atraviesa la filat¨¦lica espa?ola introducen un elemento m¨¢s de incertidumbre sobre el futuro de estos sellos tan valioso.