"El problema del acoso escolar es que suele estar oculto"

Director y catedr¨¢tico de Lengua y Literatura Catalana en el instituto Salvador Espriu de Barcelona, Carles Mata preside la asociaci¨®n catalana de directivos de centros de ense?anza secundaria AXIA, integrada a nivel espa?ol en la Federaci¨®n Fedadi.

Pregunta. Los profesores dicen que hay m¨¢s problemas de convivencia en los institutos. ?A qu¨¦ se deben?

Respuesta. Las circunstancias han cambiado. Por un lado est¨¢ la escolarizaci¨®n de todo el alumnado hasta los 16 a?os. Y, por otro, el cambio de centro de los alumnos entre la primaria y la secundaria. En la primaria ya se conoc¨ªa a los alumnos mientras que en la secundaria eran todos nuevos.

P. ?Tienen las direcciones suficiente poder para atajar los problemas de convivencia?

"Lo que m¨¢s nos cuesta en los casos de matonismo es combatir la ley del silencio"

R. En los primeros a?os de la LOGSE, hace 10 a?os, no ten¨ªamos muchos medios ni suficiente experiencia. Hab¨ªa alumnos que deb¨ªan tener un tratamiento especial derivado de su mala conducta. La experiencia nos hizo ver el camino para actuar, ya que la legislaci¨®n nos ralentizaba la actuaci¨®n hasta convertirla en casi ineficiente. En 2003 cambi¨® el sistema de sanciones. Hasta entonces todo pasaba por el consejo escolar y ahora pasa directamente a los directores.

P. ?Es mejor este sistema?

R. Es m¨¢s ¨¢gil y da mucha m¨¢s capacidad de respuesta inmediata. Ahora la LOE articula que la imposici¨®n de sanciones y la convivencia en los centros sigue en manos de las direcciones, pero abre la posibilidad de que en caso de reclamaci¨®n de las familias tiene que ser el consejo escolar quien lo revise.

P. ?Qu¨¦ problemas de convivencia son m¨¢s habituales, las agresiones f¨ªsicas, las ps¨ªquicas, el bullying o acoso...?

R. Son cosas muy diferentes. Hay que distinguir entre las conductas inadecuadas m¨¢s frecuentes en un centro escolar, su gravedad y las causas que provocan el mal clima. Es important¨ªsimo que se mantenga un buen clima escolar y tener en cuenta dos derechos esenciales para mantenerlo: por una parte, los profesores tienen que ense?ar, pero son trabajadores y eso no se puede olvidar, y por otra los alumnos tienen derecho a recibir una educaci¨®n adecuada.

P. ?Qu¨¦ hacen al detectar que un alumno agrede o acosa a otro?

R. El problema del acoso es que suele estar oculto y se debe destapar. A las familias les decimos que est¨¦n tranquilas y que observen a sus hijos por si detectan cambios de car¨¢cter, aunque entre adolescentes eso puede ocurrir en cualquier momento. El problema de detectar el bullying es que hay que destaparlo, y eso s¨®lo se consigue porque un profesor lo observa o bien porque el alumno no puede m¨¢s y lo cuenta. Lo que m¨¢s nos cuesta es combatir la ley del silencio. Si alguien explica que un compa?ero est¨¢ siendo sometido a pr¨¢cticas vejatorias se le asocia err¨®neamente con un chivato.

P. ?Y c¨®mo se act¨²a?

R. Primero hay que investigar a fondo. Con el bullying es dif¨ªcil. No queda claro a veces qui¨¦n es acosado y qui¨¦n acosador. La mediaci¨®n entre iguales en el bullying es dif¨ªcil. Han de actuar los adultos y observar las relaciones que se producen en un grupo donde est¨¢n los alumnos afectados y avanzar con pies de plomo. Se ha de discernir qui¨¦n acosa y qui¨¦n es acosado, porque el acosado puede sufrir una especie de negaci¨®n de que es acosado o no tener la conciencia de que est¨¢ siendo acosado porque piensa que eso forma parte de las relaciones normales entre compa?eros.

P. Pasando a un ¨¢mbito m¨¢s general, ?c¨®mo valora el plan de convivencia que ha presentado el ministerio?

R. Ya era hora de que hubiera iniciativas as¨ª. ?ste es un plan del ministerio, pero es sobre todo un acuerdo con los sindicatos, porque en el fondo los dos est¨¢n obligados por la ley de riesgos laborales que protege al trabajador, es decir, al docente, de los cambios en sus condiciones de trabajo. Estoy de acuerdo con el plan, pero no en que se enfoque s¨®lo desde el punto de vista del alumnado, es decir, de la convivencia alterada por el alumno, que es b¨¢sicamente cierto. Desde la asociaci¨®n de directivos de Catalu?a, AXIA, pensamos que se ha de enfocar mucho desde la ley de riesgos laborales, protegiendo al mismo tiempo el derecho a la salud del profesorado y el derecho al aprendizaje del alumnado. Y eso significa que se debe informar bien a los equipos directivos para que act¨²en correctamente, cosa que no se est¨¢ haciendo. La LOE, al igual que la Ley de Calidad, determina que los directores son los jefes de personal de los centros, y la ley de prevenci¨®n de riesgos laborales responsabiliza a los empresarios, o sea al Ministerio de Educaci¨®n y a las comunidades aut¨®nomas, de mantener la seguridad en los centros, y a los jefes de personal de garantizar esa seguridad laboral.