La Sindicatura critica las irregularidades en las cuentas p¨²blicas de la etapa de CiU

La Sindicatura de Cuentas se estren¨® ayer ante el Parlament con un duro informe sobre los presupuestos de 2003, el ¨²ltimo a?o de CiU al frente del Gobierno aut¨®nomo. El informe, aprobado por el pleno con los votos a favor del PSC, ERC e ICV -y en algunos puntos, tambi¨¦n por el PP y CiU-, dio pie a duras cr¨ªticas de socialistas, ecosocialistas y republicanos, y revela un reguero de "malas pr¨¢cticas contables" e "irregularidades".

El s¨ªndico mayor de la Sindicatura de Cuentas, Joan Colom, compareci¨® ayer por primera vez ante el pleno del Parlament. Llevaba bajo el brazo el informe sobre los presupuestos de 2003, los ¨²ltimos gestionados por el Gobierno de Jordi Pujol. El informe era conocido, pero tampoco en esta ocasi¨®n Colom ahorr¨® cr¨ªticas a la gesti¨®n de CiU, algunas de ellas sangrantes.

El s¨ªndico mayor describi¨® un reguero de "deficiencias en la gesti¨®n", confes¨® su preocupaci¨®n por la "reiteraci¨®n de irregularidades" y constat¨® el refuerzo de una dudosa tendencia encaminada a "desplazar gastos de un ejercicio a los a?os siguientes". Todo ello, resumido en una cifra: el resultado presupuestario consolidado que present¨® CiU arrojaba un super¨¢vit de 284 millones de euros, que despu¨¦s el informe econ¨®mico-financiero realizado por el actual Gobierno aut¨®nomo -y refrendado por la Sindicatura- convirti¨® en un d¨¦ficit de 1.177 millones.

Los representantes del PSC, ERC e ICV se ensa?aron en el debate sobre el informe de la Sindicatura y finalmente votaron a favor del mismo. Populares y convergentes no apoyaron los puntos del dictamen que constatan "malas pr¨¢cticas contables" con la "clara voluntad de ocultar la deuda" en el ¨²ltimo ejercicio del mandato convergente. El diputado Jordi Turull defendi¨® las cuentas de 2003, que calific¨® como "el ejercicio presupuestario m¨¢s fiscalizado y m¨¢s analizado de la historia de la hacienda p¨²blica". Y sac¨® sus propias conclusiones, totalmente al margen de los datos que arroja el informe: asegur¨® que los gobiernos convergentes dejaron al tripartito "unas finanzas s¨®lidas y una administraci¨®n plenamente solvente".

Jordi Terrades, del PSC, y Jordi Castells, de ERC, se valieron del informe para atacar la gesti¨®n de CiU, pero el ecosocialista Joan Boada fue la voz m¨¢s cr¨ªtica de la C¨¢mara. Boada record¨® que Artur Mas era conseller en cap en 2003 y acus¨® sin ambages a CiU de "gesti¨®n ineficiente, de cometer actuaciones deliberadas para esconder deuda y, en general. de utilizar los recursos p¨²blicos de forma ineficiente y poco transparente". Asimismo hizo hincapi¨¦ en que el informe incluye acusaciones como la de "falsificar la liquidaci¨®n de presupuestos de entidades como el Instituto Catal¨¢n de la Salud", lo que origin¨® un peque?o rifirrafe con Turull, que le exigi¨® que retirara esa acusaci¨®n. Boada se neg¨® a hacerlo.

Deuda oculta

El dictamen presentado por Colom constata que las malas pr¨¢cticas contables que ha sacado a la luz la Sindicatura de Cuentas "no son fruto de errores, ya que ¨¦stas se repiten en la Generalitat y en distintos organismos p¨²blicos, y se constata que muchas de estas pr¨¢cticas tienen la clara voluntad de ocultar deuda", informa Europa Press. El gasto desplazado -"una pr¨¢ctica particularmente frecuente en la Administraci¨®n sanitaria y que no constituye una muestra de buena disciplina financiera", seg¨²n el informe- sobrepas¨® los 2.900 millones de euros en 2003, particularmente en el sector sanitario.

El s¨ªndico mayor, que hasta ahora interven¨ªa s¨®lo en comisi¨®n, se estren¨® ayer en su comparecencia ante el pleno, un nuevo tr¨¢mite que se realiza en aplicaci¨®n del nuevo reglamento del Parlament, por lo que Colom calific¨® el momento de "modestamente hist¨®rico".