Unos 600 vecinos se manifiestan en la T-4 para pedir el cierre nocturno de Barajas
Los afectados denuncian el ruido "infernal" y el "insoportable" olor a queroseno
Alrededor de 700 vecinos de los municipios afectados por el ruido y la contaminaci¨®n de los aviones que operan en Barajas se concentraron ayer frente a la T-4 para pedir el cierre nocturno del aeropuerto. Los afectados son los 500.000 habitantes de municipios colindantes con el aeropuerto. Los manifestantes, adem¨¢s, denunciaron el "insoportable" olor a queroseno con el que conviven. La protesta fue convocada por la Federaci¨®n Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) junto a la Asociaci¨®n Espa?ola contra el Ruido de Aviones (AECRA).
Despu¨¦s de varios meses haciendo la guerra por su cuenta, los vecinos de los m¨¢s de 20 municipios afectados por el ruido y la contaminaci¨®n (unos 500.000 habitantes), se unieron ayer para pedir el cierre nocturno del aeropuerto de Barajas. ?sa, dicen, es la reivindicaci¨®n m¨¢s fuerte que comparten. Ayer fueron ellos quienes hicieron ruido.
Al mediod¨ªa, los centenares de personas que se hab¨ªan dado cita a las puertas de la T-4 comenzaron a desfilar y a hacer todo el estruendo posible con sus pitos y cacerolas. La polic¨ªa custodiaba la puerta de la terminal. Algunos, como los de la plataforma Pijamas en Acci¨®n, reivindicaban su derecho a dormir en paz vestidos con dicho atuendo.
"No podemos ni dormir, ni abrir las ventanas durante el d¨ªa", explicaba Estela Oropesa. "El olor a queroseno es permanente", a?ad¨ªa. Varios denunciaban alergia y faringitis cr¨®nica provocada por la toxicidad del combustible.
Juli¨¢n Moreno, uno de los portavoces de la protesta, reivindicaba embutido en su pijama tres puntos en los que todas las plataformas est¨¢n de acuerdo. El cierre nocturno de Barajas, entre las 22.00 y las 7.00; un programa de seguridad externa al aeropuerto de Barajas; y la creaci¨®n de una comisi¨®n, supervisada por el ministerio de Medio Ambiente, para la toma de decisiones relativas al aeropuerto. Respecto al primer y al tercer punto, Moreno asegur¨® que "son iniciativas que ya existen en otras ciudades europeas como Londres, Amsterdam o Par¨ªs".
Nora Margallo, que vive en la urbanizaci¨®n de Valtiba?ez, en el municipio de Paracuellos de Jarama, denunci¨® que su casa est¨¢ a s¨®lo dos kil¨®metros en paralelo de una de las pistas de despegue, la 36-R. "El ruido es infernal, y no quiero ni pensar lo que ser¨¢ en verano, con todas las ventanas abiertas", se lamentaba.
Algunos vecinos denunciaron "la corrupci¨®n urban¨ªstica que hay detr¨¢s de este asunto" y por la que "algunos alcaldes est¨¢n haciendo la vista gorda ante este problema", dec¨ªa un manifestante de Paracuellos de Jarama.
Alrededor de la una de la tarde, los vecinos pactaron con la polic¨ªa la entrada en la terminal de dos representantes de cada municipio con las pancartas de la cabecera de la protesta. Una vez dentro, y meg¨¢fono en mano, leyeron un comunicado que puso fin a la manifestaci¨®n.
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