Gonz¨¢lez I?¨¢rritu desata pasiones con 'Babel', otro filme de historias cruzadas

Dos notables pel¨ªculas han mejorado el nivel medio de la competici¨®n, donde hasta ahora s¨®lo unos pocos t¨ªtulos hab¨ªan concitado el inter¨¦s general. Babel, del mexicano Alejandro Gonz¨¢lez I?¨¢rritu, fue recibida con entusiasmo por parte de buena parte de la prensa, mientras que la francesa Flanders, del realizador Bruno Dumont, irrit¨® y fascin¨® a partes iguales. En la secci¨®n paralela Una cierta mirada se present¨® con ¨¦xito la espa?ola Salvador, sobre la vida de Puig Antich, ¨²ltimo ejecutado por garrote vil en Espa?a.

Bruno Dumont ha regresado en Flanders al mismo lenguaje sereno, un tanto cr¨ªptico y a la vez fascinante que le hizo famoso en La humanidad, con la que obtuvo en Cannes el gran premio del jurado de 1999. Con mirada de entom¨®logo, describe la vida de un mocet¨®n silencioso y taciturno que divide su tiempo entre el cuidado de la granja en que trabaja y el amor con su amiga de infancia. Junto a otros dos j¨®venes del lugar es llamado a filas. Hay una guerra en alg¨²n sitio remoto de la que nada saben pero en la que deben combatir. En el desierto de un miserable pa¨ªs ¨¢rabe se enfrentan a muerte con otros muchachos de su edad, incluso m¨¢s j¨®venes, en secuencias de una violencia estremecedora, a¨²n mayor cuando el director las muestra en t¨¦rminos austeros, secos, incluso as¨¦pticos.

Flanders ofrece una desasosegante imagen de la sinraz¨®n humana, que fue recibida con calor por parte de unos, y con desd¨¦n por otros. No es pel¨ªcula f¨¢cil, puede irritar, y de hecho irrit¨®. Sus numerosos defensores reconoc¨ªan, no obstante, la posibilidad de que Dumont se estuviera imitando a s¨ª mismo, convirtiendo en receta est¨¦tica lo que en sus pel¨ªculas anteriores era inspiraci¨®n aut¨¦ntica.

Se repitieron comentarios similares a prop¨®sito de Babel, la ambiciosa nueva pel¨ªcula de Alejandro Gonz¨¢lez I?¨¢rritu y su guionista habitual, Guillermo Arriaga. La sorpresa que produjo Amores perros en el a?o 2000, confirmada luego en 21 gramos, est¨¢ lejos de producirse en Babel, y no porque la pel¨ªcula carezca de inter¨¦s, al contrario: sus dos horas y 20 minutos se ven con embeleso. S¨®lo es el forzado artificio de la trama lo que deja la sensaci¨®n de haber contemplado una pompa de jab¨®n. La incomunicaci¨®n a la que se refiere el t¨ªtulo est¨¢ mostrada en cuatro historias sin aparente conexi¨®n, pero que se acaban entrelazando de manera sorprendente, dando as¨ª cuenta de la intenci¨®n de sus autores: no s¨®lo hablar de la imposibilidad de entendimiento entre distintas culturas, sino de la fragilidad del ser humano.

Unos pobres ni?os marroqu¨ªes juegan con un fusil, regalo de un cazador japon¨¦s, cuya hija adolescente, sordomuda, vive en Tokio su falta de amor y de sexo como si fuera un infierno; una turista americana es herida por disparo del rifle en el autob¨²s en que viaja con su marido; sus hijos, en Estados Unidos, est¨¢n al cuidado de una mexicana que no quiere perderse la boda de su primog¨¦nito al otro lado de la frontera... Historias intensas, v¨¢lidas por s¨ª solas, que adquieren en su interrelaci¨®n un significado superior.

Babel es un filme notable, intenso, con un reparto compuesto por grandes figuras (Brad Pitt, Cate Blanchet, Gael Garc¨ªa Bernal) junto a otras menos conocidas, como la excelente Adriana Barraza en el papel de criada mexicana. La pel¨ªcula se estrenar¨¢ en Espa?a en septiembre.

En Una cierta mirada se ha exhibido Salvador, apasionada cr¨®nica de la vida y muerte de Puig Antich, el anarquista acusado del asesinato de un guardia civil, y ejecutado por garrote vil en 1974. Sobria, tensa y a ratos emocionante, Salvador, del director Manuel Huerga, es una digna muestra de cine pol¨ªtico para un p¨²blico amplio. Tambi¨¦n ser¨¢ en oto?o cuando llegue a los cines espa?oles.