Garz¨®n retoma las causas contra ETA

El juez Baltasar Garz¨®n regresa a finales de semana de Nueva York para hacerse cargo, en calidad de juez titular del juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 5 de la Audiencia Nacional, de las principales causas contra ETA-Batasuna que en estos 15 meses de excedencia ha instru¨ªdo, hasta el ¨²ltimo minuto, el juez Fernando Grande- Marlaska. Fuentes judiciales apuntan que los ¨²ltimos pasos de Grande-Marlaska pueden trazar una frontera que condicionar¨¢ la actuaci¨®n del juez Garz¨®n.

"Regresa con una tranquilidad de esp¨ªritu despu¨¦s de a?o y medio de trabajar en los temas del terrorismo internacional", dice el abogado Jos¨¦ Manuel G¨®mez Ben¨ªtez, que le ha frecuentado en Nueva York. Garz¨®n ocup¨® un apartamento en el Greenwich Village, barrio bien, bohemio y universitario.

"Baltasar respetar¨¢ el proceso pol¨ªtico si est¨¢ dentro de la legalidad", dice un abogado

"Hasta el ¨²ltimo fin de semana ha estado trabajando en sus seminarios, en los que asistido importantes responsables espa?oles como el comisario general de Informaci¨®n, Tel¨¦sforo Rubio; el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, o la fiscal de la Fiscal¨ªa General del Estado Dolores Delgado, mezclados entre 30 profesionales m¨¢s de otros pa¨ªses", se?al¨® una fuente del Centro sobre Derecho y Seguridad de la Escuela de Derecho de la Universidad de Nueva York.

Garz¨®n, que puede ser considerado como el juez que renov¨® la doctrina judicial en la lucha contra ETA, anticip¨¢ndose, en el verano de 2002, al Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, con su auto de ilegalizaci¨®n de Batasuna, abandon¨® Espa?a cuando a primeros de 2005 los contactos entre medios pr¨®ximos al Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y ¨¢mbitos cercanos a la banda terrorista ETA ya eran un secreto a voces.

En su libro Un mundo sin miedo, de febrero de 2005, Garz¨®n pr¨¢cticamente comenzaba su excedencia en la Audiencia para marchar a EE UU, con una advertencia velada al Gobierno socialista sobre el peligro de "verse embarcados en el laberinto trazado por la organizaci¨®n terrorista". En una entrevista a este diario en febrero de 2005, el juez, a la pregunta sobre si ese peligro ten¨ªa vigencia, no lo dud¨®: "S¨ª, s¨ª, y eso es lo que est¨¢ pasando ahora. Y entrar en ese juego es muy peligroso".

Desde su atalaya de Nueva York, mientras reun¨ªa a personalidades politicas variopintas, Garz¨®n ha seguido la evoluci¨®n del llamado proceso de paz o los contactos del entorno del Gobierno para alcanzar un final dialogado de la violencia. En febrero pasado, al presentar un libro en Madrid, se?al¨®, en presencia del l¨ªder del PP Mariano Rajoy, que la desaparici¨®n de ETA no puede tener lugar a cualquier precio y destac¨® el protagonismo inusitado de una banda terrorista en situaci¨®n terminal.

Como pr¨®logo al regreso de Garz¨®n, el juez Fernando Grande-Marlaska, ha desarrollado una actividad fren¨¦tica en las ¨²ltimas horas sobre los grandes sumarios iniciados por aquel: Batasuna y trama de extorsi¨®n de ETA, al punto que esta ¨²ltima semana al frente del juzgado 5 de la Audiencia Nacional traer¨¢ decisiones judiciales que habr¨¢n de condicionar la actividad inmediata de Garz¨®n.

"La pregunta es: ?exist¨ªa una urgencia para justificar actuaciones hasta la fecha misma del regreso de Garz¨®n? ?No era m¨¢s l¨®gico que el juez suplente, ante el regreso en pocos d¨ªas del juez titular, dejara a su decisi¨®n algunos de los asuntos que van a revertir finalmente sobre ¨¦l?", se?ala una fuente judicial.

La ¨²ltima pista sobre lo que piensa Baltasar Garz¨®n de la situaci¨®n de la justicia y el llamado proceso de paz la dio ¨¦l mismo el pasado 29 de mayo, a dos d¨ªas de la comparecencia de Arnaldo Otegi y otros siete miembros de la organizaci¨®n ilegalizada ante Grande-Marlaska."El poder judicial sabr¨¢ tener en cuenta la situaci¨®n actual", en referencia al alto el fuego de ETA y trabajar¨¢ "en este sentido" manteniendo sus actuaciones "dentro del imperio de la ley".

El 31 de mayo y el 1 de junio, tras tomar declaraci¨®n a Otegi y sus compa?eros, Grande-Marlaska decidi¨® no enviarles a prisi¨®n ni adoptar, salvo en el caso de uno de ellos, nuevas medidas cautelares. ?Fue la aplicaci¨®n del razonamiento seg¨²n el cual, como dijo Garz¨®n, "el poder judicial sabr¨¢ tener en cuenta cu¨¢l es la situaci¨®n actual?" Si fuese as¨ª, Grande-Marlaska ha tenido que compensar con creces en las ¨²ltimas semanas aquel savoir faire. "Baltasar Garz¨®n tendr¨¢ el m¨¢ximo respeto al proceso pol¨ªtico siempre y cuando los acuerdos est¨¦n dentro de la legalidad", precis¨® el abogado G¨®mez Ben¨ªtez.