Brujer¨ªa y prostituci¨®n
En Benin-City, al sur de Nigeria, el tr¨¢fico de mujeres para la prostituci¨®n es una industria boyante. La total falta de expectativas de un futuro medianamente digno para las j¨®venes nigerianas y las remesas de divisas que llegan a las familias de las que han conseguido llegar a Europa est¨¢n produciendo un verdadero ¨¦xodo de mujeres -la mayor¨ªa menores- hacia las calles de Roma o Mil¨¢n, Madrid, Berl¨ªn o Burdeos.
El reclutamiento de estas j¨®venes se produce a trav¨¦s de una eficaz red mafiosa que incluye a la madame, que suele vivir en alg¨²n pa¨ªs europeo; al socio local, que facilitar¨¢ los falsos documentos y la ruta para el viaje, y al "sacerdote" o "sacerdotisa", encargados de realizar el vud¨² a la joven aspirante. La ceremonia, para la que se utilizar¨¢n u?as, pelo y hasta sangre menstrual de las j¨®venes, consiste en establecer un pacto con los esp¨ªritus que incluye el secreto y el silencio absoluto sobre toda la operaci¨®n. A trav¨¦s del pacto-vud¨², el alma de la joven nigeriana queda en manos de esos esp¨ªritus que se vengar¨¢n sin piedad si ella pretendiera denunciar su situaci¨®n o quisiera escaparse. As¨ª, tras haber contra¨ªdo una deuda de unos 50.000 euros que deber¨¢ reintegrar a sus proxenetas, las j¨®venes prostitutas de Benin-City quedan atrapadas en una red de extorsi¨®n y miedo para siempre.
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